Centrífuga
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Funcionamiento
El principio físico en que se basa el funcionamiento de la Centrifugadora se puede ilustrar examinando el proceso de sedimentación de un puñado de arena introducido en un recipiente con agua. Al agitar la mezcla de agua y arena, la fuerza de atracción que ejerce la tierra actúa sobre los granos de arena con más intensidad que sobre las partículas de agua, porque la masa de aquellas es mayor. Los granos de arena son atraídos hacia el fondo de la vasija y cuando, después de transcurrido cierto tiempo, el sistema llega a alcanzar el estado de reposo, se pueden distinguir en ellas dos capas bien distintas, a saber, una inferior de arena y otra superior de agua que la cubre.
Este proceso de separación se puede realizar también en una Centrifugadora, un cuyo caso el efecto se acelera, al actuar sobre las partículas una fuerza centrífuga que es superior a la fuerza de atracción gravitatoria. En la Centrifugadora, la mezcla a separar se hace girar a gran velocidad en un tambor alrededor de un eje vertical. La magnitud de la fuerza centrífuga que va dirigida desde el eje de giro hacia la periferia del tambor, depende principalmente del número de revoluciones de éste último.
Los tambores son accionados generalmente por un Motor eléctrico a través de una transmisión que impulsa el árbol de accionamiento fijo al cuerpo del tambor
Tipos de Centrifugadoras
Existen varios tipos en dependencia de la aplicación que se le de y el tipo de mezcla que se desea separar.
Las centrifugadoras donde se separa mezclas líquido-sólidas utilizan un tambor desprovisto de orificios. Por la acción de la fuerza centrífuga los componentes de la mezcla a separar se depositan en capas sobre la pared del tambor. A través de dos tubos fijos, las capas se pueden ir evacuando de la centrifugadora en rotación.
Otro tipo de centrifugadora, empleada en la separación continua de emulsiones líquidas, funciona a través de una tubería de llenado, la mezcla líquida penetra ininterrumpidamente en el interior del tambor giratorio, en el que están dispuestas chapas cónicas a modo de campanas de impulso. El líquido más ligero se desliza por la cara posterior de las campanas hacia arriba y se evacúa allí; el más pesado va a parar al fondo del tambor y debido a la forma también cónica de éste, asciende luego por él y es evacuado asimismo por arriba.
En las centrifugadoras que trabajan según el principio de filtrado, el tambor está provisto de orificios y eventualmente recubierto de un paño filtrante. Con ella se consigue que durante el proceso de centrifugación, las partículas sólidas queden retenidas en la cara interna del tambor, mientras que el líquido areaviesa la capa de partículas y es expulsado al exterior (como en las secadoras de ropa) y, finalmente, evacuado del depósito
Fuente
- Cómo funcionan las cosas. Editorial Científico-Técnica. La Habana, 1980.
