Gamba limpiadora

Gamba limpiadora
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Especie dedicada a limpiar a los peces de los arrecifes de coral de sus molestos parásitos, ayudándose de las pequeñas pinzas con que está armado su primer par de patas.
Clasificación Científica
Nombre científicoLysmata grabhami
Reino:Animalia
Filo:Arthropoda
Clase:Crustacea
Orden:Decapoda
Familia:Hippolytidae
Hábitat:Marino

Gamba limpiadora (Lysmata grabhami). Se trata de una especie dedicada a limpiar a los peces de los arrecifes de coral de sus molestos parásitos, ayudándose de las pequeñas pinzas con que está armado su primer par de patas.

Características

De tamaño superior a las especies referenciadas anteriormente, entre 7 y 8 cm, reciben su nombre por su costumbre de alimentarse de parásitos presentes en los cuerpos, bocas y branquias de los peces.

Su coloración en tonalidades rojo y blanco advierte a los peces de está particularidad. Sin embargo está ocupación no la librará de peces que puedan depredar sobre ellas por lo que este dato deberá tenerse muy presente a la hora de decidirse por estas especies.

Alcanza los 7 centímetros de longitud, sin contar las larguísimas antenas; el cuerpo está ligeramente comprimido lateralmente, y tiene el rostro bien desarrollado, con dientes en sus dos bordes. El cuerpo es de color amarillento anaranjado por la parte inferior, el dorso presenta dos bandas de color rojo fuego, que delimitan una banda de color blanco iridiscente. El primer par de patas y los dos pares de antenas, larguísimas y muy sensibles, son blancos.

Las gambas limpiadoras son hermafroditas, y suele darse el hecho de que son primeramente machos y después se transforman en hembras.

Hábitat

Procede de aguas tropicales del Océano Atlántico. Es una especie tolerante con sus congéneres y en cierta forma gregaria. Fácil de mantener en cautividad y mucho más activa durante el día que la especie comentada anteriormente.

Es posible encontrarla en casi todas las aguas tropicales y subtropicales del planeta. Normalmente habita en cuevas y grietas en fondos rocosos del límite inferior de las algas fotófilas, entre los 5 y los 30 metros de profundidad. En muchas ocasiones se encuentra asociada a la anémona gigante.

El acuario adecuado para su mantenimiento es el acuario de arrecife de tamaño medio o grande dotado con un buen numero de escondrijos.

Fuentes