Esteban A. Vázquez

Esteban de los Ángeles
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San Juan de Letrán, reconstrucción, Bedoya.jpg
Médico cubano
NombreEsteban de los Ángeles Vázquez Rodríguez
Nacimiento2 de agosto de 1692
La Habana, Bandera de Cuba Cuba
Fallecimiento2 de febrero de 1742
La Habana, Bandera de Cuba
OcupaciónMédico

Esteban de los Ángeles Vázquez Rodríguez. Médico cubano, uno de los primeros alumnos de Medicina de la Real y Pontificia Universidad de San Gerónimo de La Habana, de la cual fue profesor.

Sintésis biográfica

Nació en La Habana, el 2 de agosto de 1692, y murió el 2 de febrero de 1742.

Estudios

Ingresó como novicio en el Convento de San Juan de Letrán para estudiar Artes y, aunque en 1726 poseía ya órdenes menores para cursar la carrera eclesiástica, decidió abandonar el aula conventual, para, con el mismo entusiasmo que sus compañeros José Arango Barrios y José Melquíades Aparicio, sentarse en la banca universitaria que entonces germinaba en aquel convento.

Tras cursar satisfactoriamente con sus condiscípulos las clases de medicina impartidas por Francisco González del Álamo, se graduó como bachiller el 23 de julio de 1729, previa lectura de su lección reglamentaria el 13 de abril. Aprobado por el protomédico Francisco Teneza, recibió el 30 de octubre de 1730 el título que presentó luego al Cabildo, el cual lo aceptó para el ejercicio de la profesión el 10 de noviembre.

Labores como médico

A la muerte del doctor Louis Fontaine Cullembourg en 1736, quedó vacante la Cátedra de Anatomía de la Universidad, que se convocó a oposición.

Vázquez se presentó como único opositor y la obtuvo por unanimidad, al estimarse que reunía los conocimientos requeridos para su lectura. Con ello logró la aptitud para aspirar a los grados mayores de licenciado y doctor en Medicina.

El primero le fue otorgado el 28 de noviembre de 1736; el segundo lo recibió el 31 de enero de 1737.

En relación con su desempeño como catedrático, puede argumentarse a su favor que su regencia en la Cátedra de Anatomía prometía aportar grandes beneficios a la enseñanza de esa asignatura en virtud de lo incompleto que resultaba su estudio en aquella época, limitado a la simple descripción, sin comprobación ni demostración en cadáveres, pues en realidad era el único que disponía de la preparación necesaria para subsanar esa deficiencia.

Muerte

A pesar de sus aportes docentes, sus avances iniciales se vieron frustrados, pues no pudo siquiera completar su sexenio como catedrático, al sorprenderlo la muerte el 2 febrero de 1742.

Fuente