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Demografía y esclavitud en  Macagua.
Aporte de Los Arabos a la cubania. Demografía, urbanismo y azúcar en Los Arabos en la etapa colonial.

Cuando nos referimos a La Macagua, debemos aclarar, historiamos al territorio que desde 1927 constituye oficialmente el municipio donde vivimos. Está situado en la zona más oriental de la provincia de Matanzas. Limita al noroeste con los municipios de Martí y Colón, al noreste con la provincia de Villa Clara, al sudeste con la provincia de Cienfuegos y al sudoeste con el municipio de Calimete. Posee una superficie total de 760,30 km2. Por su extensión ocupa el sexto lugar y el 6,4% del territorio total de la provincia.

A la llegada de sus primeros pobladores, de los cuales tengamos noticias, era un paraíso colmado de árboles de maderas preciosas tales como: Caoba, Majagua, Cedro, Acana, Ocuje, muy abundante el Pino, El Árbol Florido, el Flamboyán, los Cardones, Güiras, en menor proporción los Álamos, algunas Ceibas y apreciamos en gran medida la majestuosa Palma Real. Más tarde fueron desapareciendo como resultado de la cría indiscriminada de ganado y también a la tala inmerecida.

Fueron otorgadas las primeras mercedaciones de tierras a familias de procedencia española, siguiendo los requisitos establecidos por la corona. En el territorio que nos ocupa, expresamos como la primera mercedación de tierras la que ocurrió el 27 de Abril de 1589 a Juan Sánchez de unas sabanas que llaman “El Ciego”. Consideramos este el inicio del proceso de mercedación en la localidad, el cual alcanza mayor auge en el siglo XVII.

Existieron dos hatos en la zona “Las Guásimas” situado al sudoeste, “Potrerillo de Álvarez” al noreste y dos corrales “Las Ciegas” al noroeste de Pedro Recio Oquendo y “Macagua” que ocupaba el mismo centro de la zona mencionada. Además de un porciento no elevado de tierras realengas. La mercedación de 1628 fue a un sitio llamado “San Antonio” entre el hato “Las Guásimas” y “Potrerillo de Álvarez” y el corral “Las Ciegas”.

Posteriormente, el 17 de diciembre de 1630 se pide el sitio “Ciega de la Nuevas”, junto a “Las Guásimas”. Al año siguiente se hace petición del sitio “Laguna de Rojas” que limita con “Guásimas” y “Potrerillo”.

Transcurre un período de trece años para que el 6 de abril de 1644 se solicitara licencia con el fin de que en los hatos “El Potrerillo”, “Las Guásimas” y “Laguna Grande” se hiciese población de ganado menor. Días después, específicamente el 14 de abril se reclaman “Las sabanas de Pablo”, lindando con “Potrerillo” y “Laguna Grande”.

Acontecieron seis años para que se demandara “Sabanas Nuevas”, el 21 de enero de 1650, ubicada dentro del hato “Potrerillo”. El 6 de marzo de 1652 solicitaron el “Ojo de Agua del Ciego”, que colinda con “Potrerillo” y el hato “Guareiras”. En otro corto plazo, el 17 de abril de 1654 se pide el sitio “El Ciego” que limita con “Potrerillo”.

Corren 14 años para realizarse dos mercedaciones más. En 1668 una “El corral de La Macagua” de San Antonio y otra del sitio nombrado “Ciego” que limita con “Potrerillo”, “Guásimas” y “La Macagua”. Consecutivamente el 8 de marzo de 1674 demandan “Laguna del Jacán”, limítrofe con “Guareiras” y “Las Guásimas”.

A fines del siglo XVII, en 1684 a doce años de la mercedación anterior, mercedan los sitios “Cabezadas del Río” y “Las Ciegas”, colindante con “El Ciego”, “Las Guásimas” y “La Macagua”.

En los primeros años del siglo XVIII, específicamente en 1703, reclaman las tierras de “La Macagua”. No es hasta 1717 que solicitan las sobras de tierras realengas entre las haciendas “San Blas”, “Guamutas”, “La Macagua” y “Potrerillo” para agregárselas al corral nombrado “Las Ciegas”. Apreciamos que en no pocos casos las mercedaciones se repetían como en el caso “La Macagua” o “San Antonio” que son mercedados en 1629, en 1668 y finalmente en 1705.

Esto respondía a las siguientes causas:

• No cumplir con el requisito de poblar la tierra otorgada en tiempo fijado. • No proceder a pagar al cabildo los trámites de mercedaciones. • El radio de las mercedaciones de tierras oscilaba entre 1 y 3 leguas y el territorio sobre el que se hacia la solicitud podía ser más extenso por tal razón era posible otorgar tierras con el mismo nombre y no ser las mismas, entre otros.

Estas mercedaciones de tierra son las que arrojan el resultado de nuestra investigación. No obstante, por aparecer algunas tierras con nombres como: “Las Guasimas”, “Potrerillo de Álvarez” entre otros, denota la ocupación de territorios con anterioridad y posterioridad de la cual desconocemos fecha y dejamos a futuras investigaciones.

El desarrollo económico para estos años fue muy lento. Las concesiones de tierra por los cabildos, constituyeron vehículo legal para que los colonizadores se dedicaran a la cría de ganado en la segunda mitad del siglo XVI, estimulados por la necesidad de la carne y el valor del cuero, hasta el siglo XVIII el renglón económico fundamental en estas tierras lo ocupó la ganadería.

En tanto, el azúcar no avanza significativamente en la etapa. En toda la provincia hay un pequeñísimo número de instalaciones industriales y pocas extensiones de tierras dedicadas al cultivo de la caña. A finales del siglo XVIII carece este territorio de importancia azucarera. Se registran solo dos pequeños ingenios o trapiches, cuya producción fundamental eran raspaduras y mieles. Uno en Palmillas en 1784, considerado el primero en lo que conforma nuestra actual localidad, seguido por otro en Monte Alto del señor Juan López en 1794. Estos lugares conservan esos nombres.

La actividad económica de la etapa nos da elementos para sustentar la escasez de población en la zona. Los pocos habitantes que aquí existieron fueron dirigidos religiosamente por un cura ubicado en el hato de “Guamutas”. Allí sus vecinos desde las últimas décadas del siglo XVII habían construido una parroquia. Constituyó el centro religioso de todo el territorio. Fue destruida junto con su archivo por un incendio ocurrido entre los años 1770 y 1779. Lo poco poblado del lugar provocó la escasez de información acerca de manifestaciones culturales.

La producción de azúcar se extiende a casi toda la región matancera. Comenzó a proporcionar una riqueza que iría en ascenso y más tarde pasa a formar parte de la base del auge económico y cultural de esta zona del país. Entre 1818 - 1839, se produce la primera fase de esplendor económico de Matanzas. La expansión azucarera que se inicia en La Habana, llega en este período a la llanura colombina. Aumentan grandemente las plantaciones cañeras, conformándose así una rica zona cañera dentro de la cual se destaca La Macagua.

El proceso de construcción de ingenios en esta zona fue continuo. En 1825 el del señor Felipe Recio Oquendo, en 1834 Don José Delgado, fomentó un ingenio en la finca “Rosalía”. Un año después, Don Javier Santa Cruz comenzó la construcción de 2 ingenios: “Reserva” y “Sociedad”, en fincas así nombradas.

En 1835 los señores Zuasnábar y Alcia, crean una sociedad y fomentan el ingenio “Recompensa” y cinco años después, es decir, en 1840 el señor Don José Bacallao funda en su finca el ingenio “Caridad”. Los ingenios de esta zona por lo general recibían los mismos nombres que las fincas donde estaban ubicados.

En la zona Macagüera las plantaciones cañeras tuvieron gran importancia y entre las personalidades que impulsaron este desarrollo se destacaron Francisco de Arango y Parreño y el Marqués de Arcos. Se dice que este último, en honor a su hija nombró a la finca de su propiedad “Marquesita”, lugar que conserva ese nombre.

Desde finales del siglo XVIII, se evidenciaron en nuestro país gestiones para tecnificar la industria azucarera. En 1819 traen a Cuba la máquina de vapor, esta se propaga lentamente. Con el de cursar de los años dicha tecnología es incorporada a los ingenios de la zona de La Macagua. El primero en utilizarla fue el ingenio “Reserva”.

Se evidencia en la provincia de Matanzas un despegue de la situación poblacional. Se produce un crecimiento condicionado por el florecimiento económico; destacándose la población de color por constituir estos la fuerza de trabajo en las plantaciones azucareras e ingenios, en las construcciones, además en otros renglones de la agricultura y en trabajos domésticos.

La construcción de ingenios propició que alrededor de estos se establezcan pequeñas aldeas, cimientos de futuros núcleos poblacionales, algunos de ellos conservados en la actualidad como: Arango, Marquesita, Occitania, Aguedita, entre otros.

En zonas densamente pobladas para la época como Palmillas se erigen caseríos de importancia tal que para 1817 el Vizcaíno Don Martín José Zozaya, demuele su hacienda “La Bermeja” para repartir sus tierras a censo. Allí se asentaron gran cantidad de vecinos.

Palmilla constituyó en esos años el centro en el cumplimiento de obligaciones religiosas. Fue el lugar donde acudió la vecindad para adquirir productos necesarios. Estos elementos propiciaron el incipiente movimiento económico y cultural.

Los terrenos donde se fomentó este caserío pertenecían al hato “Las Guasimas”, muy estimado para el cultivo de la caña de azúcar. Contaba en esta fecha con una población de 218 habitantes, de ellos la mayoría negros y mulatos.

Las viviendas construidas en su generalidad eran de tablas y tejas, de embarrado y guano. Había una sola de mampostería, ocupada por un comisionado de origen hispano.

El territorio que hoy ocupa el municipio de Colón, antigua Nueva Bermeja, perteneció en esta fecha a la capitanía pedanía de Palmilla, desde el punto de vista judicial. El capitán del partido de Palmilla era Don Germán Cabrera, representante de la autoridad en “Nueva Bermeja”.

En el establecimiento de poblados como Palmilla (1817) convergen factores de importancia estrechamente relacionados: Despegue económico, crecimiento poblacional, erección de templos religiosos, entre otros.

La situación económica y el ya citado aumento poblacional, propiciaron que gran cantidad de personas se encontraran desorganizadas en los campos. Estos con hábitos de la práctica del culto cristiano, manifestaban la necesidad de una instalación religiosa.

Podemos considerar entonces que en el caso de Palmillas, en 1817, surge su caserío. Un año más tarde se erige la parroquia como tenencia auxiliar de Guamutas. Esta celebró el primer bautizo de personas pardas o morenas el 14 de febrero de ese mismo año. La erección de templos católicos, debemos considerarlos reflejos del desenvolvimiento económico y poblacional de la zona en el período.

Por otra parte, el territorio donde fue mercedado 1668 “La Macagua” hasta los años 1835 -1836 no se construyen las primeras viviendas. Es a partir de entonces, que podemos entrar a considerar el nacimiento de lo que en el futuro sería término municipal.

Entre los años 1840 y 1860 en la zona de Matanzas se mantiene la producción azucarera como primer renglón económico. Para la fecha ya el azúcar se ha expandido hasta la Macagua. En esta hay un desarrollo notable del cultivo de la caña, las demás exportaciones son mínimas. La fundación de ingenios desde el período anterior cobra gran importancia en la localidad. La expansión cañera tomaba fuerzas en estas tierras vírgenes y fértiles.

La fundación de ingenios azucareros provoca transformaciones profundas en la geografía del territorio. La ganadería extensiva que anteriormente se practicaba, destruyó en buena medida los inmensos bosques poblados de maderas preciosas, además de la tala indiscriminada de los colonizadores.

Este importante período iniciado en 1840 sienta para Macagua las bases en la creación de la industria azucarera, la que se mantiene hasta nuestros días. Se dan pasos sólidos para la sustitución de la manufactura por nuevas técnicas en la agricultura y en las fábricas. En el territorio donde incluimos a Macagua y Palmillas, se suman al centro de mayor densidad y capacidad industrial del país que era la jurisdicción de Colón.

Entre 1840 - 1850 aparecen los cimientos que convirtieron al territorio Colombino en la década posterior, en un imperio azucarero en Cuba. No sólo por la cantidad de ingenios, sino también por el empleo de una tecnología avanzada para la época.

El auge azucarero y su modernización requerían de la confección de cantidades de utensilios para los ingenios y también para la agricultura relacionada con él. En 1843 apareció en Palmillas, el primer taller de herrería, cardería y fundición que se conozca en toda la provincia.

En el partido de Macagua se construyen ingenios entre ellos el “Dulce Nombre de Jesús” en 1843, en la época fue conocido con el nombre de “Muro”. Posteriormente se convierte en Sociedad Anónima con el mismo nombre, evidenciando así en la zona el proceso de concentración y centralización de pequeños ingenios. Antiguos trapiches convergen en este. Su localización fue en la antigua y demolida hacienda “La Culebra”, en el barrio de Cuatro Esquinas, perteneciente al ayuntamiento de La Macagua

El Conde de O’Relly en su finca “Marquesita” en 1856 fundó el ingenio “San Francisco”, conocido más tarde con el nombre de “San Luciano”. Este es uno de los ejemplos de la importancia de esta zona desde el punto de vista azucarero y del interés de poderosas personalidades del Occidente en el territorio matancero.

Hasta 1843, Matanzas se mantuvo como única jurisdicción. En este mismo año Cárdenas demandó una reorganización y las tres cuartas partes del territorio de la actual provincia a ella pertenecían, La Macagua y Palmillas en el se incluían. Este lugar se convirtió en pueblo cabecera del partido de su nombre.

Cuando el apogeo azucarero se extiende hasta Macagua se exige una nueva reestructuración. En 1855 surge la Alcaldía Mayor de Colón. Esta jurisdicción quedó integrada por 5 capitanías pedáneas: • Macurige • Hanábana • Jíquima • Palmillas • Macagua De manera que la jurisdicción de Palmillas comprendía esa única población, mientras que Colón abarcaba las siguientes poblaciones: • Guerreros • Macagua • Pijuan • San José de Los Ramos • Tinguaro • Alaba • Banagüises • Colón.

En marzo de 1858 el general José Gutiérrez de la Concha, capitán General de la Isla, creó la comandancia militar de Colón, con ello la tenencia de gobierno que llevaba implícita la instalación de la administración municipal.

Posteriormente el capitán Pedáneo de la Macagua, propone el 23 de agosto de 1862 la creación de una tenencia con residencia de ese lugar, pues el territorio a su cargo era extenso y radicaba en San José de Los Ramos, aspecto que obstaculizaba un tanto el buen control sobre la Macagua.

En la jurisdicción de Colón, según el censo de 1861, existía el 53% de la cantidad de esclavos de toda la zona de Matanzas. Con el desarrollo de las plantaciones cañeras el desarrollo de la población avanzaba.

En las labores de cultivo de la caña, producción de azúcar y otros de tipo agrícola y doméstica se utilizaba la fuerza de trabajo esclava, estos fueron traídos del continente africano. Estaban sometidos a 16 horas de trabajo y a condiciones infrahumanas de vida. La dotación del Ingenio “Occitania” sintió fuertemente la barbarie del sistema esclavista tanto en el campo como en los barracones.

Las mujeres eran utilizadas preferentemente en el campo. Los demás esclavos eran empleados en el ingenio y otras labores domésticas, porque también era necesaria la producción de cultivos como viandas, maíz y otros para el consumo de la dotación esclava. A estos se sumaba la cría de animales. Las edades de los esclavos oscilaban entre 25 y 45 años, el 63 % de la dotación era africanos y el resto criollo.

Total Al campo Hombres 77 35 Mujeres 51 44 Tabla 1: Incorporación de la mujer esclava al campo.

Gráfica 1: Porciento de esclavos de origen africano y esclavos criollos.

En el Partido de Macagua la población esclava representaba el 65,9%, mientras que en Palmillas el 34,1%. La diferencia está condicionada por el hecho de que en estos años Macagua había ganado en importancia económica al tener mayor extensiones de tierras dedicadas al cultivo de la caña de azúcar, mayor número de ingenios; como tal era una jurisdicción. Gráfica 2: Porciento de la población esclava en los partidos de Macagua y Palmillas.

Las innovaciones técnicas en la industria azucarera, las proporciones entre esclavos y asalariados comienzan un proceso de inversión. El esclavo no podía responsabilizarse con las nuevas técnicas para la aplicación de estas era necesario tener una preparación mínima, cuidado y atención. Era imprescindible que las máquinas fueran operadas por obreros de mayor calificación. Numerosos intentos se realizaron para sustituir la fuerza de trabajo esclava africana. Es cuando en 1847 importan colonos asiáticos, estos resultaron la solución de la problemática antes planteada. Eran eficientes y no significaban motivos de preocupación para los plantadores industriales.

Para el año 1850 se eleva la emigración asiática en la provincia de Matanzas, en 1862 los chinos contratados representaban el 10% del total de esclavos. En Colón existían para entonces 5 862. En los partidos de Macagua y Palmillas trabajaban una cantidad de asiáticos y menos cantidad de yucatecas.

A partir de que la mano de obra esclava africana era fundamental en las plantaciones, fueron explotados allí también chinos y yucatecos. Esto lo demostraba el hecho de que en el partido de Palmillas todos los colonos asiáticos habitaban en los ingenios.

Estos vivían en condiciones similares a los esclavos de origen africano. Laboraban entre 15 y 16 horas diarias, producían más y estaban más capacitados para el trabajo con las máquinas, el salario era bajísimo. Estaban obligados a servir como mínimo 4 años para comprar su libertad a un precio de 400,00 pesos, gestión prácticamente imposible ya que recibían 4 pesos mensuales de salario.

El medio de pago en los ingenios era la ficha con valor sólo en el propio ingenio. A través de estas el trabajador adquiría ropas, calzado, víveres, etc., a precios y condiciones impuestos por el patrón.

La decadencia del esclavismo como sistema socioeconómico era evidente con los intentos de sustituir la mano de obra esclava por la asalariada.

Con la expansión del azúcar en toda la jurisdicción colombina y la introducción del ferrocarril a diferentes zonas productivas, la política de fundación de caseríos que posteriormente se convierten en poblados, ciudades comienza a manifestarse. Es decir el proceso de fundación está indisolublemente relacionado al tema caña - ferrocarril.

En el caso de Macagua, hay numerosos documentos a tener en cuenta para determinar la fecha, o al menos los años entre los cuales puede considerarse la creación de este poblado.

Desde las primeras décadas del siglo XIX incitados por el interés de fomentar plantaciones cañeras y la construcción de ingenios llegan numerosos familiares al territorio, paulatinamente crece la cantidad de habitantes; estos fundamentalmente de raza negra. Como consecuencia se construyen viviendas, establecimientos, almacenes, comercios, etc. Comienza todo un movimiento constructivo que alcanza su mayor esplendor en la segunda mitad del siglo.

En 1852 el incremento productivo de la zona precisa imperiosamente la llegada del ferrocarril que hace su entrada en este año, para satisfacer la transportación del azúcar hasta el puerto de Cárdenas.

Por todos estos elementos de gran importancia establecemos que entre 1840 y 1868 ya existe un pueblo aquí constituido espontáneamente y sin oficialización.

En el caso de Los Arabos hoy núcleo central y cabecera del municipio del mismo nombre, se comenzó a fomentar a partir de 1852. El camino férreo llega precisamente a este lugar donde existía un pequeño monte de árboles de arabos. Muy pronto comienza a darse todo un movimiento constructivo alrededor del paradero del ferrocarril como por ejemplo establecimientos mixtos para fondas y posadas, oficinas de correos y telégrafos, carpinterías, casas de viviendas entre otras.

Algo de importancia expuesto por Jacobo de la Pesuela es que Macagua se componía además del edificio de estación de una buena fonda y seis casas de tablas. Aquí seguramente se está refiriendo al poblado que estaba fomentando alrededor del paradero de Los Arabos.

En el período que transcurre entre 1840 a 1860 hay un notable desarrollo urbanístico en los partidos de Macagua y Palmillas.

Según el cuadro estadístico de 1846 las viviendas en Palmillas estaban construidas de maderas, techo de tejas y guano. Los pobladores del lugar habían fabricado tres pulperos, una tienda mixta, una panadería, un establecimiento para fondas y posadas, una zapatería y una herrería. Comparado con la cantidad de habitantes de este lugar, su desarrollo urbanístico respetable.

Una de las construcciones importantes de este período fue la casona de vivienda de los dueños del ingenio “Occitania”, constituye la casa más antigua de esta localidad, de cantería y teja, está conservada hasta nuestros días con solo transformaciones interiores.

En terrenos aledaños al ferrocarril del paradero de Los Arabos, los señores José Fidel Zuasnárbar y Luís Groalli permitieron que se construyera un caserío y construyeran un edificio de madera y teja para que funcionara como establecimiento mixto. Estuvo ubicado en el terreno que ocupa actualmente “La Diana”, el establecimiento se inauguró el primero de enero de 1853. Un año más tarde el señor Don Joaquín Artce en estos mismos terrenos la segunda casa para fondas y posadas. Prestaba alojamiento para quienes transitaban en esta zona.

El gobierno colonial en enero de 1854 comenzó a construir el edificio para oficinas de correos y telégrafos. Ordenándose pasar la administración de correos de quinta clase del poblado, de Macagua al paradero de Los Arabos.

Ya desde 1852 se había inaugurado el paso del ferrocarril por esta zona con la oficina del correo y del ferrocarril se suspendió el transporte de correspondencias a caballo, responsabilidad de nuestro cartero Saturnino Santurio.

En el período que transcurre entre 1837-1868, hay un hecho de gran importancia en la evolución demográfica que es el crecimiento natural de la población blanca y negra en Cuba.

Se calcula que para 1841 la población esclava alcanza la cifra más alta de Cuba, alcanzando el 43,3% de mayor concentración de la población esclava se producía en zonas de gran producción azucarera como Matanzas, Cárdenas, Colón y dentro de Colón ubicamos a Macagua y Palmillas.

En 1841 en el partido de Palmillas existían 193 habitantes, cifra que asciende a 243 en 1846 según el cuadro estadístico de 1846, estos habitantes se encontraban distribuidos de la siguiente forma:

Raza/condición Cantidad % de la población que representa en el poblado.

Blancos 135 55,5 Negros libres 92 37,9 Esclavos 16 6,6 Tabla 2: Porciento de la población por razas en 1946

Gráfica 3: El porciento de esclavos, blancos y negros libres de la población.

El pueblo de Palmillas y el caserío de Nueva Bermeja (Colón) que pertenecía a este partido tenían entre ambos.

Lugar Cantidad % de la población que representa En población 432 5,5 En ingenios 3.360 42,1 En las restantes fincas 4.182 52,1 Total de habitantes 7.974 100 Tabla 3: Porciento que representa la población

De los resultados anteriores se deduce que la mayor parte de la población estaba relacionada con el trabajo agrícola.

Para 1857 - 1858 existían 14.373 habitantes en el partido de Macagua, distribuidos de la siguiente forma:

Población blanca Blancos Colonos emigrados de Yucatán Colonos Asiáticos V H V H V H 1.680 1.377 2 - 913 - Población negra Libres V H Esclavos V H Emancipados Pardos 114 61 53 286 132 154 V H Morenos 200 69 131 9.758 6.124 3.634 31 10 Total 314 130 184 10.044 6.256 3.788 41 Tabla 4: Población blanca y negra en los años 1857-1858

Resumen Raza Total % de la población que representan Blancos 3.974 27,6 Negros 10.399 72,4 Total 14.373 100 Tabla5: Porciento de la población de Macagua

Al analizar comparativamente estos datos se puede llegar a las siguientes conclusiones: • La población negra ocupa la mayor cantidad de habitantes en el partido de Macagua (ver gráfico siguiente).

Gráfica 4: Porciento de la población negra y Blanca en Macagua.

Esta población se encuentra distribuida en los siguientes lugares:

En la población 714 Ingenios 9 495 Potreros 1.705 Sitios de labor 1.631 Otras fincas 785 Establecimientos rurales e industriales 243 Tabla 6: Distribución de la población.

Para 1857 - 1858 en el partido de Palmillas 5.281 habitantes, distribuidos de la siguiente manera:

Población blanca Blancos Colonos y emigrados de Yucatán Colonos Asiáticos V H V H V H 1 082 853 - - 421 - Población negra Libres V H Esclavos V H Emancipados Pardos 392 205 187 289 160 129 V H Morenos 154 89 65 2.066 1.119 947 20 4 Total 546 294 252 2.355 1.279 1076 24 Tabla 7: Comportamiento de la población blanca, parda y morena. Resumen Raza Total % de la población que representan Blanca 2.356 44,6% Negra 2.925 55,4% Total 5.281 100% Tabla 8: Porciento de la población por Razas.

Al analizar los datos podemos llegar a las siguientes conclusiones: • La población negra ocupa un poco más que la blanca en el partido de Palmillas (Ver Gráfico Siguiente). • La población total del partido la componían 3 096 varones que representaban el 58,6% y 2 185 hembras que representaban el 41,4%.

Gráfica 5: Población Negra y Blanca en el partido de Palmillas.

La población del Partido de Palmillas se encontraba distribuida en los siguientes lugares:

En la población 174 Ingenios 1.770 Potreros 786 Haciendas de crianzas 254 Sitios de labor 2.238 Establecimientos rurales e industriales 59 Tabla 9: Distribución de la población en el Partido de Palmillas.

Gráfica 6: Población negra y blanca de los Partidos de Macagua y Palmillas.

Si comparamos ambos partidos nos damos cuenta que la población negra es la dominante. Los colonos asiáticos y los emancipados que habitaban en este partido residían solo en ingenios. Si comparamos ambos partidos nos damos cuenta que la población negra es la dominante.

Al concluir la guerra de los Diez Años, se establecen algunas reformas del régimen colonial en Cuba. Una de ellas fue la nueva división política administrativa. A partir de esta nuestro país quedó dividido en seis provincias: • Pinar del Río. • Habana. • Matanzas. • Santa Clara. • Puerto Príncipe. • Oriente.

Para entonces Macagua y Palmillas formaban parte de la jurisdicción de Colón los pobladores habían iniciado las gestiones para crear un ayuntamiento que administrara y dirigiera los asuntos de esta localidad.

En documento del Archivo Histórico Nacional, podemos encontrar la siguiente información, en la que se da a conocer la creación del ayuntamiento de Macagua: “Ayuntamientos” El Máximo Señor Gobernador General, en uso de las facultades que le concede el artículo séptimo de la ley provincial municipal del 21 junio último y previo a los requisitos que en el mismo se determinan, se ha servido acceder a la solicitud por los vecinos de los cuartones de "Macagua y Monte Alto", concediéndole la creación del municipio y la consiguiente elección de ayuntamiento propio, segregándose al efecto de la jurisdicción municipal de Colón la que hasta ahora ha pertenecido.

Lo que de orden de S.E se publica en la Gaceta Oficial para general conocimiento.

           Habana 26 de septiembre de 1878.
           El Secretario del Gobierno General
                             R. Galvis. 

Este se oficializó el 1ro de enero de 1879. A raíz de la designación de Macagua como término municipal segregado de Colón. En la provincia de Matanzas existían cinco partidos judiciales. Uno de ellos era Colón comprendía entre otros los ayuntamientos de Palmilla y Macagua. El 27 de Julio de 1880 se agrega del término de Colón a los vecinos de Palmilla para la creación del ayuntamiento propio, comenzó a funcionar en el mes de agosto. Este partido sufrió una reducción de terrenos para contribuir a la formación del partido de Macagua.

En 1898 es trasladado el ayuntamiento y el juzgado desde Macagua a Los Arabos. Al terminar la contienda el poblado de Macagua estaba casi abandonado, condicionado por los embates de la guerra, el proceso de reconcentración de Weyler que afectó a toda la provincia, así también a Macagua y San Pedro de Mayabón. También las discrepancias existentes entre los habitantes por la falta de recursos de todo género, entre otros elementos poco conocidos. Es por ello que el 22 de junio de l898, el comandante militar de Matanzas en una comunicación a la alcaldía de Los Arabos, invita a los vecinos a trasladarse al pueblo del paradero (Los Arabos).

Según el censo de población de la isla de Cuba en 1877, el partido de Macagua tenía 7 068 habitantes, de ellos 4 429 eran varones que representaba el 62,7 % y 2 639 hembras que representaban el 37,3 % de la población del partido, distribuida de la siguiente forma:

Blancos Varones 2 076 Hembras 1 600 Extranjeros Varones 20 Hembras 5 Asiáticos cumplidos Varones 233 Asiáticos colonos Varones 1 475 De color libres Varones 1 057 Hembras 1 006 De color cuartados Varones 3 Hembras 2 De color esclavos Varones 1 386 Hembras 836 Tabla 10: Censo de población del partido de Macagua de 1877

Este mismo censo arrojó para el partido de Palmillas un total de 7838 habitantes de ellos 4838 varones y 300 hembras, distribuidos de la siguiente forma:

Blancos Varones 1 727 Hembras 1 260 Extranjeros Varones 21 Hembras 7 Asiáticos cumplidos Varones 199 Asiáticos colonos Varones 574 Hembras 4 De color libres Varones 519 Hembras 529 De color cuartados Varones 3 De color esclavos Varones 836 Hembras 504 Tabla # 11: Censo de población del Partido de Palmillas de 1877

Consideramos que las cifras dadas por este censo en cuanto a la cantidad de habitantes, en lo que se refiere a hembras y varones son erróneas. Pues según la distribución de estas, las hembras suman 2304 habitantes y 3879 varones para un total de 6183 habitantes en el partido.

Culminada la guerra de los diez años el Partido de Macagua contaba con 4 631 habitantes distribuidos de la siguiente forma:

Españoles blancos 1 562 De color libertos 210 De color cuartados 3 De color extranjeros 8 De color esclavos 1 848 Asiáticos libres 113 Asiáticos colonos 379 De color libres 508 Tabla 12: Habitantes del Partido de Managua.

La población blanca representaba el 44,4% de la población del partido y la negra el 55,6%.

En 1876 la jurisdicción de Colón contaba con 15 571 esclavos, de ellos 2 035 pertenecían al partido de Palmillas, que representaba el 13,1%, mientras que 5 840 pertenecían al partido de Macagua y significaba el 37,5% de la jurisdicción.

Como en toda la isla en esta zona la fuerza de trabajo fundamental era la esclava. La región de Colón contaba con la mayor población esclava de la isla, que incluía los territorios de Macagua y Palmillas. En la medida que transcurrió en los años 1876 a 1877 apreciamos una disminución considerable del número de esclavos. Veamos el siguiente cuadro:

Partidos 1857-1858 1876 Diferencia Macagua 10 044 5 840 4 204 Palmillas 2 325 2 035 300 Tabla 13: número de esclavos entre 1857 y 1876.

Además a principios de 1878 en el cuartón de Macagua y Monte alto existieron 492 asiáticos que formaban parte de la fuerza de trabajo en el partido.

Entre las causas de la disminución del número de esclavos se destacó la guerra y la ruina de algunos ingenios, a causa del proceso de concentración y centralización de la industria azucarera.

No obstante la disminución de la cantidad de esclavos, más de la mitad de ellos se encontraban distribuidos entre ambos partidos, o sea el 50,6 % del total en la jurisdicción de Colón los cuales constituían la fuerza de trabajo fundamental en las fincas. De ellos 26 no eran esclavos, eran negros libres; trabajaban en el lugar conocido como San José de Ciegas (parte de este lugar pertenece actualmente al municipio de Colón).

En 1880 se realizó un censo de población que arrojó los siguientes resultados: Existía en el partido un total de 4.991 habitantes, la cifra nos permite apreciar el aumento de la cantidad de habitantes con relación al censo anterior. Estos habitantes se encontraban distribuidos de la siguiente forma:

Hombres blancos 1.821 Sexo masculino 1.050 Sexo femenino 771 Asiáticos 272 Hombres negros 2.898 Tabla 14: Número de habitantes en 1880.

La población negra ocupaba más de la mitad de la cantidad de habitantes del partido, representaba el 58,2 %, mientras que la blanca representaba solo el 41,9 % de la población del partido (ver gráfico #7).

La población total por sexo la componían 2967 hombres que representaban el 59,4%, mientras que las mujeres la componían 2024 para un 40,6% de la población del partido.

Gráfica #7: Población (%) por sexo y raza según censo de 1880.

El censo de 1885 nos permite conocer que se produjo un aumento de la población en el partido de Macagua si la comparamos con el último censo esta había aumentado en 609 habitantes o sea que ahora la integraban 5.600 habitantes

La población aparece señala en esta ocasión por barrios, donde observamos que la mayor parte de esta estaba concentrada en el barrio de Cuatro Esquinas. Barrio Habitantes % de la población del partido que representa Macagua 1.250 22,3 Semillero 1.030 18,4 Cuatro Esquina 2.500 44,5 Monte Alto 820 14,6 Tabla 15: Habitantes por barrios.

Otro hecho de la vida social lo constituye el del 24 de enero de 1885, donde se inscribió la primera persona en el registro civil del municipio de Macagua, perteneciente a Avelina Rodríguez Avelo, hija de Antonio Rodríguez Pérez y Candelaria Alvelo Pérez, nacida el día 4 de enero del propio año, inscripta en el tomo I y folio I.

Observemos los datos del siguiente cuadro resumen:

Año 1878 1880 1885 Habitantes 4 631 4 991 3 600 Raza Blanca Negra Blanca Negra Blanca Negra 2.054 2.577 2.093 2.898 - - % que representan del total de habitantes 44,4 56,6 41,9 58,1 - - Tabla #16: Comportamiento de las razas en los años 1878, 1880 y 1885.

Las cifras nos indican que en la mayor parte de los años hay un aumento de la población y la raza negra es dominante.

A este censo le continúa el del 31 de diciembre de 1888. Para entonces existían en la provincia de matanzas 259.578 habitantes mientras que la población del partido de Macagua estaba integrada por 5.410 habitantes que representaban el 2,1 % del total provincial.

La población de Macagua se encontraba estructurada de la siguiente forma: 2.844 eran blancos, para el 52,6 % mientras que 2.566 eran negros, representando el 47,4 % de la población del partido. (Ver gráfico).

La población blanca se encontraba distribuida en 1.218 mujeres, 1.626 hombres, mientras que 1.035 representaban a la mujer negra y 1.531 al hombre negro. Los hombres ocupaban el 58,4 % y las mujeres el 41,6 % de la población del partido.

Gráfica 8: Población por sexo y raza según censo de 1885.

En este censo se ofrecen los siguientes datos:

Varones Hembras Total Residentes presentes extranjeros 384 1 385 Residentes presentes españoles 2.676 2.214 4.890 Residentes ausentes extranjeros 1 - 1 Residentes ausentes españoles 23 8 31 Transeúntes extranjeros 3 1 4 Transeúntes españoles 94 37 131 Tabla 17: Habitantes según sexo y procedencia.

Para 1893 existían en el partido de Macagua 5.507 habitantes, se produjo un crecimiento poblacional con relación a 1887, de 97 habitantes. De ellos 2.909 eran blancos que representaban el 52,8 % y 2.598 eran negros que representaban el 47,2 % con relación a la población total del partido. La población blanca se encontraba estructurada en 1.666 hombres y 1.243 mujeres. La población negra en 1.548 hombres y 1.050 mujeres. La mujer representaba el 41,6 % y los hombres el 58,4 % de la población del partido. Estos datos se pueden apreciar en el siguiente gráfico:

Gráfica 9: Población por sexo y raza según censo de 1893.

Observemos los datos del siguiente cuadro resumen del partido de Macagua.

Año # Habit. Blancos Negros % que representan Blancos Negros 1857 14.373 3.974 10.399 27,6 72,4 1861 14.402 - - - - 1877 7.068 - - - - 1878 4.631 2.054 2.577 44,4 55,6 1880 4.991 2.093 2.898 41,9 58,1 1885 5.600 - - - - 1887 5.410 2.844 2.566 52,6 47,4 1893 5.507 2.909 2.598 52,8 47,2 Tabla 18: Comportamiento por años de la población blanca y negra.

Consideramos que estos datos deben tener errores, pues la población no puede haber aumentado de 1857 a 1861 en solo 29 personas, además estas cifras son muy altas con relación a los años posteriores.

En 1886 fue logrado el objetivo de tantos años de lucha: la abolición de la esclavitud. Se inicia entonces para el negro cubano una nueva lucha, conquistar la libertad de Cuba, la igualdad social, los deberes y derechos que tenía el cubano blanco.

Nuestra localidad contaba con una amplia masa de negros esclavos, tal cantidad era incalculable. Esta densidad condicionada por el número de ingenios incrementados desde la década del 30. Al dictarse la abolición de la esclavitud, dejaron esa detestable condición para convertirse en hombres libres, pasaron a ser trabajadores asalariados, no estaban obligados a servir como animales a sus amos. Dejaron el barracón para vivir en conucos, bohíos con sus familias. A pesar de todo ello sus vidas continuaban siendo miserables.

Después del Pacto del Zanjón, quedaron prácticamente intactas las riquezas españolas en Matanzas. El fin de la guerra en Cuba significó también la culminación de esas otras formas de esclavitud que fue la contratación China. No solo por la extinción cronológica de los contratados, sino por el espíritu de rebeldía de los culies. Después de 1883 pasaron a formar parte de la fuerza laboral asalariada, dedicándose al comercio y otras actividades económicas.

El señor Antonio Arias contribuyó con su capital a fomentar carboneras en San Pedro de Mayabón y Macagua. Un año después José Yu Ki Li Sap invadió con sus mercancías estas dos localidades y logró instalar las mejores tiendas y captar a los mejores marchantes de toda la zona.

En este período hay un desarrollo paulatino de núcleos poblacionales. Como el proceso de mercedación y después el acelerado desarrollo azucarero de esta zona, propicia el fomento de algunos poblados. También en este período, específicamente en 1886, se creó el barrio de Jacán. En el cual desde principios de siglo, con el desarrollo azucarero y la presencia de algunos ingenios se habían asentado familias que propiciaron el nacimiento de este núcleo poblacional.

Un año después, en 1887, por iguales circunstancias constituyeron el caserío de Monte Alto. En este lugar se fomento uno de los primeros ingenios de la localidad desde finales del siglo anterior.

En el caso de San Pedro de Mayabón lugar en el cual desde 1869 se había construido la estación de ferrocarril. En 1863 empezaron las comunicaciones al Comandante General de la provincia, específicamente el 20 de diciembre los señores Anorda y Petrirena destacan la necesidad de fomentar el pueblo de San Pedro de Mayabón en estas zonas se estaban formando grandes colonias de caña y en breve se establecería un batey central para la elaboración de azúcar. Esta situación atraía a un número de jornaleros que adquirían solares para construir y habitar con sus familiares. Por consiguiente se formaría un pueblo.

Estos señores habían separado una caballería de tierra para repartirlas en solares, ellos eran los dueños de los terrenos a ambos lados del paradero del ferrocarril. El 17 de mayo fueron autorizados para la construcción del poblado.

La Diputación Provincial de Matanzas les informó que debían ceder un solar que se dedicaría a la construcción de una casa particular, destinada a un ayuntamiento si en un futuro fuese necesario. Así mismo era importante reservar un terreno para construir un edificio benéfico como hospital.

Pero no es hasta el 4 de diciembre de 1894, que se pidió autorización al gobierno civil por el señor Regidor Nicasio Arias para celebrar festejos en dicho pueblo, con el objetivo de solemnizar la bendición del cementerio.

El Pueblo de San Pedro de Mayabón quedó definitivamente fundado el 16 de diciembre de 1894. Por tal razón, se efectuaron festejos y se bendijo el cementerio.

Conclusiones.

Con el desarrollo de esta breve investigación hemos podido afirmar que nuestra base demográfica es mayoritariamente de la raza negra proveniente del continente africano para servir como fuerza de trabajo en las plantaciones cañeras, en ingenios, en otras ramas de la agricultura y también en trabajos domésticos.

Ellos asumieron la construcción de sus propios barracones donde vivían en precaria situación de hacinamiento, ingenios, casas de los dueños de ingenios. Es decir, todo el movimiento urbanístico de nuestra localidad, el nacimiento de poblados de mayor o menor importancia están relacionados con el alza de la producción azucarera y la magnitud que esta alcanzó en el siglo XIX y que perdura hasta nuestros días.

Fuentes consultadas

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