Cáncer del tallo

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Necrosis radial del limón criollo (lima mexicana)
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Limon-criollo.jpg
Es producida por el hongo Ceratocystis Fimbriata Elliot

Necrosis radial del limón criollo (lima mexicana). Es un hongo conocido como agente causal Ceratocystis Fimbriata Elliot, este agente patógeno crea peritésios superficiales que se desarrollan en una semana, que se incierta dento de la división Eumycota, la subdivisión Ascomycotina, la clase Plectomycetes.

Características

Se muestra formando bases pardas o negras y globosas con un diámetro de 136 a 265 μ.m, no están ornamentadas o presentan hifas no diferenciadas, la longitud del cuello es de 400 a 625 μ.m en la punta. Las hifas estiolares presentes son hialinas y débiles, afiladas bruscamente hacia la punta, el número de 12 y con una longitud de 28 a 46 μ.m. Las hifas son aéreas, hialinas, ramificadas, septadas, casi todos sus extremos terminan como endoconidióforos; las hifas sumergidas son similares pero oscurecidas y más entretejidas.

Las ascas no se observan, las ascósporas presentan envoltura gelatinosa que forman a menudo una bolsita en la punta de la salida oscilar; tienen forma de sombrero en su mayoría; miden de 4 a 8 y 2,5 μ.m. Los cultivos hialinos se caracterizan al principio por su apariencia algodonosa, a los 2 o 3 días comienzan a tomar un color pardo claro; finalmente son pardos oscuros. Los endoconidiósforos son pardo claros hialinos en las puntas y miden de 36 a 12 x 2,5 a 4,2 μ.m.

Este hongo penetra a través de las heridas de las plantas.

Síntomas

En árboles aparentemente sanos y vigorosos sobreviene una repentina marchitez, inicialmente en una rama mientras en el resto permanece sin síntoma alguno de la infección.

Las hojas de las ramas infectadas se abarquillan, se retuercen, permanecen fuertemente adheridas, adquieren una coloración amarilla intensa y con el tiempo se desprenden. Las cortezas de las ramas afectadas toman a su vez un ligero color bronceado. Paralelamente en el tronco del árbol afectado, se detecta exudación de goma, de color ámbar claro.

Cuando se raspa la corteza en la zona de la exudación, se detecta que esta se mantiene firme, aunque seca y porosa. Esta situación se localiza en un área reducida y bien limitada por los tejidos sanos, en los límites de estos no se produce goma exteriormente.

El descortezamiento del tronco o de las rama afectada muestra que la zona de cambium corresponde al área de exudación, se encuentra integrada, sin embargo encima y debajo de esta se mantiene su estructura, aunque con abundante producción de goma.

En zonas de exudación ocurre la necrosis de los tejidos del xilema. Dicha zona adquiere una coloración parda oscura a negra azulosa. La necrosis profundiza extraordinariamente hasta alcanzar el centro del órgano.

Cortes transvalentes en las zonas de exudación muestran necrosis radial en los tejidos del xilema, en forma de sector o cuña de color pardo oscuro o negro azuloso el cuál contrasta con los tejidos aún intactos. El vértice de este sector avanza invariablemente hacia el centro del órgano afectado. Encima y debajo de la zona del sector, según el estado de penetración de la necrosis, puede observarse como el área de esta comienza a ampliarse y se detecta que puede manifestarse de forma caprichosa. En ocasiones la necrosis se manifiesta en forma de pinceladas en el tejido los cuales contrastan con las zonas no afectadas, también pueden detectarse en la parte central del órgano; en algunos casos adquiere la apariencia de un sol con rayos cortos y, en otros, estos últimos no se observan.

Cortes longitudinales realizados en el centro del órgano afectado, muestran las zonas necróticas que abarcan gran parte de los tejidos y se evidencian en zonas de crecimientos definidas, la cual avanza en diferentes direcciones, es de color anaranjado pálido y de la cuál se desprende un color peculiar. Mientras la necrosis avanza por los tejidos del xilema la corteza permanece en perfectas condiciones excepto en las zonas de exudación de la goma. Todas las variantes en las que puede manifestarse la necrosis se encuentra la forma sucesiva en el interior del xilema.

El colapso de la planta sobrevive al producirse la completa obstrucción del tejido conductor a consecuencia de la necrosis; la cual avanza internamente sin manifestarse síntomas visibles en el área foliar del vegetal.

Importancia económica

esta enfermedad apareció en los cultivos de lima mexicana en la región de Banes, provincia de Holguín, en octubre de 1972. la aparición repentina de síntomas de marchitez en plantas aisladas o agrupadas y su muerte posterior, tales síntomas no eran conocidos en otras áreas citrícolas del país.

Control.

Las medidas que señalamos a continuación son las más efectivas: Cuarentena del área afectada Exterminio de plantas afectadas mediante el fuego Cura de plantas con gomosis desinfección del tronco de las plantas con caldo bordales prevención de las lesiones en los troncos y las ramas, así como supresión de podas en general

Fuentes

  • Ing. Elio Serrano Romero. Plagas, enfermedades y su control. Editorial Pueblo y Educación, 1989.