Rockwell Blake

Rockwell Blake
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Datos generales
Nombre real:Rockwell Blake
Fecha de nacimiento:10 de enero de 1951
New York, Bandera de los Estados Unidos de América Estados Unidos
Información artística
Tipo de voz:tenor
Instrumento(s):Voz
Premios otorgados:Premio Richard Tucker (1978)

Rockwell Blake. Considerado como el tenor rossiniano por excelencia de los últimos años y uno de los cantantes que meritoriamente más contribuyó al renacimiento de la obra de Rossini. Fue el primer ganador del Premio Richard Tucker, (1978).

Síntesis biográfica

Nacido y criado en Plattsburgh, Nueva York, Blake era el hijo de un granjero. Después de graduarse de la escuela secundaria, estudió música primero en la Universidad Estatal de Nueva York en Fredonia y luego en La Universidad Católica de América. Al salir de la Universidad Católica, se desempeñó durante tres años en la Marina de los Estados Unidos como miembro del coro masculino de Cantores del Mar y luego como solista con la Banda de la Marina EE.UU..

Carrera artística

Tras formarse musicalmente en su localidad natal de Plattsburgh, muy cerca de Nueva York, y perfeccionar la técnica canora con la que ha sido su única maestra, Renata Carisio Booth, consiguiendo al cabo su proverbial fiato y una perfecta emisión en la “máscara” que le es característica, en 1977 Blake debuta profesionalmente en el Kennedy Center de Nueva York, siendo el Lindoro de La Italiana en Argel.

En 1983 salta al Viejo Continente y se presenta en el Festival de Aix-en-Provence. Desde ese momento Europa se ha de convertir en el gran escenario de sus mayores éxitos y en su domicilio particular. Después de hacer de “meritorio” en plazas “menores” como las de Zúrich, Lyon,Niza, Marsella, Ginebra, Florencia, Estrasburgo, en ese mismo primer año de rodaje europeo se consagra definitivamente como el más grande cantante rossiniano de su generación en el Festival de Pésaro, convirtiéndose rápidamente en asiduo al mismo y contándose sus intervenciones por memorables triunfos de crítica y público, como lo fue, por citar uno de ellos solamente, su recordada participación en la edición de 1984 con Le Comte Ory.

En los siguientes años, uno tras otro todos los grandes teatros europeos, desde el temible Regio de Turín —otro escenario habitual de Blake— hasta la Ópera de París, pasando por el Festival de Salzburgo, le abren sus puertas y le reciben con igual entusiasmo al que ya es figura indiscutible del bel canto y gran defensor del genuino rossinianismo. Así hasta que, entrada la siguiente década (1992), alcanzada la plenitud como intérprete y atravesando su mejor momento vocal, bajo las órdenes de Riccardo Muti, finalmente se presenta en La Scala caracterizado como Uberto de La dama del lago, en una brillante producción de esta obra.

Fuente