Antonio de Gordon y Acosta

Antonio María de Gordon y de Acosta
Información sobre la plantilla
Antonio Maria de Gordon.JPG
Una de las figuras más importantes de la enseñanza universitaria de la Medicina y de las ciencias en general en Cuba.
NombreDe Gordon y de Acosta, Antonio María
Nacimiento18 de septiembre de 1848
ciudad de La Habana,
Capitanía General de Cuba,
Reino de España Bandera del Imperio Español
Fallecimiento8 de febrero de 1917 (68 años)
ciudad de La Habana,
República de Cuba Bandera de Cuba
ResidenciaLa Habana
Nacionalidadcubana
Ciudadaníaespañola y cubana
HijosAntonio de Gordon y Bermúdez
PadresAntonio María de Gordon y López y María del Carmen de Acosta Morejón
FamiliaresAntonio de Gordon Ossorio (nieto)

Antonio de Gordon y Acosta (La Habana, 18 de septiembre de 1848 - La Habana, 8 de febrero de 1917). Médico y catedrático cubano. Una de las figuras más importantes de la enseñanza superior de la medicina y de las ciencias en general en Cuba en el siglo XIX, personalidad de cualidades muy poco frecuentes, las que le permitieron acumular conocimientos enciclopédicos que lo llevaron a graduarse en todas las facultades de la Universidad de La Habana y desenvolverse en ella, como uno de sus más eminentes maestros, en múltiples materias, durante las 3 últimas décadas del citado siglo.

Hombre de generosidad sin límites, pasó su vida haciendo el bien a sus semejantes, no sólo como médico, sino en gestos humanitarios a la niñez desvalida en momentos muy críticos de nuestra historia y en ayuda a importantes instituciones culturales y científicas cubanas. Recibió muy numerosos reconocimientos de países extranjeros y su solo defecto fue la inofensiva vanidad de querer acumular todos los títulos del saber universitario de su época y enumerarlos bajo su nombre en las portadillas de sus libros y folletos, a los que agregaba reconocimientos nacionales y foráneos.

Síntesis biográfica

Provenía de una familia de grandes bienes de fortuna. Su madre, María del Carmen de Acosta Morejón, natural de La Habana, como los progenitores de esta, Juan de Acosta Cepero y María del Rosario Morejón de Sotolongo, formaban parte de familias de profundas raíces habaneras.

Su padre, Antonio María de Gordon y López, acaudalado «hombre de negocios», había nacido en el puerto de Cartagena de Indias, en el virreinato de Nueva Granada (la actual República de Colombia), hijo del rico matrimonio formado por Manuel de Gordon Gutiérrez y Josefa López Pasos.

Huérfano desde muy niño, quedó bajo la tutela de sus padrinos de bautismo, Gonzalo Alfonso Soler y Merced Poey Aloy, esta última hermana del sabio naturalista licenciado Felipe Poey Aloy (1790-1891), quienes no sólo lo quisieron como hijo sino que don Gonzalo acrecentó sus bienes de fortuna. Quizás su temprano contacto con el naturalista y sus hijos Andrés (1825-1919) y Federico (1834-1919) Poey Aguirre, mas tarde destacados hombres de ciencias, influyó en su nunca saciada sed de conocimientos.

Como el célebre autor de Ictiología cubana, formaría una familia de científicos en la que se destacaron su hijo el doctor Antonio de Gordon y Bermúdez (1870-1922), médico y profesor universitario y su nieto el doctor Antonio de Gordon Ossorio, médico gastroenterólogo.

Estudios

Deseosos sus padrinos de que recibiera la mejor educación lo matricularon en el Colegio El Salvador, fundado por uno de los padres de la pedagogía cubana, José de la Luz y Caballero (1800-1862), donde cursó el bachillerato en artes con las más altas calificaciones, para hacer sus ejercicios de grado en el Instituto de Segunda Enseñanza de La Habana, al que estaba incorporado el colegio, el 6 de octubre de 1865.

Matricula entonces en la real y literaria Universidad de La Habana la carrera de medicina, en la cual había cursado, conjuntamente con el último año del bachillerato en artes, el período preliminar o premédica y de 1865 a 1869 estudia los 3 primeros años de medicina, con notas de sobresaliente en todas las asignaturas menos en Anatomía Patológica y Patología General con su Clínica, en la que obtuvo notable y en Patología Externa aprovechado, además de alcanzar premios ordinarios en 6 asignaturas.

Comenzada el 10 de octubre de 1868 nuestra primera guerra independentista, sus padrinos, temerosos, lo enviaron en abril de 1869 a continuar sus estudios en Cartagena de Indias junto a la familia paterna y en el colegio de Nueva Granada le reconocen todas sus notas y le permiten realizar, nada menos, que los ejercicios para el grado de doctor en medicina y se le extiende dicho título el 27 de junio de 1869. Alcanzaba así, a los 20 años de edad, su primer título de doctor.

De regreso a Cuba pide al gobernador político, en agosto de 1870, que se le permita examinar las asignaturas que ya tenía cursadas, pero no examinadas, del cuarto año de medicina en la universidad habanera, lo que se le concede y logra sobresaliente en las 3, para realizar el grado de bachiller en medicina, título que se le expide el 5 de octubre de 1870. En el curso de 1870-1871 matricula los 2 años de la licenciatura en medicina y cirugía, los que aprueba con nota de sobresaliente en las 6 asignaturas, con premios ordinarios en 2, realiza los ejercicios de dicho grado con sobresaliente, los días 27 y 28 de septiembre de 1871 y se le extiende el título el 6 de octubre siguiente.

Espera entonces hasta el año académico de 1875-1876 para cursar las 2 asignaturas del período del doctorado en medicina y cirugía, en las que obtiene sobresaliente y el 31 de enero de 1876 presenta su tesis de grado En el estado actual de las ciencias no puede preferirse la vacuna de ternera a la de brazo a brazo, con la que logra sobresaliente y que se le expida dicho título el 2 de febrero del propio año. Ese mismo día es investido con el grado, para tener como padrino en la ceremonia al notable histólogo y profesor, doctor Felipe F. Rodríguez y Rodríguez (1836-1897).

A partir de ese momento, emprende la titánica labor de estudiar todas las carreras que se cursaban en esa época en la real y literaria Universidad de La Habana. Obtiene sobresaliente en la totalidad de las asignaturas de la Facultad de Farmacia y con igual nota realiza los ejercicios de los grados de bachiller (26 de septiembre de 1876), licenciado (6 de junio de 1880) y doctor (11 de junio de 1880). En este último presenta la tesis El método general adoptado hoy para la investigación de los alcaloides en los envenenamientos ¿llena las exigencias de las ciencias? (1880). Se le expidió el título el 15 de junio de 1880, ese día se le invistió con el grado y su padrino fue el doctor Cayetano Aguilera y Navarro (1820-1884), decano de la Facultad de Farmacia.

En la sección de física de la carrera de ciencias logra sobresaliente en todas las asignaturas, así como en los ejercicios de bachiller (5 de julio de 1878); licenciado (27 de julio de 1880), en el que desarrolla la tesis ¿Qué influencia tiene la nomenclatura en la química contemporánea? y de doctor en ciencias, sección de física (20 de septiembre de 1880), con la tesis Procederes que deben seguirse en el análisis cuantitativo de las aguas minerales naturales, tanto en el manantial como en el laboratorio. Se le expidió el título el 8 de octubre de 1880, ese día recibió la investidura y su padrino fue su maestro y pariente don Felipe Poey, quien al hacer su presentación no pudo ocultar su satisfacción y buen humor al decir: «Como veis, mi ahijado es doctor en todas las facultades y los colores de su birrete así lo delatan, y sin embargo no tiene mas que una cabeza».

Hasta ese momento tenía los doctorados en las carreras de ciencias y desde el curso 1878-1879 comenzó también los estudios de las de letras. Así obtiene sobresaliente en todas las asignaturas de los períodos de licenciatura y doctorado en las facultades de Derecho y Filosofía y Letras y en los ejercicios de licenciado en derecho administrativo (28 de junio de 1882), con la tesis Juicio crítico del impuesto de quintas en España; de licenciado en derecho civil y canónico (17 de noviembre de 1883), con la tesis ¿Qué autoridad debe intervenir en la administración de los cementerios? y de licenciado en filosofía y letras (28 de junio de 1883), con la tesis Colón y sus viajes.

En la Universidad de La Habana se cursaban los estudios del doctorado en estas 3 carreras, pero no se realizaban los ejercicios de grado, que se tenían que hacer en España. En los cursos de 1882-1883 y 1883-1884 obtuvo sobresaliente en las 9 asignaturas de dichos doctorados, pero no realizó en España los ejercicios de los grados, aunque siempre escribió en sus relaciones de méritos que poseía tales títulos. En la carrera de filosofía y letras a sus estudios de lengua latina, cursados en el bachillerato en artes, agregó los de lengua griega, lengua hebrea y sánscrita, además de hablar francés e inglés.

En 1892 recibió el título de maestro habilitado de la Escuela Normal de Maestros de La Habana. Fue el único graduado de la Universidad de La Habana que pudo lucir en los flecos de su birrete los colores de todas las facultades: amarillo dorado de medicina, violado de farmacia, azul de ciencias, rojo de Derecho y celeste de Filosofía y Letras.

Trayectoria laboral

Si enciclopédicos fueron sus estudios superiores, no menos resultó su labor en la enseñanza, dentro y fuera de nuestro más antiguo centro docente universitario.

Desde muy joven comenzó a impartir los variados conocimientos que iba adquiriendo. En el Colegio El Salvador, bajo la dirección del sustituto de José de la Luz y Caballero, el notable pedagogo y jurista doctor José María Zayas Jiménez (1824-1887), enseñó las asignaturas de Física, Química e Historia Natural de 1865 a 1869. En el colegio del estado soberano de Bolívar, en la República de los Estados Unidos de Colombia desempeñó la cátedra de química general en el curso de 1869 a 1870.

De regreso a Cuba, fue nombrado el 28 de septiembre de 1870 conservador director micrógrafo del laboratorio de química de la facultad de medicina de la real y literaria Universidad de La Habana y comienza así su carrera docente en el Alma Mater habanera. En esta plaza se mantuvo hasta el 9 de junio de 1875 en que fue nombrado catedrático supernumerario interino de la propia facultad. En las funciones de este cargo impartió la cátedra de obstetricia de 1875 a 1876, las de ejercicios de disección y osteología 1º y 2º cursos en 1876, las de anatomía descriptiva 1º y 2º cursos, en 1876 y 1877 respectivamente, la de terapéutica, materia médica y arte de recetar en 1877, la de medicina legal de 1876 a 1877 y formó parte de una comisión universitaria que examinó el aire del cementerio Cristóbal Colón, de La Habana.

El 5 de febrero de 1877 fue nombrado catedrático numerario interino de Fisiología, Higiene Pública e Higiene Privada, a las que se agregó a partir del 22 de febrero de 1879 la de Historia de la Medicina.

Por «real orden de su majestad el rey» fue nombrado, el 7 de diciembre de 1880, catedrático numerario propietario con la categoría de entrada de la cátedra de Fisiología Humana, en la que alcanzó la categoría de ascenso por «real orden de su majestad el rey» del 10 de diciembre de 1884 y la de término por «real orden de su majestad el rey» del 19 de mayo de 1893. Un año antes, el 7 de diciembre de 1892, se le había agregado la asignatura de Historia Crítica de la Medicina.

En el desempeño de estas asignaturas llegó hasta la primera intervención militar de Estados Unidos en Cuba, cuando al ponerse en vigor un nuevo plan de estudios en la Universidad de La Habana, que lleva el nombre del secretario de instrucción pública y justicia en aquel momento, José A. González Lanuza (1865-1917), por orden militar núm. 227 de 3 de diciembre de 1899 fue confirmado como «catedrático de término», y nombrado para desempeñar la cátedra de Medicina Legal y Toxicología, la que se unía de ese modo a la de Química Biológica que impartía desde noviembre del propio año.

En la enseñanza de dichas cátedras terminó su brillante y enciclopédica carrera docente, al ser cesanteado por orden militar núm. 266 del 5 de julio de 1900 que puso en vigor un nuevo plan de estudios en la universidad, que lleva el nombre del Enrique José Varona Pera (1849-1933), en aquellos momentos secretario de instrucción pública e inspirador del mismo.

A la Universidad de La Habana, a la que quiso entrañablemente, hizo valiosas donaciones, como fueron: en 1870, un laboratorio para la cátedra de Anatomía General, que como reconocimiento se le mandó llamar Laboratorio Gordon; en octubre de 1879, un laboratorio de Fisiología, el que quedó instalado en el edificio de la Facultad de Medicina, en la calle San Isidro; el 22 de junio de 1880 una valiosa colección de productos farmacológicos para la cátedra de Terapéutica, Materia Médica y Arte de Recetar y corrió con todos los gastos para la creación de la Clínica de Obstetricia, de la cátedra de ese nombre, adjunta al hospital de mujeres de San Francisco de Paula, de la que también fue director fundador.

En la Facultad de Medicina ocupó, además, los cargos de vicesecretario el 26 de abril de 1876 y 4 días después, secretario, hasta el 1 de febrero de 1881.

Fallecimiento

Falleció en La Habana el 8 de febrero de 1917, a los 68 años.

Reconocimientos

No ha habido en Cuba hombre de ciencias o de cultura que recibiera tantos reconocimientos nacionales y extranjeros. En nuestro país fue, entre otras, académico de número (1872), de mérito (1897) y presidente (1895-1897) de la Real Academia de Ciencias Médicas, Físicas y Naturales de La Habana, miembro de la Real Sociedad Económica de Amigos del País de La Habana, miembro fundador de la Sociedad de Estudios Clínicos de La Habana, de la Sociedad Odontológica, de la Sociedad Antropológica de la Isla de Cuba, de la de Higiene y de otras 6 y en el extranjero fue miembro de 30 academias y de otras 79 sociedades científicas o culturales de países de América, Europa, Asia yÁfrica, además de Caballero de la Orden Soberana, Militar y Hospitalaria de San Juan de Jerusalén, Rodas y Malta y recibir múltiples medallas y condecoraciones.

Cuando la última de nuestras guerras por la independencia contra España (1895 –1898), ante la catástrofe epidemiológica que sufriera el país como consecuencia de la inhumana reconcentración de campesinos en las poblaciones, decretada por el {[gobierno hispano, pagó de su dinero para la construcción de los 3 dispensarios para niños pobres de La Habana y fue su presidente facultativo durante la conflagración armada.

Todos estos méritos no pudieron compensar el que fuera ayudante médico del Batallón de Voluntarios de Guanabacoa y que costeara los útiles de una sección sanitaria que prestó servicios en las campañas de la Guerra de los Diez Años (1868 -1878) y por ello fue cesanteado como catedrático de la Universidad de La Habana al cesar en Cuba el gobierno colonial español. Este golpe demoledor, sumió su vida en un largo y doloroso ocaso, en completo aislamiento en su hogar.

Publicaciones

Además de las 7 tesis de grado de que he hecho mención, publicó 2 libros:

  • Curso de Fisiología. Conferencias de Fisiología Celular y generalidades de Fisiología Humana. La Habana: Imprenta El Aerolito, 1891, 262 págs.
  • Lecciones elementales de Fisiología Celular. La Habana: Imprenta y Papelería La Poesía, 1892, 202 págs.

Entre sus numerosos ensayos publicados en folleto:

  • El primer ruido fisiológico del corazón. La Habana: Imprenta Miguel Alorda, 1882, 33 págs.;
  • Medicina Indígena de Cuba y su valor histórico. La Habana: Imprenta Sarachaga y H. Miyares. La Habana, 1894, 42 págs.;
  • Los incendios, los bomberos y la higiene. La Habana: Imprenta La Moderna, 1894, 73 págs.;
  • Higiene del ciclismo en Cuba. La Habana: Imprenta A. Miranda, 1894, 16 págs.,
  • La viavilidad legal y la fisiológica. La Habana: Imprenta La Universal, 1897, 42 págs.;
  • El tabaco en Cuba. Apuntes para su historia. La Habana: Imprenta La Propaganda Literaria, 1897, 85 págs.;
  • La inspección médica de las escuelas. La Habana: Imprenta La Universal, 1898, 61 págs.;
  • La legislación del seguro de vida ante la Medicina Forense. La Habana: Imprenta Rev. de Almacenes, 1898, 63 págs.;
  • Indicaciones terapéuticas de la música. La Habana: Establecimiento Tipográfico Teniente Rey 23, 1898, 64 págs.,
  • La tuberculosis en La Habana desde el punto de vista social y económico. La Habana: Imprenta Militar, 1899, 32 págs.,
  • Consideraciones sobre la voz humana. La Habana: Imprenta Militar, 1899, 40 págs.;
  • Declaremos en Cuba guerra a la tuberculosis. La Habana: Imprenta Compostela, 1899, 32 págs.,
  • El azúcar como alimento del hombre. La Habana: Imprenta Militar, 1899, 32 págs.;
  • Crítica médica de nuestra obstetricia legal en cuanto a los partos precoces y tardíos. La Habana: Imprenta de J. Huguet, 1900, 30 págs.,
  • La legislación sanitaria escolar en los principales estados de Europa. La Habana: Imprenta Ruiz y Hermanos, 1900, 36 págs. y
  • Datos históricos acerca de los cementerios de La Habana. La Habana: Imprenta de J. Huguet, 1901, 40 págs.

A todo esto debemos agregar algo más de medio centenar de artículos o informes científicos de los mas diversos temas, como

Presentación de cuatro hematozoarios encontrados en el corazón de un perro sometido a experimentos fisiológicos (1880),

  • La iglesia y la cremación (1893),
  • El sistema perichón para el agotamiento del bagazo (1902),
  • El alambique de destilación continua de Esteve-Bernard (1902);
  • Progresos en el alumbrado eléctrico incandescente (1903),
  • La telegrafía sin hilos en los días que transcurren (1903),
  • La música de olores y el concierto de perfumes (1904) y
  • Reflexiones médico forenses acerca de la edad fijada por la ley para la celebración del matrimonio (1905).

Fuentes