Grabiel Falopio


Gabriel Falopio
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Fue uno de los más importantes anatomistas y médicos italianos del siglo XVI.
NombreGabriel Falopio
Nacimiento1523
Módena, Bandera de Italia Italia
Fallecimiento9 de octubre de 1562
Bandera de Italia Italia
OcupaciónCientífico e investigador

Gabriel Falopio. Fue el primero en hacer una descripción detallada del desarrollo y estructura de los huesos, particularmente del cráneo; de los músculos, órganos genitales, de la audición, de la vista y otros.

Síntesis biográfica

Nace en Módena, Italia en 1523, también conocido por su nombre en latín Fallopius, fue uno de los más importantes anatomistas y médicos italianos, del siglo XVI. Además trabajó en la historia natural, expuso sus descubrimientos en su tratado «Observaciones de anatomía».

Su nombre se conservó hasta la actualidad, en la designación de varias for­maciones anatómicas: las trompas de Falopio, el conducto de Falopio. Provenía de una familia noble, pero muy pobre; y sólo por una dura lucha, logró obtener una educación. Dificultades financieras lo llevaron a unirse al sacerdocio, y en 1542, fue canónigo en la catedral de Modena. Estudió medicina en Ferrara, una de las mejores escuelas de medicina de la época en Europa. Fue profesor en Ferrara, Pisa y Padua.

Contribuciones más destacadas

Falopio sólo publicó un libro: las Observationes anatomicae (1561), comentario a la Fábrica de Vesalio, sin ilustraciones, que perseguía la corrección de los errores cometidos por su predecesor así como la adición de datos nuevos. Cuando se publicó le envió un ejemplar a Andrés Vesalio, quien entonces se encontraba en Madrid. Las referencias al "divino Vesalio" y la cortesía de sus críticas movieron a éste a escribir una réplica amistosa con el título Anatomicarum Gabrielis Falloppii observationum examen (1564). Aunque tiene poco valor científico porque su autor estaba ya alejado de la investigación y de los recursos necesarios, es interesante ya que en ella explica cómo llegó a ciertas conclusiones, admite algunos errores y se queja de la esterilidad científica de la corte real española de aquella época.

La obra de Falopio está repleta de hallazgos originales y de excelentes descripciones. Por ejemplo, las estructuras del órgano auditivo (canales semicirculares, acueducto), y las del ojo (coroides, músculos oculomotores, ligamento ciliar). Se le conoce más, sin embargo, por la estructura que lleva su nombre: trompas de Falopio, o trompas uterinas, (tubo largo y delgado que se extiende desde el ángulo lateral superior del útero hasta el ovario del mismo lado. Adherido al ligamento ancho por el mesosalpinx consta de una ampolla, un infundíbulo o pabellón, un istmo y dos orificios, uno abdominal y otro uterino). Además, Falopio también se percató de la existencia de tres túnicas en la pared de la vejiga y de su esfínter interno.

Más importancia tiene el hecho de que Falopio fuera de los primeros en estudiar el desarrollo embriológico de algunos huesos y de los dientes. Con la realización de autopsias a fetos, recién nacidos y niños, aportó importantes observaciones sobre los centros primarios y secundarios de osificación. También hizo una brillante descripción de la dentición primaria y de su sustitución por la secundaria, llamando la atención sobre el hecho de que el tipo de tejido difería del óseo. Como señala Laín, esto significa que la forma anatómica comienza a estudiarse desde el punto de vista de la génesis. En unas breves lecciones que Koyter publicó en 1575, Falopio discute y niega la condición de "simples" a muchas de las "partes similares" del cuerpo animal, que Aristóteles les había atribuido. Para Falopio, estas partes se hallarían compuestas de "fibrae" ejecutoras de funciones distintas como el movimiento ("voluntario" en la fibra "carnea", "involuntario" en la fibra "cartilaginea" y en la arteria, "mixto" en las fibras del tubo digestivo); la comunicación, porque de la dirección espacial de los filamentos constitutivos de sus paredes depende el curso de poros y canales del cuerpo; y la edificación de las partes sólidas, ya que las fibras elementales se urden entre sí y constituyen "texturae" o tejidos. Falopio, pues, piensa que los tejidos del cuerpo animal se hallan constituidos de una trama lineal, superficial o tridimensional de fibras elementales. Aquí nos encontramos, pues, con otra novedad en lo que se refiere a la estequiología. Puede decirse que Falopio, y también Fernel, vieron en la fibra el componente elemental y fundamental de todas las partes sólidas del organismo. Más tarde, los autores del siglo XVII ampliarían esta doctrina en dos sentidos: la especulación y el examen microscópico.

Muerte

Aunque murió con menos de 40 años el 9 de octubre de 1562 en Padua, dejó su huella para siempre en el campo de la Anatomía. Falopio se dedicó sobre todo a la anatomía de la cabeza y contribuyó al conocimiento del oído interno y del tímpano. Estudió también los órganos reproductores de ambos sexos y describió las trompas de Falopio, que llevan su nombre.

Este anatomista y cirujano italiano también diseñó un precursor del condón, que consistía en una vaina hecha de tripa de animal y lino, que se fijaba al pene con una cinta, destinado a prevenir las enfermedades de transmisión sexual como la sífilis y la gonorrea.

Fuente

  • Libro de Anatomía Humana. Parte I. Página 32, Autores: M. Prives, N. Lisenkov, V. Busbkovich.