Luis Hernández-Pinzón Álvarez
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Biografía
Luis Hernández-Pinzón y Álvarez de Vides nació el 23 de diciembre de 1816 en Moguer. Hijo de Luis Hernández-Pinzón, el menor de cinco hermanos, de su abuelo José Hernández Pinzón y Benítez, Alférez Mayor y Regidor Perpetuo de la Ciudad de Moguer, y que en 1777 obtuvo el Real Privilegio de Hidalguía y el reconocimiento oficial de ser descendiente de los descubridores de América. Este a su vez, y según algunos estudios, descendía del matrimonio entre Diego Hernández Colmenero y Catalina Pinzón, hija esta de Martín Alonso Pinzón y María Alvarez.[1]
En el transcurso del reinado de Isabel II, fue diputado a Cortes por varios distritos, y en casi todas las legislaturas,[2] siendo al final senador[3] por derecho propio al ser ascendido a Almirante.
Ejerció el cargo de presidente de la Comisión de Marina en Londres; segundo jefe del Apostadero de La Habana; vocal del Supremo de Guerra y Marina; presidente de la Junta Superior Consultiva de la Armada; presidente del Centro Técnico de la Armada; presidente del Consejo de Enganches y Redenciones, y capitán general del Departamento de Cádiz.
Cuando se celebraron en Huelva las solemnes fiestas del cuarto centenario del Descubrimiento de América, tuvo un papel relevante en la organización del mismo. Participó activamente en la organización de los actos conmemorativos, logrando la visitas de diversas personalidas a la Provincia de Huelva y que asistieran buques de muy diversos países. Fue socio fundador y presidente, de la Real Sociedad Colombina Onubense, que le homenajeó con el develado de una placa en homenaje postumo, entre las actividades celebradas en el IV Centenario.
Falleció en su pueblo natal de Moguer el 22 de febrero de 1891.
Luis Hernández-Pinzón se distinguió en cuantas acciones de guerra pudo estar presente, por su esfuerzo personal y valor rayando en la temeridad.
Pero el cargo que más ilustró su nombre fue el mando de la escuadra del Pacífico entre 1862 y 1865, donde se nos presenta como consumado hombre de mar y de guerra, rodeado de todos los prestigios que despertaba la figura de un hombre de 40 años, dotado de sus cualidades, el cual, en más de una ocasión, resolvió situaciones difíciles por el sólo imperio de su presencia. Carrera militar.
Carrera Militar
Recibió numerosas condecoraciones españolas y extranjeras, entre otras: Bandas y Placas de las Grandes Cruces de la Real y Muy Distinguida Orden de Carlos III de España, de la Real Orden Americana de Isabel la Católica, de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo y de la Orden del Mérito Naval con distintivo blanco.
El linaje de los Hernández-Pinzón tiene su origen en el matrimonio de María Álvarez y el descubridor de América Martín Alonso Pinzón, mayor de los Hermanos Pinzón; navegante y explorador de su época. Continúa, con el matrimonio de su hija Catalina Pinzón con Diego Hernández Colmenero, [4][1][5], según queda recogido en el “Libro que contiene las probanzas de la genealogía del apellido Hernández-Pinzón y entronque con Martín Alonso” de 1777, y en diversos estudios de posteriores. El linaje se perpetúa a lo largo de los siglos en sus descendientes, destacados marinos al servicio de la corona.
Cabe resaltar como personajes relevantes del Linaje al Almirante Luis Hernández-Pinzón y Álvarez, su padre Luis Hernández-Pinzón Prieto; y su abuelo José Hernández Pinzón Benítez, Alférez Mayor y Regidor Perpetuo de la Ciudad de Moguer, que obtuvo, en 1777, el Real Privilegio de Hidalguía, y el reconocimiento oficial de ser descendiente de los descubridores de América.
En 1828, cuando Washington Irving visitó a los miembros del Linaje (Luis y Juan Hernández-Pinzón Prieto), recogió en su diario las siguientes notas:
...en los casi tres siglos y medio transcurridos, poco ha cambiado en las condiciones sociales de esta familia.
De generación en generación han mantenido el mismo nivel social y buena fama entre sus vecinos, ocupando los cargos públicos de confianza y prestigio, y ejerciendo una gran influencia en el pueblo por su buen sentido y comportamiento. Qué raro es ver este ejemplo de estabilidad de fortuna en este mundo fluctuante, y qué realmente estimable es esta respetabilidad heredada, que no está basada ni en títulos ni en mayorazgos sino que está perpetuada exclusivamente por la calidad de la raza. Los más ilustres descendientes de las más altas alcurnias, nunca merecerán para mí, el mismo sincero respeto y la cordial consideración con las que he contemplado a esta firme y perdurable familia, que lleva tres siglos y medio manteniéndose exclusivamente por sus virtudes.
Bibliografía
- Novo y Colson: Historia de la guerra de España en el Pacífico. Madrid, 1882
- Pons Muzzo, Gustavo: Historia del conflicto entre Perú y España 1864-1866. Lima, 1966
- Garzón Heredia, Emilio: La guerra del Pacífico. Col. "Montemayor", Archivo Histórico Municipal; Fundación Municipal Cultura, Moguer, 1991
Fuentes
Fuente
- Artículo [Luis Hernández-Pinzón Álvarez] Disponible en " huelvapedia.wikanda.es " consultado el 30 de septiembre de 2011
