José M. Velasco

José María Velasco
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Datos personales
Nombre completoJosé María Tranquilino Francisco de Jesús Velasco Gómez Obregón
Nacimiento6 de julio de 1840
México D.F., Bandera de los Estados Unidos Mexicanos México
Fallecimiento26 de agosto de 1912
México D.F., La Villa, Bandera de los Estados Unidos Mexicanos México
Nacionalidadmexicano
OcupaciónPintor
Datos artísticos
ÁreaPintura
EducaciónAcademia de San Carlos

José María Velasco. Artista mexicano. Reconocido como un gran paisajista, Velasco practicó igualmente la fotografía y la litografía y su obra pictórica fue evolucionando hacia un paisaje menos romántico, menos preciosista, pero más íntimo, poético y monumental.

Trayectoria profesional

Nace en México D.F. en 1840. Se formó en la Academia de San Carlos de esa ciudad, donde fue discípulo de Eugenio Landesio. Pronto mostró sus excepcionales cualidades como dibujante y su sentido innato del color. Asimiló las enseñanzas de su maestro, y desarrolló una pintura academicista dotada de una fuerte personalidad.

En 1860, dos años después de haber entrado en la Academia, ganó una pensión que le permitió completar su formación. En 1868 fue admitido en la propia Academia como profesor de perspectiva.

Sus obras

En sus primeras obras, Velasco mostró toda su capacidad como colorista y su gran interés por los temas románticos. A pesar de este hecho sufrió una rápida evolución. Ya en 1866, en su obra Un Paseo por los Alrededores de México mostró un paisaje preciosista, con grandes contrastes entre luces y sombras, donde ya se incluían grupos de figuras en los que se intuía un inicial interés por el costumbrismo, ya que se mostraban grupos de todos los niveles sociales.

En 1875 exhibió su obra El Valle de México, pintura de gran formato donde se mostraba ya como un maestro de la monumentalidad y la grandeza, y que le consagró como uno de los mejores artistas de su tiempo. Dos años después pintó México, obra que fue considerada por la crítica moderna como su obra maestra. En ella volvió a tratar el tema paisajístico del valle de México pero incluía elementos simbólicos sobre la fundación de Tenochtitlan. En medio de un paisaje grandioso y monumental, Velasco inició todo lo que sería más tarde símbolo para identificar la esencia de México.

Tras estas dos grandes obras el artista realizó cuadros de pequeño formato, donde con frecuencia se utilizaban temas arqueológicos como Teotihuacan o El Baño de Netzahualcóyotl, o temas de arquitectura colonial, como la Catedral de Oaxaca, y vistas de sitios históricos, como Guelatao. En 1881 volvió a realizar un cuadro de grandes proporciones, Puente de Metlac, en el que la monumentalidad de la agreste naturaleza se enriquecía con la vista del puente e incluía un elemento novedoso: el ferrocarril que constituía el símbolo del progreso moderno y que era tratado como un elemento más del paisaje.

En 1889 Velasco se trasladó a Europa para asistir a la Exposición Universal de París, donde fueron expuestos sus paisajes. Obtuvieron un gran éxito y el artista recibió la condecoración de Caballero de la Legión de Honor. En este viaje pudo conocer la nueva pintura impresionista de la que recibió una tímida influencia, que se podía advertir en obras como la Hacienda de Chimalpa, de 1893, donde las formas se simplificaban y se tendía a un paleta de colores más fríos.

En 1893 exhibió sus obras en Chicago en la Feria Mundial donde fue premiado. De este momento es su magnífico Autorretrato, 1894, a lápiz. En los años siguientes realizó obras sobre diversos temas, El Citlaltépetl de 1897, donde retomaba el tema del Puente de Metlac pero en una versión más moderna y simplificada; la Vista de Querétaro de 1902; distintos y excepcionales en su obra eran los grandes cuadros para el Instituto Geológico, con temas de la Evolución de la Vida Marina y la Evolución de la Vida Continental, que en parte eran decorativos, por su composición, y que hoy día nos parecen fantásticos. Además es recurrente el tema del Valle de México. Velasco realizó al menos nueve obras, todas excepcionales, donde presentaba el mismo asunto tratado desde diferentes puntos de vista del valle. Dos años antes de morir pintó un pequeño cuadro, El Árbol Caído, que en cierto modo resultaba simbólico y autobiográfico.

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