Coloratura
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Coloratura. Ampliamente utilizado para designar ciertos pasajes musicales y roles operísticos en los que esta técnica ornamental desempeña un papel relevante, así como por extensión, a los cantantes que interpretan tales roles. Es la elaboración de la melodía, en concreto en la música vocal y especialmente en la operística. Aunque deriva del vocablo latino colorare que significa "colorear", la coloratura no supone ninguna práctica de "colorear" la voz, como alterar la calidad o timbre de la voz con intención expresiva. Constituye uno de los tres determinantes del bel canto, por eso debe poder realizarla cualquier tipo de voz. Si bien, normalmente se escribe para soprano y tenor, que son las que más agilidad tienen por naturaleza.
Definición
Historia
Barroco
Las coloraturas eran recursos habituales en la música barroca, donde se escribían tanto para música eclesiástica como para lucimiento de las estrellas de ópera, las primas donnas y los castrati. Las arias de lucimiento de la ópera barroca poseían una cadencia especialmente destinada a la improvisación. El ideal del cantante para compositores como Johann Sebastian Bach era el cantante con agilidad instrumental, lo que incluía la ejecución de coloraturas en toda la tesitura de la voz.
Clasicismo
En la época clásica, la coloratura deja de ser la única forma de virtuosismo vocal y coexiste con un canto más lineal y más cercano a la voz hablada. En el singspiel de Wolfgang Amadeus Mozart, la clásica aria de coloratura coexiste con formas derivadas del canto popular. Aparece en el canto de los siglos XVIII y XIX en forma de escalas, trinos, grandes saltos o material musical similar.
Romanticismo
En la ópera de Rossini, Donizetti y Bellini la coloratura es llevada al extremo en amplitud, rapidez y agilidad. Ese desarrollo fue tachado de superficial por compositores como Richard Wagner en Alemania. Sin embargo, la coloratura rossiniana es siempre una expresión de un estado de ánimo. El profesor y teórico más importante de la coloratura y del bel canto fue el barítono Manuel Patricio Rodríguez García. En 1840 y 1847, publicó en París un manual de canto en dos partes que resume las técnicas del bel canto y describe una manera de adquirir una coloratura ágil a través de repeticiones de notas. En la ópera de la segunda mitad del siglo XIX, la coloratura se hizo especialmente propia de los papeles femeninos dramáticos, como el caso de Violeta en La traviata de Verdi. Mientras tanto, el tenor de coloratura del tipo rossiniano es reemplazado por el tenor spinto, o tenore di forza, una voz muy potente, pero incapaz de movimientos ágiles. Ese desarrollo se realiza en todo el canto operístico con las obras de Richard Wagner y la ópera del verismo.

