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Revisión del 09:41 16 feb 2012

Francisco Huerta Rendón
Información sobre la plantilla
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NombreFrancisco Octavio Francisco huerta Rendón
Nacimiento15 de Noviembre de 1908
Guayaquil, Bandera de Ecuador Ecuador
Fallecimiento15 de noviembre de 1970
Ecuador, Bandera de Ecuador Ecuador
Nacionalidadecuatoriana
EducaciónSuperior
CónyugeEsmeralda Freire Triviño
PadresLuis Felipe Huerta y Gómez de Urrea y Raquel Rendón Constante
Francisco Huerta Rendón Arqueólogo, Maestro y Periodista.

FRANCISCO HUERTA RENDON Nació en Guayaquil el 15 de Noviembre de 1908 y fue bautizado con los nombres de Francisco Octavio Huerta Rendón.

Síntesis Biográfica

Hijo legítimo de Luis Felipe Huerta y Gómez de Urrea, Comandante, Jefe de la I Brigada, encargado de la Jefatura del Cuerpo de Bomberos de Guayaquil durante la ausencia del país del Primer Jefe Asisclo Garay y administrador de la fábrica de velas de Eloy Loor; y de Raquel Rendón Constante, guayaquileños. El mayor de cuatro hermanos.

Estudios

Aprendió las primeras letras en la escuelitas de las señoritas Palmieri, después tuvo profesores en casa y hasta fue discípulo del célebre pedagogo Alfredo Barroso. En 1917 inició la secundaria en el Vicente Rocafuerte, donde su tío Pedro José era profesor de Historia y ejercía el Vicerrectorado, pero no se graduó.

Por el divorcio de sus padres vivía con sus tías paternas en el primer piso de la casa de los Huerta recibiendo la decisiva influencia de su tío historiador, quien acostumbraba como simple amateur recolectar tiestos arqueológicos en las pampas de Puna. Juntos expedicionaron a varios sitios y hasta iniciaron excavaciones en las cercanías de Posorja.

En 1925 hizo amistad con Carlos Zevallos Menéndez, consultando en la Biblioteca Municipal los Boletines de la Sociedad Ecuatoriana de Estudios Históricos, transformada en Academia Nacional de Historia, donde aparecían trabajos de Otto Von Buchwald, Philip Ainsworth Means, Max Uhle, Jacinto Jijón y Caamaño y Carlos Manuel Larrea.

En 1929 Uhle comenzó a excavar en el austro ecuatoriano y descubrió en Cuenca las ruinas de la antigua ciudad incásica de Tomebamba. El 33 Modesto Chávez Franco desde la dirección de la Biblioteca Municipal de Guayaquil y en unión del dibujante José Antonio Hidalgo Checa divulgó los dibujos precolombinos punáes.

Todo ello llamaba poderosamente su atención despertando su curiosidad por el pasado precolombino, pero la estrechez del medio ambiente y su modesta condición económica le impidió profesionalizarse; sin embargo, era tanta su ansia de saber que empezó a leer todo cuanto caía en sus manos sobre las antiguas civilizaciones americanas, consultó a los principales Cronistas de Indias también revisó a los bibliógrafos y americanistas y con el paso de los años este autodidacta genial descifró los mensajes de las viejas civilizaciones de la costa ecuatoriana.

Entre 1928 y el 1929 tuvo un breve paréntesis en el Normal Juan Montalvo de Quito y egresó con el título de profesor de segunda educación. De regreso a Guayaquil dirigió en Julio de 1930 la revista "Mosaicos", de corta duración, donde aparecieron algunos de sus primeros relatos. En Enero del 31 comenzó a escribir para el semanario "Barricada" de tinte socialista y también de escasa vida, pues el país vivía una de sus más agudas crisis económicas.

Obra y trabajos

En Octubre obtuvo en el Concurso de Poesía organizado por la Asociación Regional del Montubio, el Primer Premio, con su poema "Matapalo", dentro de la más pura línea vanguardista, a medias entre lo bucólico y mágico, con trasfondo de realismo social.

En 1932 comenzó a colaborar en la acreditada revista del Vicente Rocafuerte con el artículo "Un centenario notable, Juan Francisco Champollion, genial descifrador de los jeroglíficos egipcios" y con su amigo Adolfo Simmonds trabajó en "Semana Gráfica" que se editaba en la imprenta de “El Telégrafo”.

Entre el 1933 y el 1936, quizá motivado por su ancestro manabita realizó excavaciones en la costa de esa provincia, sobre todo a la altura de Manta y Bahía, describiendo las culturas que habían florecido por esos contornos y que hasta entonces eran casi desconocidas a no ser por simples referencias aisladas y dictaminó que se trataba de civilizaciones independientes, de orígenes diversos. Años después, el padre Pedro Porras Garcés le acreditó el mérito de esos descubrimientos, considerándole el precursor de la arqueología en Manabí.

Desde el 1936 trabajó con sus hermanos Luis Felipe y David en la Radio Ecuador, de propiedad de Juan Sergio Behr, siendo esta la primera emisora comercial que operó en Guayaquil. Posteriormente fue por muchos años director del programa “Gong”, diario hablado del aire, que se emitía por la radio Ondas del Pacífico y cuyo staff de colaboradores estaba integrado por Ángel Celio Castro, Mauro Velásquez Ceballos, David Huerta Castelo, etc.

El 1937 figuró entre los fundadores de la "Sociedad de Artistas y Escritores Independientes". El 1938 comenzó a dictar clases de historia en el Vicente Rocafuerte y publicó en esa revista el ensayo "Historia del Arte Ecuatoriano y una crónica sobre el viejo colegio”. El 1939 insistió en esos temas con "El Arte Precolombino".

El 1940 dio a la luz los resultados de una parte de sus investigaciones en Manabí en "Una civilización precolombina en Bahía de Caráquez” en 11 páginas, analizando el complejo cerámico y de figurines encontrado en el centro de la población actual, diferentes a los de las culturas Manteña y de Cerro de Hojas.

En 1942 editó "La deformación intencional del cráneo en el Ecuador prehispánico" y en la revista del Colegio Vicente Rocafuerte publicó sus descubrimientos en Manabí.

La década de los años 40 fue muy atareada. Entre el 41 y el 45 contribuyó como agente del consulado norteamericano en Guayaquil a la derrota del nazismo y del fascismo, e hizo una vida de intenso periodismo radial a través de Ondas del Pacífico, donde mantuvo un programa de noticias y opiniones tres veces al día por muchos años.

Tras la revolución popular del 28 de Mayo de 1944, al fundarse en 1945 fue designado miembro del Núcleo del Guayas de la Casa de la Cultura y profesor de Historia del Arte, de América y de Arqueología, de la recién fundada Facultad de Filosofía, Pedagogía y Letras de la Universidad de Guayaquil. La inauguró y fue su primer Decano, funciones en las que se mantuvo un quinquenio hasta el 49. Durante ese tiempo fue formando el Museo de la Facultad con piezas de arqueología de su colección privada: allí acostumbraría después a dictar sus clases con la pasión que sabía poner en todo lo suyo, alzando los brazos, elevando la voz, dejando traslucir sus fuertes emociones, animando cada explicación con ese tono tan personal que siempre lo distinguía.

En 1946 publicó "De nuestro pasado aborigen; la sonrisa, lo sexual, brujería y medicina" en 31 páginas, en la Biblioteca Mínima de Ecuatorianidad de la Universidad de Guayaquil.

Ese año descubrió en terrenos de la hacienda Chorrera una Fase cultural diferenciada, posiblemente de origen Machalilla, que le asombró por la belleza plástica de sus tiestos.

El 47 contribuyó al Centenario del fallecimiento de Rocafuerte con una síntesis biográfica en 16 páginas y ayudó al Dr. Abel Romeo Castillo a elaborar los programas de estudio, así como a inaugurar la Escuela de Periodismo, que nació adscrita a la Facultad de Filosofía y Letras.

El 50 entró a la redacción del diario "La Nación" donde realizó una extraordinaria labor cultural. Entre el 52 y el 54 dirigió su Suplemento dominical, también escribía los editoriales y llegó a simpatizar con la línea política del CFP y de su líder Carlos Guevara Moreno, rehusando sistemáticamente afiliarse a ese Partido porque siempre se consideró un liberal. Mientras trabajaba en La Nación fue buscado por Emilio Estrada que le requirió sus consejos como arqueólogo, convirtiéndose en excelentes amigos.

El 54 editó "Arqueología del Litoral ecuatoriano, notas para su conocimiento y estudio" en 45 páginas y "Una urna funeraria de la Libertad y su muerte ritual" en 6 páginas e ilustraciones. El 55 "Descripción de la Gobernación de Guayaquil el año de 1605" y habiéndose terminado La Nación, decidió publicar sus interesantes trabajos en los Cuadernos de Historia y Arqueología del Núcleo del Guayas con "San Biritute, señor de Zacachún" en 9 páginas y abundantes láminas, amplia exposición sobre dicho menhir tallado, cuya principal propiedad para los campesinos, era hacer llover en la región de Zacachún, recinto de la parroquia Juntas. En este año empezó a colaborar en El Universo y a dirigir los Cuadernos de la CCE hasta el 68, que le reemplazó el Dr. Jorge W. Villacrés Moscoso.

El 22 de Junio de 1970 el Presidente Velasco Ibarra cometió la barbaridad de proclamarse dictador y echó de la Alcaldía a Huerta Montalvo. El golpe moral fue muy duro para don Pancho y le obligó a retirarse de casi toda actividad.

Muerte

Vistazo le designó redactor de Honor, siguió conservando su vieja cátedra universitaria y cuando su hijo salió al exilio, le sobrevino un violentísimo infarto la tarde del domingo 15 de Noviembre. Tenía solamente 62 años pero aparentaba más edad.

El cadáver fue trasladado a una Capilla Ardiente que se levantó en el salón principal de la Casa de la Cultura y hubo que esperar el penoso retorno de su hijo. Su entierro se realizó el 16 con gran acompañamiento. Guayaquil había perdido a uno de sus más importantes hijos y el país a un gran arqueólogo.

No dejó obra porque siempre le tocó vivir en situación de apremio, prisionero de las deudas y del subempleo; pero se pueden rastrear y recoger sus numerosos escritos a través de La Nación, El Universo, La Hora y El Telégrafo, Vistazo, la revista del Vicente y los Cuadernos del Núcleo del Guayas.

Fuente

http://www.diccionariobiograficoecuador.com/tomos/tomo11/h1.htm