Rosibel Morera Agüero
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Rosibel Morera Agüero. Narradora, poetisa, ensayista e historiadora costarricense. Figura destacadísima en el panorama literario y universitario centroamericano de la segunda mitad del siglo XX, está considerada como una de las voces más representativas de la presencia femenina en el ámbito cultural de Costa Rica y su área de influencia geográfica.
Trayectoria
Tras haberse decantado por el aprendizaje humanístico, cursó estudios secundarios en el Conservatorio Castella de San José, de donde egresó, graduada, para continuar su formación académica en la Facultad de Filosofía de la Universidad Nacional de Heredia. Licenciada en 1979, pronto pasó a formar parte de la plantilla docente universitaria costarriqueña, para impartir clases de Historia y Teoría del Arte en la susodicha Universidad Nacional.
Alentada desde que era una niña por una acusada vocación literaria, Rosibel Morera Agüero alternó su dedicación a la docencia con el cultivo de la creación poética, narrativa y ensayística. Cuando era todavía una adolescente, a su salida del mencionado Conservatorio Castella, ingresó en el Círculo de Poetas Costarricenses, donde pronto adquirió un prestigio que la señaló como una de las voces más singulares y renovadoras de la joven lírica centroamericana.
Toda la obra literaria y ensayística de Rosibel Morera se caracteriza por su afanosa búsqueda de la claridad, de un registro transparente y luminoso que la propia autora identifica con el objetivo al que debe aspirar el creador:
Premios y reconocimientos
Poesía
No es de extrañar, por ende, que su obra poética haya sido galardonada con algunos de los premios y reconocimientos más relevantes de todo el ámbito cultural hispanoamericano, como el prestigioso Premio Latinoamericano de Poesía "Alfonsina Storni", concedido en Buenos Aires (Argentina), que ha ido a parar a Rosibel Morera en dos ocasiones: en 1986, por su poema titulado "Arte poética: Prisión y lumbre de los espejos"; y en 1988, por su composición llamada "Hábitat", que ofrece una visión panorámica de todo el continente americano desde una amplia perspectiva estética.
En 1992 fue distinguida con una Mención Honorífica en la modalidad de poesía de los Juegos Florales de Quetzaltenango, por su colección lírica titulada Yo sólo sé decirme a los amantes. Entre el resto de su abundante producción lírica, cabe reseñar el volumen de versos titulado Cartas a mi Señor, de 1972, con el que irrumpió en el panorama literario costarricense.
Narrativa
En su faceta de narradora, Rosibel Morera Agüero se ha ejercitado principalmente en el cultivo del género cuentístico, al que ha enriquecido con algunas piezas tan celebradas como "La isla" (recogido en la célebre muestra antológica Relatos de mujeres). Sus mejores trabajos en este difícil género de la narrativa han quedado compilados en un volumen aparecido bajo el epígrafe de Resurrecciones y reencarnaciones de Lázaro Fuentes (1988). El resto de la producción narrativa de Rosibel Morera se completa con el libro titulado Historias de un testigo interior (Heredia: Editorial EUNA, 1990), que en 1989 fue galardonado con el Premio de Narrativa "Una Palabra", concedido por la Universidad Nacional de Heredia.
Ensayos
Además de su contribución a la lírica y a la prosa de ficción, Rosibel Morera se ha distinguido por sus brillantes aportaciones al género ensayístico, que han merecido los elogios del celebérrimo antropólogo rumano Mircea Eliade, una de las autoridades que con mayor entusiasmo animó a la autora a seguir adelante con sus investigaciones en este terreno del saber humano. Mircea Eliade destacó por encima de todo un ensayo de Rosibel Morera titulado La proyección escénica: Hierofanía (...) del arte del actor, obra que en 1983 había sido galardonada con el Premio de Ensayo de la Universidad Nacional de Heredia.
