Cobra filipina

Cobra filipina
Información sobre la plantilla
260px
Es una especie endémica, que habita en zonas de gran vegetación como las junglas y bosques de la Filipinas
Taxonomía
Nombre científicoNaja philippinensis
Reino:Animalia
Filo:Chordata
Clase:Reptilia
Orden:Squamata
Familia:Elapidae
Hábitat:Habita en la jungla densa y en campos abiertos

Cobra filipina (Naja philippinensis). Es una especie endémica, que habita en zonas de gran vegetación como las junglas y bosques de la Filipinas, su aspecto es muy similar al de las otras cobras y su veneno es altamente mortífero, causando gran daño al morder, en especial al sistema nervioso de la victima; pero el veneno paradójicamente es algo vital para la subsistencia de esta especie, cumpliendo una doble función, por un lado con él se defiende del peligro que le asecha y por el otro con la mordedura logra dejar indefensos los animales que caza para su alimentación.


Hallazgo y distribución

La serpiente fue descrita por primera vez por el herpetólogo norteamericano, Edward Harrison Taylor, en el año 1922, y es endémica de Filipinas encontrándose en las islas de Luzón, Mindoro, Catanduanes y Masbate y aunque pendiente de verificación podría haber ejemplares en las islas Calamianes y en la isla de Palawan.

Hábitat y características

Se trata de una especie de serpiente venenosa y de comportamiento agresivo que habita en la jungla densa y en campos abiertos; es una cobra que puede llegar a medir hasta 2 metros y que se alimenta de ranas, lagartijas, pájaros y pequeños mamíferos. Miden entre un metro con veinticinco centímetros y dos metros con cincuenta centímetros de longitud.

En el dorso de la capucha muestra, en algunas especies, diferentes dibujos coloreados en forma de anteojos o monóculos. La coloración dorsal es variable y la ventral muy peculiar debido a la ubicación de ciertas bandas.

La cabeza no se distingue del cuello. Ojos de pupila redonda. El maxilar llega más allá del hueso palatino, con un par de dientes venenosos. Dentro del género hay algunas especies que pueden escupir el veneno gracias a un surco en los colmillos.

Son animales sumamente peligrosos, tanto por su irritabilidad como por su potentísimo veneno del tipo neurotóxico y proteolítico, es decir un veneno mixto. Antes de atacar a sus oponentes, elevan el cuarto o el tercio anterior del cuerpo y exhiben la región ventral. Al propio tiempo, separan las costillas, lo cual distiende la piel del cuello que les confiere su apariencia característica. La cabeza se ubica horizontalmente al enemigo. Algunas especies no despliegan su cuello y pueden ser confundidas por culebras debido a que poseen sobre la cabeza placas o escudos y tienen pupila circular. Al ser tocados muerden fulminantemente y si se irritan, llegan a morder en repetidas ocasiones. Generalmente huyen del peligro, pero son capaz de afrontarlo aunque su oponente sea mayor. Las mordeduras son mortales sin la administración rápida de antiveneno. Algunas especies y subespecies; "Naja-naja-sputatrix", "Naja-nigricollis", "Naja-mossambica" y a veces también "Naja-naja-naja" esputan su veneno y el rocío llega a varios metros, alcanzando a su atacante.

Casi todas las especies son de hábitos nocturnos y crepusculares. Todas las especies son ovovivíparas. La hembra pone entre ocho y quince huevos. La incubación dura entre catorce a veintiún días.

Habitan desde las zonas periféricas de los bosques tropicales lluviosos hasta las estepas de matas y de espinas. Frecuentemente se encuentran cerca del agua. Son muy voraces y se alimentan de vertebrados pequeños, mamíferos, anfibios y serpientes. En la India y en la mitología Egipcia, varias especies de este género tienen gran importancia para sus creencias religiosas.

Se distribuyen en el Continente Africano, Asiático y en el archipiélago Indoaustraliano. Consta de veintitres especies, la taxonomía de algunas está en duda.

Fuente