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{{Personaje_histórico|nombre=Nicolasa Pedraza y Bonachea|imagen=Nicolasa.JPG|descripcion=Educadora, ejemplo de la fe cristiana|lugar_de_nacimiento=[[Santa Clara]], [[Villa Clara]]|fecha_de_nacimiento=[[6 de diciembre]] de [[1770]]|fecha_de_fallecimiento=[[1 de enero]] de [[1867]]|lugar_de_fallecimiento=[[Santa Clara]], [[Villa Clara]]}}'''Nicolasa Pedraza y Bonachea'''. Maestra Santaclareña con una gran fe cristiana. Su papel como educadora tenía que ocupar un lugar cimero en el crecimiento de las personas que tenía a su cuidado para luego lograr una plena inserción en la sociedad. La educación se presenta como un reto en la sociedad en la que le tocó vivir, porque no se trataba sólo de una formación en el área intelectual-cognitiva, sino sobre todo, en la esfera espiritual y moral.
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== Datos biográficos  ==
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'''Nicolasa Pedraza y Bonachea'''. [[Maestro|Maestra]] santaclareña con una gran fe cristiana, que desempeñó su labor entre los siglos XVIII y XIX.
Nicolasa Pedraza y Bonachea; nace en [[Santa Clara]], provincia de [[Villa Clara]], [[Cuba]] un [[6 de diciembre]] de [[1770]]. pierde a sus padres a los 17 años de edad y es a partir de ese momento que se dedica en cuerpo y alma a la enseñanza y educación de los niños santaclareños, labor que como veremos iba encaminada hacia la práctica de la virtud, que se sustentaba en la fe cristiana y que apuntaba al bien de los demás y de la sociedad cubana. Todo esto transcurre en el siglo XVIII y primera mitad del siglo XIX.  
 
  
== Vida Religiosa ==
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== Síntesis biográfica  ==
Nicolasa al dedicarse a este apostolado, renunció al matrimonio y así consagrarse a la enseñanza de los niños, que iba acompañada de una frecuente práctica religiosa. De hecho, según el juicio de [[Francisco Díaz de Villegas]], recogido por [[Manuel Dionisio González]], señala que “su vida y goces se concretan a estar encerrada en su escuela, sin hacer otras salidas que a la iglesia”
 
Además fue profesora de [[Eduardo Machado]], Antonio y [[Guillermo Lorda]], [[Miguel J. Gutiérrez]], [[Tranquilino Valdés]], [[Arcadio García]] y de otros que se entregaron de lleno a la causa de la Independencia, quienes reconocieron en ella ya no sólo como la que les enseñó el arte de leer y escribir en medio de una sociedad iletrada, sino, sobre todo, el amor a la patria, y a la práctica de la virtud.
 
  
== El Legado de la Maestra Nicolasa ==
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La maestra Nicolasa Pedraza Bonachea nació el [[5 de diciembre]] de [[1770]]. Esta insigne mujer vivió para enseñar e hizo historia en esta ciudad, sin proponérselo, en una de las profesiones más nobles que existen, la de educar a los niños. La maestra Nicolasa era eso una educadora dedicada por entero a su labor, una persona muy religiosa y muy modesta que no usó la enseñanza para su utilidad. Por eso, enseñó gratuitamente tanto a alumnos de familias de alto nivel económico como los más pobres de la villa.
En [[1894]], después de varios intentos por reconocer el escudo de armas de [[Santa Clara]], este quedó aprobado con el lema que durante muchos años distinguió el espíritu del pueblo santaclareño: PATRIA, RELIGIÓN Y FAMILIA; bajo éste, aparecía de manera implícita el testimonio de aquellos próceres que soñaron un futuro de prosperidad para este pueblo, y para ello dedicaron sus fuerzas y sus recursos económicos y espirituales. Concedo, Surí, Hurtado de Mendoza, [[Eugenio de Plaza]], Sánchez de la Raya, [[José Dionisio Veitía]], [[Manuel Dionisio González]], Eduardo Machado, Miguel Jerónimo Gutiérrez, [[Eligio Eulogio Capiró]]; los que en esa fecha aún vivían, como la más ilustre de las coterráneas, [[Martha Abreu Estévez]], [[Manuel García Garófalo]], [[Néstor Palma]], [[Julio Jover]], [[Carolina Rodríguez]]; o los que se habían ganado el cariño el cariño de este pueblo por sentirse identificados con él, como el P. Alberto Chao. Un legado, por una parte sencillo, y por otra de un gran componente antropológico. Fundadora sin dudas, de todos esos nobles ideales, constituye la Maestra Nicolasa, formadora de tres generaciones de santaclareños.  
 
  
En este proceso que marcaría los casi 97 años de vida de Nicolasa, el objetivo fundamental tenía que ser la adquisición de la verdad. Por la fecha en que más fecundo se hizo su magisterio, cuando esa pléyade de santaclareños estaba junto a su tutela, surgió otro gran maestro de la pedagogía cubana, [[José de la Luz y Caballero]].  
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Comenzó a ser maestra desde los catorce años de forma empírica, pues no tenía preparación académica para enseñar. No obstante, su vocación innata le permitió realizar esa labor de forma excelente demostrado por la preferencia de los padres de los niños que pudiendo pagar estudios a sus hijos los enviaban a la escuela de la maestra Nicolasa. No hubo excepción para enviar niños y niñas que no era lo usual- en la colonia existía la segregación sexual en la educación- pero la escuela de Nicolasa era para ambos sexos<ref>González, Manuel Dionisio (1858): ''Memoria histórica de la villa de Santa Clara y su jurisdicción''. Imprenta Del Siglo, Santa Clara, pp.460-462.</ref>.  
  
Del anhelo de enseñar, aparece entonces otro aspecto que se resalta en la Maestra, donde parece que hace suya las palabras de San Agustín, que en sus Confesiones, afirmaba: “separarse de Dios, aunque se partan de las cosas buenas, es imposible encontrar la verdad, toda búsqueda de ella se vuelve vanidad”; de ahí que al mirar la estela de sus discípulos más eximios, notamos un gran componente espiritual, aunque la mayoría no haya después practicado con asiduidad el catolicismo y sí la masonería; ejemplo de ello lo constituye el vasto testimonio de [[Eduardo Machado]] recogido en: “Eduardo Machado, su vida y sus obras”, de [[Manuel García Garófalo]], en el Tomo II; donde se recoge un largo discurso que hizo el patricio en ocasión del deceso de la Maestra, y en el que se recogen numerosas referencias a su vida notablemente espiritual.
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De esa manera, formó tres generaciones de santaclareños, entre ellos los que después fueron patriotas en la [[Guerra de los Diez Años (1868-1878)|guerra del 68]] como: [[Eduardo Machado]].<ref>Juan E. Valdés (1918): ''El 15 de Julio''. Imprenta Del Siglo, Santa Clara, p.38</ref>
  
Estos dos pilares, la verdad y  fe, señalan el aparentemente sencillo método educativo utilizado por cerca de 70 años en el magisterio de Nicolasa, que dio frutos de bien no sólo por los que se beneficiaron directamente de su enseñanza, sino de las generaciones posteriores que en ella descubrieron un signo claro, de la importancia de la formación de la juventud para garantizar el futuro de la sociedad.
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===Muerte===
  
Quizás el mejor testimonio de todo lo que se ha dicho, son las propias palabras de aquellos que la conocieron y que quedaron grabadas en la tarja de mármol que se colocó frente a su casa, después de su muerte: “EN ESTA CASA NACIÓ LA MAESTRA NICOLASA. AQUÍ VIVIÓ Y  MURIÓ ENSEÑANDO Y  PRACTICANDO LA VIRTUD”
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Nicolasa Pedraza murió a los 96 años y se conoce, que en su ancianidad continuaba con su labor pedagógica. Fue acompañada hasta el cementerio local por todo el pueblo, el día de su muerte, que ocurrió el 1ero de enero de [[1867]]. Su exdiscípulo Eduardo Machado le mandó a construir una tumba decorosa y colocó en la fachada de su casa una tarja que decía:  
[[Miguel Jerónimo Gutiérrez]], al ocurrir el fallecimiento de quien fuera su maestra  dice:
 
  
Joven después y fuerte en su desgracia
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La temieron las víboras del mal,
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Esa tarja fue retirada cuando la casa fue demolida y se conserva en el Museo Provincial de Historia. Una copia aparece en este parque después de remodelado y atendido por el Proyecto de la Casa Maní Bormey.
  
Y la trataron de oropel vestidas
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==Referencias==
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{{listaref|2}}
  
Guardas infames de su pobre umbral
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== Fuentes  ==
  
Pero la virgen, pura como un lirio
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* González, Manuel Dionisio (1858): ''Memoria histórica de la villa de Santa Clara y su jurisdicción''. Imprenta Del Siglo, Santa Clara.
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* Juan E. Valdés (1918): ''El 15 de Julio''. Imprenta Del Siglo, Santa Clara, p.38
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* Machado Gómez, Eduardo (1981): ''Autobiografía''. Ediciones Oriente. Santiago de Cuba.
  
Torció indignada el rostro al no vil
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[[Categoría:Pedagogos de Cuba]]
 
 
Acaricio su manto de desdichas
 
 
 
Y limpia en él se guarneció sutil (16).
 
 
 
== Muerte ==
 
Falleció en Santa Clara, el [[1 de enero]] de [[1867]]; a la edad de 97 años. [[Eduardo Machado]] se ocupó de su entierro, además de tener la iniciativa de colocar una tarja de mármol en la puerta de la casa donde había vivido y practicado su magisterio.
 
 
 
== Fuentes ==
 
*Archivo histórico del Museo de Arquitectura Colonial de Trinidad.
 
 
 
 
 
[[Category:Personajes_de_la_Historia_de_Cuba]]
 

última versión al 10:50 12 mar 2022

Nicolasa Pedraza y Bonachea
Información sobre la plantilla
La-maestra-nicolasa1.jpg
Nacimiento5 de diciembre de 1770
Santa Clara, Villa Clara, Bandera de Cuba Cuba
Fallecimiento1 de enero de 1867
Santa Clara, Villa Clara, Bandera de Cuba Cuba
NacionalidadCubana
CiudadaníaCubana
OcupaciónProfesora

Nicolasa Pedraza y Bonachea. Maestra santaclareña con una gran fe cristiana, que desempeñó su labor entre los siglos XVIII y XIX.

Síntesis biográfica

La maestra Nicolasa Pedraza Bonachea nació el 5 de diciembre de 1770. Esta insigne mujer vivió para enseñar e hizo historia en esta ciudad, sin proponérselo, en una de las profesiones más nobles que existen, la de educar a los niños. La maestra Nicolasa era eso una educadora dedicada por entero a su labor, una persona muy religiosa y muy modesta que no usó la enseñanza para su utilidad. Por eso, enseñó gratuitamente tanto a alumnos de familias de alto nivel económico como los más pobres de la villa.

Comenzó a ser maestra desde los catorce años de forma empírica, pues no tenía preparación académica para enseñar. No obstante, su vocación innata le permitió realizar esa labor de forma excelente demostrado por la preferencia de los padres de los niños que pudiendo pagar estudios a sus hijos los enviaban a la escuela de la maestra Nicolasa. No hubo excepción para enviar niños y niñas que no era lo usual- en la colonia existía la segregación sexual en la educación- pero la escuela de Nicolasa era para ambos sexos[1].

De esa manera, formó tres generaciones de santaclareños, entre ellos los que después fueron patriotas en la guerra del 68 como: Eduardo Machado.[2]

Muerte

Nicolasa Pedraza murió a los 96 años y se conoce, que en su ancianidad continuaba con su labor pedagógica. Fue acompañada hasta el cementerio local por todo el pueblo, el día de su muerte, que ocurrió el 1ero de enero de 1867. Su exdiscípulo Eduardo Machado le mandó a construir una tumba decorosa y colocó en la fachada de su casa una tarja que decía:

"En esta casa nació la Maestra Nicolasa. Aquí vivió y murió enseñando y practicando la virtud[3]."

Esa tarja fue retirada cuando la casa fue demolida y se conserva en el Museo Provincial de Historia. Una copia aparece en este parque después de remodelado y atendido por el Proyecto de la Casa Maní Bormey.

Referencias

Fuentes

  • González, Manuel Dionisio (1858): Memoria histórica de la villa de Santa Clara y su jurisdicción. Imprenta Del Siglo, Santa Clara.
  • Juan E. Valdés (1918): El 15 de Julio. Imprenta Del Siglo, Santa Clara, p.38
  • Machado Gómez, Eduardo (1981): Autobiografía. Ediciones Oriente. Santiago de Cuba.