Pedro Albéniz y Basanta
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Pedro Albéniz y Basanta. Fue considerado por sus veladas músico-literarias junto a las plumas más brillantes del país, como el también riojano Manuel Bretón de los Herreros, célebres en Madrid, por ello fue un activo dinamizador de la vida cultural madrileña, como tambien maestro de capilla del Palacio Real de Madrid.
Sumario
Síntesis biográfica
Nacimiento
Nació en Logroño el 14 de abril de 1795
Estudios
Fue a París para continuar sus estudios, siguiendo los cursos de Henri Herz y Friedrich Kalkbrenner.
Ámbito familiar
Fue hijo de Mateo Antonio Pérez de Albéniz de quien recibió su primera formación, Mateo un afamado compositor, intérprete de teclado y teórico. Su residencia desde niño en San Sebastián se debe al nombramiento de organista de Santa María a favor de su padre. Apenas contaba diez años cuando fue nombrado organista de San Vicente. Opositó para la plaza de organista de Santiago de Bilbao. En la capital francesa entabló una amistad con Rossini.
Trayectoria profesional
Vino en 1828 a San Sebastián para actuar frente a Fernando VII y su esposa cuando éstos visitaron la ciudad. En 1830 se le nombró organista de Santa María, luego en la iglesia catedralicia de La Redonda en Logroño. Dio conciertos de violín en los salones de Santa Catalina y en el Palacio Real de Aranjuez. Creado el Conservatorio de Música fue nombrado maestro de piano y acompañamiento. En 1839 se le ve de primer organista de la Real Capilla. En 1840 su Método de Piano era adoptado oficialmente para la enseñanza. En 1841 se le nombra Maestro de piano de Isabel II. Los veranos descansaba en los baños de Arechavaleta, Santa Águeda y Alzola. En 1830 había puesto música a los Eguerritako Kantak de José Vicente Echegaray.
Pedro Albéniz fue vicepresidente primero del Liceo Artístico y Literario en 1838 y en 1841 la Academia Filarmónica de Madrid le nombró Distinguido profesor, Maestro de Música y Socio de Honor de Madrid de dicha entidad.
Cuando la Reina María fundó el Conservatorio de Madrid fue nombrado profesor en 1830 y organista de la capilla real en 1834. Ofreció clases privadas a la Reina Isabel II y fue el primero en introducir métodos modernos de técnica para teclado en la pedagogía española. Aunque sus composiciones no ofrecen gran interés, y generalmente son inferiores a las sonatas de su padre, él escribió un Método Completo para Piano (Madrid, 1840 que llegó a ser el texto de estudios oficial del Conservatorio de Madrid.
Es el autor de una enorme colección de obras de música religiosa y profana que se guardan en el Archivo Eclesiástico de San Sebastián, concretamente en el Eresbil de la localidad guipuzcoana de Rentería. También existen obras suyas archivadas en el Palacio Real, la Biblioteca Nacional, en el Conservatorio de Música “María Cristina” de Madrid y en el “Archivo de Música de Orleáns” en Canarias.
En memoria de Pedro Albéniz
- Pedro Albéniz fue el introductor en España del piano romántico y autor del método por el que han estudiado grandes músicos de la escuela española.
- El homenaje se inscribe dentro del Plan Memoria de Madrid, que recuerda a figuras representativas de la vida de la ciudad.
- El Ayuntamiento ha colocado una placa en la casa donde Pedro Albéniz falleció en 1855, sita en la calle Arenal, 26.
Distinciones
También fue Caballero de la Real y Distinguida Orden Española de Carlos III y de la Orden Española de Isabel La Católica en 1843, y Secretario Honorífico de S.M. la Reina Isabel II en 1847.
Muerte
Muere en Madrid el 12 de abril de 1855. A su muerte había dejado escrita la música y la ordenación de los cantos del libro de danzas de Juan Ignacio de Iztueta.
