Síndrome de Ekbom

Síndrome de Ekbom
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El síndrome de Ekbom consiste en creer que la casa está infectada, pudiendo incluso llegara sufrir picaduras e irritaciones.

El Síndrome de Ekbom, también denominado delirio parasitario, delirio de infestación o parasitosis imaginaria, es una enfermedad psíquica en la que los enfermos creen tener infestaciones en su casa o sobre si, pudiendo llegar a sufrir picaduras e irritaciones, a veces autoproducidas al rascarse compulsivamente.

Generalidades

Suele ser detectada por especialistas entomólogos o aplicadores de plaguicidas que tras la visita solicitada por el enfermo no consiguen localizar insecto alguno en la vivienda o sobre el cuerpo de la persona. Los enfermos a menudo acuden a estos especialistas con supuestas muestras de los organismos en bolsas o tarros que pueden estar vacíos o contener simples muestras de polvo del domicilio.

Como en otras enfermedades psiquiátricas, el punto más difícil consiste en tras la diagnosis conseguir explicar el problema al enfermo, y derivarlo a un médico.

En el delirio de parasitosis, los pacientes que la sufren tienen la convicción fija de que su piel está infestada de parásitos, aunque no haya evidencia clínica para esto. El término fue creado por Karl Ekbom en el año 1938; debido a esta causa, se habla también del «síndrome de Ekbom». Pero se puede confundir con el Síndrome de las piernas inquietas o Síndrome de Wittmaack Ekbom.

Causas del síndrome de Ekbom

Entre las causas demostrables se incluyen el abuso de cocaína, la desintoxicación del alcohol, las enfermedades cerebrales y los traumatismos cerebrales.

Cuadro clínico

El delirio de parasitosis es una alucinosis orgánica, una perturbación sin perturbación de conciencia con alucinaciones acústicas u ópticas entrando una y otra vez, las que sólo a veces son reconocidas como tales. Eso se tiene que comprender en el sentido que una alucinación táctil crónica cambia raramente en delirio. El término describe la idea delirante de un ser vivo (normalmente, gusano o insecto) que se encuentra bajo la piel y se mueve, lo que conduce a miedo y comezón.

Tratamiento

El tratamiento para la formación dependerá de la causa subyacente. Una crema tópica, como la hidrocortisona, puede disminuir el picor en algunas personas. Las cremas humectantes o de barrera también pueden ayudar al mantener la piel sana e hidratada.

También es recomendable colocar una bolsa de hielo en las áreas afectadas, lo que puede proporcionar un efecto calmante para un alivio inmediato.

Si la causa de la formicación es la enfermedad de Parkinson, el herpes zóster o la fibromialgia, un especialista recetará la medicación adecuada.

Si la causa es la medicación, los médicos recomendarán alternativas como un antihistamínico, que puede ayudar a reducir las sensaciones de la formicación.

Posibles complicaciones

Si una persona experimenta este trastorno de tipo delirante, puede ser propenso a rascarse constantemente, lo que puede romper la piel y permitir la entrada de bacterias y posiblemente causar el desarrollo de infecciones.

Las posibles complicaciones del rascado incluyen: gangrena, trismo, fiebre, pérdida de sangre, en casos severos, sepsis

Otras complicaciones de la formicación incluyen: cansancio, frustración, mala calidad de sueño, depresión,ansiedad, problemas para concentrarse o sensación de rigidez. Es importante buscar consejo médico para cualquier complicación, ya que sentirse cansado o deprimido puede empeorar la formicación.

El síndrome de Ekbom es un síntoma de una afección subyacente como hemos visto, por lo que el tratamiento completo de esta afección normalmente debería eliminar los síntomas. La condición puede ser física, psicológica o relacionada con el uso indebido de sustancias. Si la causa no es aparente, la detección de posibles condiciones podría detectar algo previamente no diagnosticado. De ahí que hablar abierta y honestamente con un médico les permitirá desarrollar un plan de tratamiento personalizado para mejorar la afección lo antes posible.

Referencias