Vulneraria (Anthillis vulneraria)

Vulneraria (Anthillis vulneraria)
Información sobre la plantilla
Vulneraria.jpeg
Nombre científico:Anthillis vulneraria
Taxonomía
Reino:Plantae
División:Magnoliophyta
Clase:Magnoliopsida
Orden:Fabales
Familia:Fabaceae
Subfamilia:Faboideae

Vulneraria. Planta medicinal perenne que posee valiosos usos como cicatrizante, vulnerario y astringente.

Otros Nombres

  • Quisante silvestre
  • Trebol de las arenas
  • hierba de la cuchillada
  • pie de gallo encarnado
  • pitiflor blanca
  • uña de gato
  • vulneraria

Descripción

La vulneraria es una planta perenne, nativa de Europa perteneciente a la familia de las leguminosas.

Es una hierba pequeña, de 50 a 40 cm de alto, el tallo es simple o más a menudo ramificado cubierta de arriba abajo por un fino vello; tiene una raíz penetrante que se continúa por un tallo erguido del cual salen hojas alternas y pinnadas; las inferiores con folíolos desiguales ovados a elípticos; las superiores con folíolos lineal-oblongos iguales, casi iguales o desiguales.

Las flores se agrupan en cabezuelas y son de un característico color amarillo pero también pueden ser crema, rosas o anaranjadas, de hasta 4 cm de diámetro, con 2 brácteas muy divididas bajo las cabezuelas normalmente pareadas. Pétalos 12-15 mm; cáliz hinchado y constreñido en el ápice, con 5 dientes desiguales. El fruto es una pqueña vaina ovoide, reticulada.

Localización

Está presente en gran parte de Europa y África del Norte. Prefiere las praderas secas y zonas rocosas en el suelo, preferiblemente de piedra caliza, de hasta 3000 m sobre el nivel del mar.

La planta también se cría en toda la Península, tanto en litoral como en montaña. Es fácil verla en prados, laderas pedregosas y collados secos. Es una especie con numerosas variedades, más de 20 subespecies identificadas, todas con una morfología muy similar.

Floración

Florecen en la primavera aunque en algunas zonas se retrasa la floración hasta junio, sobre todo en zonas de montaña.

Partes empleadas

Para fines medicinales interesan las partes aéreas, en especial las cabezuelas.

Recolección y almacenamiento

La recolección se realiza a mano, a principios de la floración; se recogen las cabezuelas, sin pedúnculo, despreciando las que estén marchitas. Una vez secas, se guardan en frascos o bolsas herméticas ya que la humedad las echa a perder.

Composición química

En su composición quí­mica, aparecen taninos y saponinas, así­ como mucí­lagos y flavonoides.

Aplicación

La planta resulta muy eficaz en la curación de llagas y heridas. También es una hierba que popularmente se ha utilizado como depurativo y antiemético y tiene asimismo un ligero efecto laxante. También se han extraí­do dos pigmentos de las flores, uno azul y otro rojo. Antiguamente, la vulneraria se consumí­a en determinadas zonas como sucedáneo del café; para ello se mezclaba con hojas de frambuesa y flores de endrino. Aunque carece de propiedades estimulantes, este sucedáneo no deja de tener un excelente aroma, además de ser depurativo. Además de favorecer la cicatrización tiene importantes propiedades refrescantes. Asimismo, la infusión de vulneraria puede ser útil en eczemas, furúnculos, afecciones de la cavidad bucal y cualquier tipo de heridas molestas. El extracto etanólico se ha demostrado activo frente a poliovirus y herpes virus2 inhibiendo su actividad.

Preparación y administración

  • Infusión de uso interno.Tres cucharadas más o menos grandes por cada 250 ml. de agua; se deja reposar durante 15-20 minutos, se endulza a capricho y se bebe en pequeñas tacitas a lo largo del día.

Esta infusión estimula el organismo. Si se toma nada más preparada, puede tener un cierto efecto laxante.

  • Infusión para lavados.Constituye el uso principal de la planta.

Para prepararla se recogen 3 ó 4 puñados de la planta y se añaden a un litro de agua hirviendo. Esta infusión, una vez templada, se embebe en algodón o compresas y se aplica localmente sobre llagas y heridas varias veces al día.

Observación

No es una planta tóxica, o por lo menos no parece haber producido ninguna intoxicación, pero siempre hay que ser prudentes a la hora de emplear cualquier remedio y, si es posible, dejar la preparación de las fórmulas en manos de personal especializado.

Fuentes