La Tierra Media: Sombras de Guerra

La tierra media: sombras de guerra
Información sobre la plantilla
La-tierra-media-sombras-de-guerra.jpg
Es la secuela de la celebrada aventura de acción La tierra media: sombras de Mordor con Talion y Celebrimbor como protagonistas de un nuevo episodio de El Señor de los Anillos en el que tratarán de derrotar al Señor Oscuro forjando su propio ejército.
Desarrollador(es):Monolith Productions
Diseñador(es):Michael de Plater
Distribuidor(es):Warner Bros. Interactive Entertainment
Anterior:La tierra media: sombras de Mordor
Plataforma(s):Microsoft Windows
  • PlayStation 4
  • Xbox One
Lanzamiento:10 de octubre de 2017
Género(s):RPG,Acción
https://www.shadowofwar.com/

La tierra media: sombras de guerra. Videojuego de rol de acción desarrollado por Monolith Productions y distribuido por Warner Bros. Interactive Entertainment para Microsoft Windows, PlayStation 4 y Xbox One. Sulanzamiento se realizó 10 de octubre de 2017. Es la secuela del videojuego La tierra media: sombras de Mordor.

Descripción del juego

Videojuego de rol de acción en tercera persona con elementos de mundo abierto. El jugador toma el control de Talion, un explorador de Gondor que posee varias habilidades atléticas y de combate. Sin embargo, Talion también posee habilidades especiales proporcionadas por Celebrimbor, un espectro elfo que busca vengarse de Sauron y que vive dentro del cuerpo de Talion.

Jugabilidad

La segunda entrega de las aventuras de Talion en el universo de El Señor de los Anillos, que llega tras el éxito de crítica y público de la primera entrega. El objetivo para Monolith está claro: fortalecer aún más los puntos que hicieron de Sombras de Mordor una agradable sorpresa, sin olvidarse de seguir añadiendo nuevas mecánicas y posibilidades que acrecienten la leyenda de este título de acción y aventuras con toques roleros.

Este planteamiento queda claro nada más iniciar el juego, en el que se nos presenta una historia que parte casi literalmente desde lo último que supimos de la dupla formada por Talion y Celebrimbor. A partir de ahí, Sombras de Guerra se las ingenia para complicar la historia y plantear una nueva odisea, en la que la amenaza de Sauron es solo una de las preocupaciones de los héroes. De esta forma aparece primero Ella-Laraña, el asedio de Minas Ithil, el asedio a las fortalezas enemigas... El objetivo, recuperar el anillo único que creamos en el primer juego y plantar cara al señor oscuro. La narrativa comienza de una forma algo confusa, sobre todo por beber directamente de la fuente original, pero que poco a poco va cogiendo forma, conformando un hilo que se sitúa entre el Hobbit y La Comunidad del Anillo, y que cuenta con el apoyo de Tolkien State.

Profundiza mucho más en el personaje de Celebrimbor, pero también trata de prestar más atención al resto de personajes, hasta el punto de interesarnos conocer más de casi todos ellos. No es que la historia se desarrolle de manera precisamente ágil, dando a veces demasiadas vueltas para permitirnos dar el siguiente 'salto' pero sí que consigue atraer nuestra atención durante las decenas de horas que dura su extensa campaña. Dura mucho por llevarnos a diversas localizaciones (hay un total de 7 áreas), por ofrecer montones de tareas secundarias y coleccionables, y porque, además, incluye una cantidad y variedad de posibilidades que en un primer momento asusta.

Tanto es así que durante las primeras horas de juego no pararemos de aprender nuevas mecánicas y posibilidades, tanto referentes a Talion, como a posibilidades jugables o mecánicas nuevas específicas de este título. De este modo pronto aprendemos a las vicisitudes de Sombras de Guerra, y cómo en esta ocasión se profundiza mucho más en los sistemas roleros que en la primera entrega. No es solo que subamos de nivel al matar a capitanes orcos y cumplir tareas, mejorando las habilidades de Talion por el camino (y la evolución es muy notable, con nuevas habilidades que más y más formas de interpretación de la exploración y los combates). En este sentido el juego es muy satisfactorio, porque ofrece continuamente una recompensa que nos vuelve a enganchar al bucle de jugabilidad del título.

Este bucle incluso se acorta por la inclusión de botín equipable con distintos tipos de rareza (y con retos específicos para activar poderes únicos en algunas de ellas), y cuyo nivel máximo culmina con las armaduras legendarias únicas, que conseguiremos al realizar algunas de la tareas secundarias. ¿Os parecen pocas novedades? Pues a esto habría que añadir la posibilidad de engarzar y potenciar gemas de tres tipos distintos y así hacer que nuestras armas o armaduras tengan habilidades mejoradas o la inclusión de cofres con botín que podremos comprar con la plata que recolectemos. Aquí aparecen las casi siempre incómodas microtransacciones, que llegan en la forma de moneda de oro, y que sirve para acortar mucho los tiempos que tardamos de subir de nivel. Resulta algo injusto, sobre todo al compararlo con lo que tardamos en condiciones normales, pero no afecta a la partida en sí, que siempre se desarrolla con una curva de dificultad de lo más ajustada y satisfactoria.

La jugabilidad de este Sombras de Guerra es precisamente lo mejor que tiene el programa, puesto que sigue ofreciendo un sistema de combate muy similar al de la serie Batman: Arkham, con muchísimas dosis de exploración, sigilo, plataformeo y verticalidad, sin olvidarse de añadir toques únicos y distintivos propios, en forma de los muchos golpes especiales que vamos desbloqueando, y que no hacen más que sumar a la explosiva mezcla del título de Monolith. No es complicado hacerse con los controles, que casi siempre se muestran precisos, hasta el punto de que pasarán muy pocos minutos de juego antes de que nos sorprendamos a nosotros mismos ejecutando, torturando y dominando a los distintos tipos de orcos incluidos en La tierra media: sombras de guerra.

Porque con los enemigos y el famoso sistema Némesis tenemos otro de los factores que multiplican su variedad. Hay nuevos tipos de orcos, que pertenecen a distintas tribus (hay 6 en total), cada uno con rasgos visuales y habilidades características. A esto hay que unir que cada capitán es diferente en cuanto a aspecto, fortalezas y debilidades, y se comporta de manera única, volviendo de la muerte, ascendiendo, traicionando o luchando a su antojo en los gigantescos entornos abiertos que pulularemos en Sombras de Guerra (No habrá un gran mundo abierto y conectado, sino una serie de ellos independientes, unidos por un gran mapa del mundo que vemos desde el menú principal).

En cada una de las zonas que componen el enorme mapa en términos generales encontraremos una de las torres a modo de atalaya de Assassin's Creed que sirve para tener un punto de viaje rápido y no tener que ir de extremo a extremo del mapa. Con la inclusión del Palantir (los Ojos de Sauron de Las Dos Torres), tendremos un minijuego de búsqueda del tesoro que nos permitirá localizar ciertas zonas en las que se encuentre alguno de los coleccionables o pequeñas misiones que aporten algo más de variedad al conjunto principal sustentado por el Sistema Némesis.

En primer lugar tenemos las visiones de Ella-Laraña. El personaje, humanizado para la ocasión, tiene bastante peso en la narrativa principal del título, por lo que se ha querido profundizar más en aquello que sabe sobre la Tierra-Media, la búsqueda del Anillo de Sauron y demás elementos tomados (que no puros) de la obra de Tolkien. Se trata de unos puzles de fragmentos en los que jugar con la perspectiva para encontrar el punto exacto de estas formas geométricas en los que forman un todo y una escena correcta que permita acceder al recuerdo.

Mucho más dinámicas son las búsquedas de Ithildin, una serie de fragmentos de recuerdos de Celebrimbor que nos recuerdan poderosamente a los glifos ocultos que durante varias entregas vimos en Assassin's Creed (juego del que ambos Sombras beben más de lo que parece). Accediendo a la visión espectral de Celebrimbor, esa adaptación de la Vista de Águila encontraremos unas palabras en élfico que tendremos que componer. Lo divertido de todo esto es que cuando encontremos todas tendremos fragmentos de palabras en nuestro idioma que tendremos que componer rellenando los huecos en un poema.

En lugar de presentar un modo desafío, entrando en los túmulos podremos, siendo esta una novedad de Sombras de Guerra, meternos en la piel del Celebrimbor del pasado. Se trata de cortas misiones que nos presentan una serie de objetivos y nos evalúan nuestro desempeño con tres tipos de trofeo de bronce, plata u oro. Completando el máximo galardón, habremos sincronizado ese recuerdo a la perfección y se nos premiará con piezas especiales de equipo de un conjunto bastante poderoso del Señor de Luz.

Los entornos, igual que los enemigos son distintos entre sí en cuanto ambientación, distribución y retos, haciendo que la experiencia de Sombras de Guerra sea casi siempre cambiante, aunque el núcleo de la experiencia permanezca invariable: pelea, salta, sobrevive y mejora (hay algún 'monta' por el camino, al aumentar el juego el número de bestias que podremos controlar, amén de mejorar su manejo). Ese centro es la clave de la diversión de la producción, puesto que nos mantiene pegados al mando aunque solo sea por el placer de matar a unos cuantos enemigos más. Pero es que es eso, y mucho más, como bien demuestra el continuo crecimiento en la partida, al no desvelarse todas las cartas jugables hasta bien entrada la primera decena de horas de juego.

Completa la oferta de juego ciertas modalidades online para un título que se sigue resistiendo a un PvP al uso. En primer lugar, tendremos misiones especiales que dejan de lado nuestro Sistema Némesis... para irse al del vecino. Tal y como suena, las misiones de revancha en línea nos permiten enfrentarnos al orco que mató a alguno de nuestros compañeros en la lista de amigos de nuestra plataforma. De este modo, obtenemos mejores recompensas que acabando con nuestros propios asesinos y es una forma bastante rápida de obtener equipo de calidad.

Requisitos para jugar

Requisitos mínimos

  • Sistema operativo: Windows 7 SP1 con Platform Update para Windows 7
  • Procesador: Intel i5- 2550K, 3.4 GHz
  • Memoria: 8 GB RAM
  • Tarjeta de video: GeForce GTX 670 | Radeon HD 7950
  • DirectX: Versión 11.
  • Disco duro: 60 GB de espacio libre

Requisitos recomendados

  • Sistema operativo: Windows 10 (versión 14393.102 o superior)
  • Procesador: Intel Core i7-3770, 3.4 GHz
  • Memoria: 16 GB RAM
  • Tarjeta de video: GeForce GTX 970 o GeForce GTX 1060 | Radeon R9 290X o Radeon RX 480
  • DirectX: Versión 11.
  • Disco duro: 60 GB de espacio libre

Fuentes

  • Artículo: La tierra media: sombras de guerra. En el sitio: es.ign.com. Consultado el 15 de noviembre de 2018.
  • Artículo: Videojuego. En el sitio: as.com. Consultado el 15 de noviembre de 2018.