Historia del municipio Media Luna (provincia Granma)

Historia del municipio Media Luna
Información sobre la plantilla
Cronología
Origen del nombre Media Luna
Comunidades primitivas
Etapa colonia
Guerra de Independencia
Republica neocolonial
Guerra de Liberación nacional
Revolución en el poder
Organización revolucionaria del pueblo
Federeción de mujeres cubanas
Aconteciminetos más significativos de la etapa revolucionaria
Curiosidades históricas

Media Luna. Municipio granmense. Su población en el 2000 era aproximadamente de 36000 habitantes, de los cuales 17000 habitan la zona urbana. Abarca un área de 375,5 km y se subdivide en 10 consejos populares, por lo que es considerado el municipio de menos extensión en la provincia Granma, con una densidad poblacional de 95,9 habitantes por km².

Origen del nombre de Media Luna

A raíz del inicio de la Guerra de los Diez Años, el gobierno colonial español decidió agrupar en una especie de “campamentos” a la población campesina de esta zona del país, bajo el pretexto de protegerla contra las consecuencias de la guerra, pero el verdadero propósito era eliminar cualquier posibilidad de colaboración campesina con las tropas mambisas y descartar el apoyo logístico a las tropas independentistas.

El único poblado de importancia que existía en el sur del Golfo de Guacanayabo era Vicana Abajo, donde radicaba la capitanía del partido pedáneo de Vicana. Desde allí se dirigía política y administrativamente una extensa región que iba desde la margen sur del río Tana hasta Cabo Cruz. Este poblado estaba compuesto, fundamentalmente, por españoles fieles a la corona y defensores del régimen colonial.

Una parte de la población rural de esta zona fue ubicada en un punto de la costa del Guacanayabo, conocido por Manáguano, junto a una ciénaga costera que se encuentra entre los actuales cascos urbanos de Media Luna y Niquero. Allí se reunieron más de trescientas familias de los partidos de Guá y Vicana que huían de los campos debido a los desmanes de las tropas españolas, así los presionaban para que se reagruparan en los “campamentos”.

Las condiciones del lugar no eran favorables para la vida debido a las plagas de mosquitos y el ambiente húmedo de la ciénaga de modo que se decidió mudar el asentamiento. Así las cosas, el sábado 1º de mayo de 1869 se asentó el pequeño grupo humano, un campamento militar español junto a el grupo de familias antes mencionadas en un punto de la costa un poco más al norte y que desde mucho antes se conocía por los marinos como “Ensenada de Media Luna”

Con los años y el surgimiento de la industria azucarera, fue creciendo esta parte de lo que hoy es Media Luna y , en consecuencia, Vicana Abajo fue perdiendo importancia. El flujo migratorio en busca de trabajo en el central azucarero “Isabel B” provocó el crecimiento de este sector de la geografía. Así surgió el nombre de lo que hoy es el municipio Media Luna.

Comunidades primitivas

El mesolítico temprano en Media Luna

Los primeros grupos humanos llegados a Media Luna lo hicieron hace alrededor de 3000 años. Eran cazadores, pescadores y recolectores. Encontraron un medio muy favorable para su actividad económica: abundantes bosques, numerosos ríos, mar tranquilo en el Guacanayabo, temperaturas aceptables y sin depredadores de importancia. Son los llamados Guayabo Blanco o Arcaico. Aprovechaban las conchas de los caracoles recolectados para confeccionar muchos de sus instrumentos de trabajo. Sus huellas están por todos los campos, son conchales que delatan su presencia, unos más abundantes que otros. Los de mayor tamaño son los del sitio La Pesquera, cerca de San José a orillas del río Macaca y en la zona urbana la conocida Loma de García donde se encuentran conchas de caracoles de diversos tipos en gran abundancia.

Diferentes artefactos se encuentran en los sitios arqueológicos del municipio Media Luna

Otro grupo más desarrollado llega a nuestras costas hace unos 2000 años. Estos dominan la industria de la alfarería con una cerámica muy burda pero sin restos de burenes, lo que los diferencia de los de ascendencia aruaca. También dependen de la caza y la recolección así como de la pesca pero, probablemente, con una agricultura incipiente, lo que los libre en cierta medida del nomadismo. Con la presencia de la cerámica pueden cocer sus alimentos y conservarlos por más tiempo, son lo conocidos como Protoagricultores y sus sitios representativos en Media Luna se encuentran en el barrio de Cuchillo, cerca de la costa.

Un nuevo grupo llega a Cuba hace 1500 años, proceden del tronco étnico aruaco sudamericano y llegan en diversas oleadas a través del arco de Las Antillas, provienen del norte de Venezuela, de la cuenca del río Orinoco. Se diferencian de los grupos anteriores por un mayor desarrollo de las fuerzas productivas, un mayor nivel de su complejo técnico. Agricultores experimentados, dominaban la alfarería y procesaron la yuca de manera muy particular para obtener tortas de casabe, el pan indio. Penetran en territorio cubano por la región de Guantánamo y se dispersan por todo el oriente y mucho más allá. Estas son las posibles vías por las que debieron llegar hasta la región que hoy ocupa este municipio posiblemente hace unos 1200 años. Son conocidos como agricultores ceramistas, aruacos, agroalfareros o subtaínos. En Media Luna han sido reportados dos sitios arqueológicos compatibles con el patrón cultural subtaíno.

El primero de ellos se encuentra en las inmediaciones de un campo de cultivo de caña de azúcar al este del barrio de La Islita y relativamente próximo al barrio de Los Guayos. El lugar es conocido como “Potrero de los Indios” o “Bagazal” y los restos arqueológicos aparecen dispersos en un área de 1200 m2. Allí se encuentran fragmentos de vasijas de cerámica, de burén, instrumentos de trabajo elaborados a base de rocas de considerable dureza y restos de la dieta (conchas de caracoles). El otro sitio subtaíno está ubicado muy cerca del barrio de Gorito y al este de La Maguana. Son los de un cementerio que ha sido totalmente destruido que fue estudiado en los años 20 del siglo pasado por el doctor Manuel Sánchez Silveira. Según refieren vecinos de la zona Sánchez desenterró restos humanos acomodados en posición fetal con la cabeza orientada hacia el este y con vasijas de barro cocido puestas como cascos en sus cabezas.Se cuenta que el lugar había sido visitado con anterioridad por Don Carlos de la Torre. Es muy probable que este sitio no sea otra cosa que los restos del cementerio del llamado “Pueblo Viejo de los Indios de Macaca”, cuyo origen fue una encomienda.

Etapa colonia

En 1513, el conquistador español Diego Velázquez, uno de los protagonistas de la aplicación del sistema de encomiendas en La Española, es designado gobernador de la isla de Cuba y de inmediato lo aplica en nuestro archipiélago. Comienza la repartición de tierras e indios. En Media Luna se reparte la primera encomienda casi de inmediato, probablemente en 1516, y se ubica en La Maguana, el encomendero resultó ser un individuo llamado Rodrigo de Tamayo. La encomienda de La Maguana tiene particular importancia porque constituye la génesis del primer núcleo poblacional de Media Luna una vez eliminado el sistema de encomiendas: el “Pueblo Viejo de los Indios de Macaca”. Ese poblado existió hasta el siglo XIX y dio lugar al surgimiento de un cementerio aborigen al aire libre en un lugar conocido como el Palenque de Gorito.

Plano de Media Luna en el siglo XIX

Vicana Abajo debe su origen a la construcción de la iglesia en 1820, (la campana de la iglesia, que aún se conserva, tiene grabada al relieve en su superficie de bronce el año 1824). Según un artículo escrito por Adolfina Cossío Esturo, del 9 de agosto de 1947, en el periódico medialunero. Todavía, basándose en el testimonio de un meticuloso historiador empírico, Andrés Basterrechea, existió una modesta capilla de guano, en la zona de Tres Canas anterior a 1820 donde predicaba un sacerdote de apellido Subirát. Ya el 21 de agosto de 1820 se celebra el primer matrimonio en la iglesia de Vicana Abajo, entre el bayamés Baltasar del Socorro Yero y la natural de Vicana Juana Guerra.

El primer núcleo poblacional importante de Vicana fue el caserío de ese nombre (hoy Vicana Abajo) erigido en la década del 20 del siglo XIXdonde radicó posteriormente la capitanía del partido pedáneo. El análisis de los documentos de la época demuestra que ése era el único poblado asentado en el referido partido hasta el inicio de la Guerra de los Diez Años. La aldea de Vicana, cabecera del partido pedáneo, estaba conformada por tres tiendas, la casa del cura, la del pedáneo (capitán del partido), y tres más, agrupadas alrededor de la iglesia que era de tabla y tejas.

Del número de casas, dos estaban construidas de tabla y tejas, tres de tabla y paja, una de embarrado y paja, y una de guano y tabla. También se comprendían en el caserío 22 construcciones más diseminadas en las inmediaciones pertenecientes a las vegas y fincas circundantes. Aún aparecen, al trabajar la tierra, los restos de losa de la época, monedas y demás objetos típicos del siglo XIX. Desde allí partía un camino para Bayamo, otro para el inmediato embarcadero de Sibanicú en la ensenada de Media Luna embarcadero sin muelle ni resguardo alguno, otro para Portillo a través de Vicana Arriba y El Purial, y otro para Cabo Cruz pasando por Pueblo Viejo de Macaca. Vicana Abajo era un caserío con seis largas y anchas calles de norte a sur y cinco de este a oeste, con una trinchera cuadrada defendida por ocho horcones: “…que bien puede llamarse Muralla”. Contaba con más de mil habitantes. Los nombres de sus calles reflejaban el origen español de sus habitantes: La Caridad, La Covadonga, Calle Real, Montserrat, San Francisco, Las Mercedes y San Pedro. Desde Vicana Abajo, que era la capital administrativa y política del Partido de Vicana, se dirigía la zona que abarca desde Altos de Jó y Dos Bocas de Tana hasta Cabo Cruz. Todo el sur del Guacanayabo. Vicana Abajo tenía una especie de plaza central, un ayuntamiento, una iglesia desde 1824, tiendas, escuela, calles con nombres como La Covadonga o la Caridad. Por entonces también florecían algunas haciendas entre las cuales estaba la hacienda comunera de La Caridad de Macaca que pertenecía a la familia Céspedes y que jugaría un papel relevante en la historia. La población de este poblado era numerosa, alrededor de 2000 personas y en su mayoría pardos y españoles, sólo el 1% eran esclavos y casi todos dedicados a labores domésticas. Por entonces no existía lo que hoy se conoce como Media Luna.

Guerras de independencia

¿Qué sucedió el 9 de octubre de 1868 en Media Luna?

El 9 de octubre de 1868, alrededor de las nueve de la mañana en la hacienda La Caridad de Macaca, llegó la orden de alzamiento emitida por Carlos Manuel de Céspedes a su hermano Pedro de Céspedes. La llevó Francisco Estrada Céspedes, sobrino del hombre de La Demajagua. Allí habían reunido poco más de 400 hombres, por lo que decidieron pronunciarse en armas contra el colonialismo español tres horas después. Este grupo enarboló por vez primera la bandera diseñada por Céspedes en el ingenio azucarero La Demajagua y aprobada desde días atrás, el 6 de octubre, en la junta del ingenio El Rosario, situado cerca de Manzanillo.

De seguido la columna insurrecta partió hacia Vicana Abajo, donde había una pequeña guarnición española. Los primeros tiros sonaron en La Barranca de Vicana, venciendo a pos pocos minutos a los militares colonialistas. En la capitanía pedánea confiscaron propiedades, armas y balas del fortín. A continuación marcharon hacia Callahacas, en el partido pedáneo de Guá, donde incautaron las propiedades de Carlos Cancino, un acólito del gobierno español, le confiscaron el ganado, productos de su tienda y siguieron camino hacia la Sierra Maestra.

Días después, unidos al grupo de Carlos Manuel, pusieron sitio a Bayamo y entraron en la ciudad el 20 de octubre|20 de octubre. Allí se enarbolan dos banderas al frente del naciente ejército mambí, la de Caridad de Macaca y la de el ingenio Demajagua. Con el inicio de la guerra, la situación para el pueblo español de Vicana Abajo se tornó compleja y decidieron apoyar la contrarrevolución. El investigador Ángel Lago Vieito, indagando en el Archivo Nacional de Cuba descubrió un auto levantado por Andrés Fajardo, celador de policía del poblado de Vicana, donde se plantea que Vicana Abajo: “…fue el único punto de la isla en aquella época en que los vecinos iniciaron la contrarrevolución sin jefes españoles; se estableció un campamento en Managuano, dirigido por el comandante retirado don Manuel Reitor quien se puso en relaciones con los contrarrevolucionarios, dándoles su apoyo y algunas armas. Aquella autoridad dispuso como vía de ensayo la formación de dicho campamento. Este ensayo dio tan buen resultado que a los pocos días de establecido el campamento ya se habían presentado a la autoridad más de trescientas familias. Como punto insalubre, dispuso la misma autoridad que se trasladase el campamento en Media Luna, traslado que se verificó en primero de mayo de 1869, dando tan buen resultado tanto en número de familias presentadas, que dispuso la autoridad la formación del campamento de Campechuelas, para que los vecinos de Gua, que estaban unidos a los de Vicana, fuesen a establecerse en su partido (…) a los dos meses de establecido el poblado no quedaban en la insurrección más que cinco o seis antiguos vecinos”.

El pretexto era proteger a la población rural de los avatares de la guerra pero el verdadero objetivo fue suprimir el apoyo logístico que el campesinado podría ofrecerle a la guerrilla mambisa, ese ensayo fue el embrión de las reconcentraciones que encontrarían su espantosa máxima expresión en la reconcentración de Valeriano Weyler durante la guerra de 1895. En realidad las familias se presentaban al campamento pero no tanto por los avatares de la guerra como por las atrocidades que cometían las tropas españolas para provocar el éxodo.

A la altura del año 1870 se reconocían tres concentraciones poblacionales significativas en esta comarca: en primer lugar, Vicana Abajo, con un comandancia Militar cuya jurisdicción civil se extendía desde Campechuela hasta Veliz Belíc; contaba además con una contaduría, un juzgado de Paz y una iglesia Parroquial.

Existen muy pocas acciones combativas documentadas en el territorio medialunero durante la guerra del 68. El 4 de marzo de 1869 fuerzas del Ejército Libertador combaten en la zona de Macaca contra tropas de un regimiento hispano. Los españoles sufren 4 muertos y 14 heridos, las fuerzas mambisas tuvieron 9 muertos.El 11 de marzo 1876, el comandante Higinio Vázquez, de la tropa del coronel Flor Crombet, emboscó en el camino de El Cedrón a una gruesa columna española y la hostilizó con un pequeño grupo de combatientes mambises. El 10 de agosto de ese mismo año, fuerzas del capitán Francisco Leyté Vidal junto a las del comandante José Infanzón combaten en esta zona a una tropa española de infantería que asaltaba las rancherías de familias, el enemigo español tuvo tres muertos y un hombre fue hecho prisionero, además se capturaron armas y municiones; los cubanos tuvieron 4 heridos, entre ellos el comandante Infanzón.

El 24 de febrero de 1895 se alzaron en armas en Oriente los veteranos del 68 Guillermo Moncada, Bartolomé Masó Quintín Banderas y Pedro (Periquito) Pérez, entre otros patriotas. En puntos cercanos a Media Luna como Niquero, Ceiba Hueca y Dos Bocas de Tana, se pronunciaron en armas más de sesenta hombres, bajo el mando de Dominador de la Guardia.

En la nueva etapa bélica Media Luna fue escenario de una serie de combates. El 24 de agosto de 1895 alrededor de las diez de la mañana, en el batey del central “Isabel” y en Pueblo Nuevo, una partida de insurrectos encabezados por Salvador Hernández Ríos, combatió a unos 250 metros del fuerte principal (Vergara) contra soldados españoles, los mambises tuvieron un herido.El 29 de ese mismo mes y año el alcalde de Media Luna informa de otro tiroteo provocado por tropas insurrectas y añade que hubo tres heridos.Ese mismo año muere, como consecuencia de un enfrentamiento con las fuerzas de la colonia en dos Bocas de Tana el general de brigada Federico Augusto Incháustegui Cabrera, quien gravemente herido, se refugió en las lomas de este lugar y allí falleció a consecuencia de las heridas recibidas.

En un resumen de los datos autobiográficos del general Salvador Hernández Ríos se pueden encontrar referencias a algunas de sus acciones combativas relacionadas con este territorio: el 29 de mayo de 1895 el general Hernández Ríos narra que al aproximarse a Media Luna tiene un encuentro armado con una columna española que venía de Vicana haciéndola retroceder hacia Campechuela. Ese mismo mes, al regresar por el río Cauto, tiene otro encuentro con fuerzas que iban en el vapor “Fausto” teniendo una baja: el sargento de caballería Julio Fonseca, muerto en Media Luna.El año 1896 trae consigo nuevas acciones mambisas. El 22 de octubre fuerzas insurrectas incendian parte de Pueblo Viejo, en La Marina. Comenzando el año 1897 se produce otro acontecimiento de singular importancia; en el propio mes de enero las tropas insurrectas queman Vicana Abajo, un tradicional centro de poder español, el poblado resulta muy afectado según testigos presenciales, Vicana Abajo prácticamente desaparece.

El 14 de marzo de 1897 fuerzas del 2º cuerpo del Ejército Libertador combaten contra una tropa española en las cercanías de Media Luna, los ibéricos tuvieron 3 muertos.Tres días después, el 17 de marzo, esas mismas fuerzas bajo el mando del general Salvador Hernández Ríos combaten en la región contra la guerrilla local formada por voluntarios y españoles y que era dirigida por Florentino Gutiérrez García, (Gutierrillo), quien muere en la acción junto a varios de sus hombres. En enero de 1898 Hernández Ríos choca con una columna española en Dos Bocas de Tana haciéndole bajas al enemigo; en julio se describe otra acción en El Bongo cuando los españoles evacuaban un campamento de Niquero.Pero desde marzo se habían registrado otros combates: el día 4 una columna es hostilizada en Los Manantiales por fuerzas de la 1º brigada de la 1º división del 2º cuerpo del Ejército Libertador bajo las órdenes del teniente Justo Guerra. Ese mismo día, en la zona de “Pablo”, fuerzas de la 2º brigada de la 1º división del 2º cuerpo del Ejército Libertador bajo el mando del teniente coronel Eligio Ricardo atacan a una columna española. El 6 del mismo mes es hostilizada una columna militar española que había salido de El Chino en el camino de Vicana Arriba a Media Luna, la tropa mambisa estaba bajo las órdenes del teniente Milán, miembro de la tropa del mayor Jesús Rabí.

El 10 de diciembre se firma el Tratado de París, entre España y Estados Unidos (como si los cubanos no existieran), es licenciado el Ejército Libertador. Máximo Gómez expresaría: “…ni libre ni independiente todavía”. De nuevo, en las ya muy lastimadas gargantas de los mambises cubanos, se ahogaría el grito de ¡Viva Cuba Libre!; mucha sangre habría de correr aún antes de lograr la verdadera y definitiva independencia.

República neocolonial

La guerra no tuvo mayores consecuencias salvo la enorme miseria que dejó. Al culminar la guerra la industria azucarera se nutre del ejército de desempleados que migran hacia el poblado en busca de trabajo. Es por esta época que surgen algunos de los barrios marginales: El Molino y La Jagua, mientras crecen sensiblemente Tronco Mulo y Vista Alegre, crecen también, aunque en menor medida, El Carmen y La Marina. Se va conformando el poblado que conocemos hoy. Culminado el período de ocupación militar estadounidense entra Cuba en la etapa neocolonial. Algunos sucesos de relevancia para Media Luna son: En esta etapa nacen en Media Luna dos personalidades destinadas a jugar un importante papel en la historia cubana: el 9 de mayo de 1920 en horas del mediodía nace en el berrio Pueblo Nuevo Celia Esther de los Desamparados Sánchez Manduley, nuestra Celia, la heroína de la lucha clandestina, la legendaria guerrillera, la funcionaria genial y abnegada en la construcción socialista. El 27 de enero de 1925 nace en Purial Juan Vitalio Acuña Núñez, el Vilo de la Sierra Maestra y el Joaquín de la guerrilla del Che en Bolivia.

El hotel Beatriz de Media Luna

En una humilde vivienda en el barrio Tronco Mulo se funda la primera célula de la Agrupación Comunista de Media Luna, el 11 de agosto de 1925. El acta de constitución aparece firmada por Luis Kanín (presidente provisional), Daniel Sanz (quién lo sustituye posteriormente), Eugenio Alarcón, Albano Rivero Borrero, Antonio Acuña, Ciro Leyva y José Carbonell, es una de las primeras en constituirse en Cuba junto a las de Guanabacoa, Guantánamo, Manzanillo y San Antonio de los Baños.

El Comité de Huelga de la industria agroazucarera de Media Luna organizó un acto –con una concentración de obreros el día 15 de julio de 1934 a las dos de la tarde en el lugar conocido como “La Guásima de Tronco Mulo”, a un lado de la actual terminal de ómnibus. Inicialmente y con la intención de amedrentar a los manifestantes los militares hicieron varias descargas al aire. La multitud respondió alzando los sombreros y gritando consignas.Como respuesta el cabo Carey ordena: “¡disparen abajo!”, y al ver que los soldados vacilan añade: “¡He dicho que fuego…, abajo, carajo!” Y son disparadas más de una descarga cerrada sobre la multitud. Emilio Labrada Acuña, obrero agrícola el fallece el propio día 15. El día 17 fallecían como consecuencia de los disparos recibidos Adriano Peral Chacón y Antonio Ballesteros González, ambos obreros del central. El 12 de junio de 1943 visita el poblado Jesús Menéndez Larrondo. Se reúne con trabajadores y el pueblo en general en el lugar conocido como “El Algarrobo”. Allí, junto al líder obrero, hizo uso de la palabra la militante comunista Ana Esther González Rodríguez (Anita Mola), hija de obrero agrícola y militante del Partido Comunista.

La guerra de liberación nacional

Después de todo un desfile de gobiernos corruptos, de abuso, de explotación y de olvido de las más mínimas necesidades de la población, Media Luna se había convertido en un poblado muy pobre donde se disponía de trabajo sólo para una parte de las personas en el ingenio y solamente durante 3 meses a lo sumo, que era el tiempo que duraba la zafra azucarera, después venía el tiempo muerto.

El 10 de marzo de 1952, Fulgencio Batista, como para asegurar su candidatura, dio el sonado golpe de estado que sumergió a todo el país en la oscura noche política, en la peor de las incertidumbres, iniciándose así uno de los más tristes períodos en la historia de Cuba. Después del Asalto al Cuartel Moncada y del presidio sufrido por sus protagonistas comienza a organizarse un movimiento que estaría llamado a conducir a los revolucionarios por el camino de la lucha armada y la libertad definitiva, el Movimiento 26 de julio.

La organización de dicho movimiento comienza a partir de mayo de 1955 y ya se consolida en el mes de junio. En el propio 1955 se organiza la primera célula del M-26-7 en Media Luna. Su fundación se realiza en el Parque de los Mártires, en un momento posterior al mes de junio aún sin precisar. Rolando Alarcón funge como su primer jefe de acción y sabotaje que era quien impartía las orientaciones al grupo de jóvenes revolucionarios.

Mientras todo esto ocurría ya en México se crean las condiciones para lo que sería después el desembarco del Yate Granma. Cuando el desembarco está próximo se crean las condiciones para su recibimiento a partir de un plan minucioso elaborado por Celia Sánchez y un grupo de cercanos colaboradores. Junto a Celia ha colaborado otro medialunero, Randol Cossío, quien se ha infiltrado entre las tropas de la tiranía llegando a ser piloto de Chaviano, el jefe de la fortaleza militar del Moncada, y es quien suministra los planos y los itinerarios de los guardacostas además de accionar para suprimir el patrullaje aéreo por la costa sur en los días próximos al desembarco.

Así Celia prepara todas las condiciones para un exitoso recibimiento. Ha establecido una red de recepción formidable en la zona del campo, en particular en la Sierra Maestra, aprovechando el conocimiento de las montañas y el liderazgo que allí ejercen Monguito y Crescencio Pérez además de otros muchos amigos que allí tenía. La eficiencia de esta red se demostraría meses después, a la hora del desembarco.

Cuando la llegada del Granma se vuelve inminente los medialuneros complotados se acuartelan en una casita un tanto alejada del centro del pueblo, en el camino de la playa. Un delator pone en peligro la vida de los revolucionarios y aborta cualquier acción. De cualquier forma el Granma no ha desembarcado por donde se esperaba sino un poco más al sur varándose en una zona pantanosa y rodeada de manglares que complica sobremanera el desembarco.

La idea de tomar los cuarteles de Niquero y Media Luna se ve limitada. Los expedicionarios buscan llegar a la Sierra Maestra a cualquier precio. La inexperiencia los hace cometer errores que conducen al conocido desastre de Alegría de Pío. Después comienza toda una pesadilla. Varios de los revolucionarios perdidos son capturados y masacrados cruelmente, algunos logran escapar y otros pequeños grupos, perseguidos y atacados por el hambre y la sed, se empeñan en llegar a la Sierra para continuar la lucha a cualquier precio.

Celia pone en máxima alerta a la red por ella creada. Gracias a la perfecta organización lograda, el día 16 de diciembre de 1956 en horas de la mañana, un grupo encabezado por Fidel Castro e integrado por Universo Sánchez y Faustino Pérez, acompañados por tres campesinos reclutados por Celia, Guillermo García, Ignacio y Baurel Pérez, llegan a la finca El Salvador, (curioso nombre), de Ramón Pérez Montano. Allí son atendidos y escondidos en un cañaveral cercano a la casa y a la tienda de Monguito Pérez..

El día 18 en horas de la madrugada llega por Purial otro grupo de 5 expedicionarios encabezados por Raúl Castro. Acampan en las tierra de Hermes Cardero, no saben de la cercana presencia de Fidel. En horas de la mañana, según cuenta Sofía Acuña, esposa de Cardero, Hermes sale a buscar información. Se encuentra con un cuñado a quien interroga sin revelar nada. El cuñado le sugiere que pregunte a Mongo. Nunca se sabrá si aquella sugerencia fue intencional o casual pero históricamente fue sumamente acertada. Llega Cardero a la tienda de Pérez Montano y pasa a conversar con él en la trastienda. Los interrogatorios de Hermes no surten ningún efecto en Monguito. Las preguntas son contestadas negativamente de forma que Hermes se convence de que Mongo Pérez no sabe nada de los expedicionarios. En medio de un estado de angustia decide pedirle ayuda a su amigo y vecino. Entonces se produce una histórica conversación.

– Así que tú no sabes nada de los expedicionarios que desembarcaron por Niquero– dice Hermes Cardero.

– No, esa gente debió ser capturada por el ejército. El cerco no lo pasa nadie.

– ¿Y no cabe la posibilidad de que algunos hallan llegado hasta por acá? – insiste Hermes. – Yo no lo creo- repite Ramón convencido.

– Yo tengo un problema Mongo y tú me tienes que ayudar. – Bueno habla hombre.

– Mongo,... yo tengo a Raúl Castro en mi casa- confiesa Cardero. – ¿Tú sabes los que estás diciendo?

– Sí, yo tengo en mi casa a Raúl... insistió Hermes. Monguito Pérez sin dejar de mirarlo, respondió:

– ¡Y yo tengo a Fidel!

Esta histórica conversación propicia que se realice el reencuentro de los dos hermanos y sus tropas en horas de la noche. A partir de ese momento se establecen los contactos en los que Primitivo Pérez juega un decisivo papel y en la noche del 18 de diciembre de 1956, en el marco del cañaveral de Cinco Palmas se produce el histórico reencuentro. Es allí donde se pronuncia la famosa frase de Fidel:

– ¡Ahora sí ganamos la guerra!

Frase que pronuncia cuando se entera que Raúl ha conservado las armas.

Treinta años después, en 1986, Fidel y Raúl Castro rememoraron el histórico encuentro

Cuando sólo se reúnen 8 hombres y 7 fusiles. Lo grandioso de la frase no está en haberla pronunciado sino que 2 años después el Ejército de 80 000 hombres armados hasta los dientes caía derrotado por completo por el ejército rebelde cuyos orígenes se remontaban a aquella noche en Cinco Palmas.

Revolución en el poder

A partir de 1959 la historia de Media Luna sigue un rumbo similar al resto del país. Algunas particularidades en esta etapa son: En Media Luna el Departamento de Asistencia Técnica, Material y Cultural al Campesinado fue dirigido, desde abril de 1959, por un modesto equipo bajo la dirección de Isabel Tamayo Ríos, con ella trabajaban en una oficinita ubicada en uno de los locales de “Los Precios Fijos”, en el barrio El Carmen, Esmirna García Torres, Wilfredo Núñez Pérez y María Luisa (Wicha) Alarcón Martínez. Desde allí coordinaron el censo de maestros y analfabetos de un territorio que abarcaba desde la Sierra Maestra hasta la zona de El Jíbaro y una buena parte del sur del Guacanayabo. Media Luna juega un importante papel en la aplicación de la Reforma Agraria, desde aquí se dirige una región considerable del sur del Guacanayabo casi desde Pilón hasta Jibacoa. Su primer director fue Félix Pérez Meilán. La dirección radicaba en la Sociedad Maceo (hoy Casa de Cultura). Desde el 23 de diciembre de 1959 se había decidido extinguir las llamadas Escuelas Primarias Superiores y crear la Enseñanza Secundaria Básica donde se estudiaría desde el 7º hasta el 9º grado. Surge en la segunda planta del Centro Escolar la secundaria básica “Carlos Manuel de Céspedes”; el 1º de enero de 1960 se propone para dirigirla a la profesora Aida Mestre Esturo quien fungía como directora de la Primaria Superior hacía varios años. Es la primera secundaria básica en la historia del poblado. La planta baja se convierte en la escuela primaria “Rafael María de Mendive”. Desde 1960 se crean tres contingentes de maestros voluntarios, en el segundo de ellos se incorpora Walfrido (Chin) Núñez Pérez; en el tercero ya se integran 13 jóvenes, entre ellos Eugenio Borrell, Raúl Rodés, Gilma Reyes y Julio Hernández.

Organización revolucionaria del pueblo

Las milicias en Media Luna se habían organizado desde octubre de 1959. Se crearon 5 compañías de milicianos. El batallón radicaba en lo que había sido la casa de vivienda de los antiguos dueños del central Isabel B. En septiembre de 1960 surgen los CDR como fuerza fundamental de vigilancia contra las actividades terroristas que tomaban cuerpo. No es hasta 1966, cuando Media Luna adquiere la categoría de Municipio, que se organizan en estacomarca siendo su primer coordinador municipal Fidel Arias Reyes.

Federación de Mujeres Cubanas

Las mujeres comienzan a organizarse desde los primeros momentos gracias al activismo de revolucionarias como Herminia Pérez Meilán y Carmen Landrove. El 23 de octubre de 1960, dos meses después de constituida la FMC a nivel nacional, es creada en Media Luna, queda Irma Garcés como presidenta, Silvia López como vice-presidenta y Ángela Socarrás Pompa como secretaria de actas.

Acontecimientos más significativos de la etapa revolucionaria

  • El lunes 16 de diciembre de 1963 queda constituido el Partido Unido de la Revolución Socialista de Cuba (PURSC). En Media Luna su primer secretario es un bayamés: Gastón Figueredo Solís.
  • En 1966 se constituye la Administración Local (Poder Local), en sustitución de la JUCEI, y se establece la rendición de cuentas de los funcionarios del gobierno municipal a los electores; Media Luna adquiere la categoría de municipio.El primer presidente del Poder Local es Enrique (Quique) García Ramos.
  • El 21 de mayo de 1970 una fuerte depresión tropical afecta el territorio medialunero. Gigantescas inundaciones provocadas por la crecida del río Vicana cambian la geografía del casco urbano. Como consecuencia, surgen nuevos barrios.
  • Varios combatientes de la reserva medialuneros participan en los combates que garantizan la proclamación de la independencia angolana. De ellos 15 entregaría su vida en la compleja misión.
  • En el año 1975 la dirección del PCC entendió que existían las condiciones para celebrar su primer congreso. Algo que se venía ajustando desde 1972.El 17 de diciembre inició sus sesiones de trabajo el evento más importante de los comunistas cubanos. Cuatro delegados tuvo Media Luna seleccionados por sus destacadas trayectorias políticas y laborales: Julián Acuña Reyes, Carlos Alarcón Rodríguez y Virginia González Frómeta, obreros del central “Juan Manuel Márquez”, así como Nieves Elliott Pérez.
  • En Media Luna se constituye la primera Asamblea Municipal del Poder Popular el 31 de octubre de 1976 reunida en la Casa de la Cultura, al frente de la misma quedó Donaldo Zamora como su primer presidente.
  • Durante 1979 comienzan los preparativos para la construcción de un museo por primera vez en la historia del municipio. La tarea recae sobre los hombros de Guillermina (Nena) Acuña Alarcón
  • En 1983 se crea el Módulo Cultural en Media Luna: se integran la Casa de la Cultura, el Cine, el Museo Municipal, un Coro y una Galería de Arte.
  • En 1986 se culmina la construcción del círculo infantil dirigido por Cristina Núñez Atencio,el mismo es inaugurado por el propio Comandante en Jefe el 18 de diciembre de durante la conmemoración del 30 aniversario del reencuentro rebelde de Cinco Palmas.
  • En 1989, Daima Beltrán, a la edad de 16 años, gana dos medallas de oro en el campeonato de judo centroamericano de Venezuela. Ya se perfilaba la campeona que sería dos veces plata olímpica y seleccionada entre los 10 deportistas más destacados de Cuba en el año 1997, una gloria deportiva de Media Luna
  • Con la independencia de Namibia Cuba establece relaciones diplomáticas con el naciente gobierno, el primer embajador de Cuba en Namibia es un hijo de la comarca: Ángel Dalmau Fernández
  • En Cuba se realizaban las primeras elecciones para integrar el Parlamento, para seleccionar a los diputados a la Asamblea Nacional y los Delegados a la Provincial. Cuba salió a votar como si fuera un plebiscito de apoyo a la Revolución; en esas elecciones, en medio de una enorme escasez, de carencias inimaginables, votó el 99,57% de los cubanos.Idalmis Martínez resulta electa por Media Luna como diputada al Parlamento Cubano.
  • El 3 de abril del 2009 hace su primera transmisión la corresponsalía de la televisión en Media Luna. Un pequeño grupo de periodistas, editores y camarógrafos consiguen salir al aire con lo que sería la señal de “Luna Visión”.
  • A partir de octubre de 2014 cinco hijos de este pueblo, trabajadores del sector de la Salud, se involucran en el proyecto heroico de colaboración médica, ejemplo a nivel mundial: la colaboración médica en África para combatir la epidemia de Ébola. Es el municipio de Cuba que más colaboradores envió a esa misión, un total de cinco.Sus nombre son: Carlos Reyes Remón, Ismael Pérez Romero y Enry Luis Saborit Corría en Sierra Leona; Lázaro Alarcón González y Juan Luis García Naranjo en Liberia. Todos cumplieron exitosamente su misión brindando un gallardo ejemplo de solidaridad humana y recibieron el reconocimiento de todo su pueblo a su regreso en el año 2015.
  • Hoy Media Luna sigue construyendo su historia; los hijos de esta tierra continúan trabajando en su pueblo natal y en otros muchos lugares de toda Cuba y fuera de ella, por ejemplo, los numerosos colaboradores del deporte, la educación y la salud que cumplen abnegadas misiones en muchos países del mundo. Así son los medialuneros, alegres, trabajadores, solidarios, así han sido siempre, desde aquellos primeros pobladores hasta nuestros días.

Curiosidades históricas

En el propio diciembre de 1956 ya subía el primer refuerzo coordinado por Celia. De las células del M-26-7 de toda la costa del Guacanayabo se seleccionaron los 5 mejores integrantes a criterio de los jefes de acción y sabotaje y en una segunda selección se escogieron 2 de cada 5, los que estuvieran en mejores condiciones. Con este grupo se constituyó el primer refuerzo a la guerrilla que subió a la Sierra en los últimos días de diciembre estableciendo contacto con la columna guerrillera el día 6 de enero de l957.

En ese grupo iba ya un medialunero de la zona urbana conocido en su pueblo por el nombre de Hermilio (Nango) Rey. La guerrilla contaba con la presencia de otro medialunero en los primeros días de la lucha, en los difíciles primeros meses de 1957. Así transcurren los combates de La Plata y Llanos del Infierno. Después de este último combate Nango solicita bajar de la Sierra al no adaptarse a las condiciones de la lucha guerrillera, es autorizado y baja el día 28 de enero de 1957. Pero poco después otros dos medialuneros se incorporan a la guerrilla, ellos son Hermes Cardero y Juan Vitalio Acuña. Ya se estrenan en el combate del Uvero en mayo de 1957 junto a Manuel Acuña, Celia Sánchez, Anselmo Vega, Miguel AngelManals, todos medialuneros incorporados en esos días.

El combate del Uvero es excepcionalmente duro. Se prolonga la lucha y son varios los heridos y muertos por ambas partes hasta que se rinde la guarnición. El Che diría que ese combate había marcado la mayoría de edad de la guerrilla. Junto a otros compañeros de lucha cayó en combate Anselmo Vega y fueron heridos Manuel Acuña en una mano y Miguel AngelManals a quien una bala le atravesó un pulmón. Allí combatieron Celia y Vilo además de Hermes Cardero todos de Media Luna. Por vez primera combatía una mujer en la guerra de la Sierra.

De esta manera Celia Sánchez se convertía en la primera guerrillera en participar en un combate. Muchos serían los combates en que participaría en el futuro y junto a ella otras mujeres que integraron la guerrilla demostrando la tremenda fuerza que es capaz de desarrollar la mujer en la lucha revolucionaria. En el futuro también serían otros muchos hijos de Media Luna los que subirían a La Sierra y se incorporarían a la lucha armada.

En agosto de 1957, una masiva manifestación recorrió las calles de Media Luna, donde se le dieron ¡Vivas a Fidel castro! y ¡Vivas al Che Guevara! por primera vez públicamente. Al frente, con camisa de cuadros, Gilma Reyes, a su izquierda, Guillermina Acuña, Milagros Aguilera y Lidia Acuña. El hombre que aparece al frente, con camisa blanca, es Nango Rey.

Fuentes

  • Agustín Ricardo Vázquez Mestre, historiador y profesor. Labora en la sede universitaria de Media Luna de la Universidad de Granma. Forma parte del equipo que redacta la Síntesis histórica municipal de Media Luna.
  • GuarchDelmonte, José Manuel: Estructura para las comunidades aborígenes de Cuba, Ediciones Holguín, 1990.
  • Lago Vieito, Ángel: “Consideraciones acerca del proceso de surgimiento de Niquero y Media Luna” (Inédito).
  • Cossío Esturo, Adolfina: El alzamiento del 9 de octubre en Macaca, Instituto Cubano del Libro, Santiago de Cuba, 1875.
  • Oliva Rodríguez, Nelson y Ángel Velázquez Callejas: Campechuela, origen y desarrollo hasta 1899, impreso en la fábrica José Joaquín Palma, Bayamo, 1989.
  • Arias Armas, Zaida: “Las guerras de Independencia en Media Luna”, trabajo presentado en el evento “Media Luna: Cultura e Identidad”, museo municipal “Dr. Manuel Sánchez Silveira”, Media Luna, 2012 (Inédito).
  • Esturo Izaguirre, Elvira: “Diario personal”.
  • Dieterich, Heinz y Paco Ignacio Taibo II: La Conquista de la Esperanza, Casa Editora Abril, La Habana, 1996.