Andrés Arcay Barreda

Andrés Arcay Barreda

Andrés René Arcay Barreda

Primeros años

Era el más pequeño de los hijos de un matrimonio humilde: Tomás Arcay Ruiz, su padre, que nació en Cienfuegos y era mecánico; Elena Barreda Vargas, ama de casa y dedicada a la crianza de sus hijos: Roberto, Josefina y René.

Andrés nació el 30 de noviembre de 1931, en Ciudad de la Habana. A la edad de 1 año se traslada con su familia a la ciudad de Cienfuegos, donde permaneció 11 años.

Sus primeros estudios los realizó en una escuela pública y posteriormente asistió a una escuela privada. Era cariñoso con sus padres, comunicativo e inquieto, le gustaba la natación, fue buzo y practicaba la pesca submarina, que era su deporte favorito.

Después se traslada a Puentes Grandes, en la calle Pnat y Godinez, apto. No. 2 altos, La Ceiba, Marianao, donde existió a una Academia, siendo uno de sus profesores el Sr. Marrreo, llegando a cursar hasta el primer año de Pre Universitario.

Ya un joven, se traslada a vivir a Mariel, residiendo en la calle San José No. 39.

Su padre trabajaba de tornero a la Fábrica de Cemento "El Morro", ingresó en la misma el 24 de julio de 1941, estando trabajando en la misma hasta el 23 de octubre de 1953, donde fallece por enfermedad en la Habana.

Una año antes de la muerte del aadre, o sea, el 12 de enero de 1952 a los 21 años, empieza René a trabajar en la fábrica, siendo su número de chapa el 604, jornalero y ayudante de construcción.

Integración a la lucha

Con el transcurso de los años se fue reflejando en René, el desprecio a la politiquería existente en el país, en aquellos tiempos. El día 4 de septiembre de 1957 se inició en el movimiento 26 de julio, saliendo ese día para la capital con varios compañeros para practicar en el levantamiento del 5 de septiembre. Permanecieron acuartelados en espera de la orden para la acción y a las diez de la mañana les comunicaron que todo se había suspendido. Arcay se regresó al Mariel y fue detenido, pero como no se le pudo probar nada, fue puesto en libertad. Desde entonces no hubo para René otro interés que no fuera la libertad de su patria, entregándose por entero a la lucha y organizando un grupo de acciones entre los compañeros más valiosos, con los cuales llevó a cabo innumerables actos de sabotajes en todo el territorio de Mariel. No solo era el primero en todas esas acciones sino que fue el quien fabricó la mayoría de las bombas que se hicieron en las mismas, por lo que fue felicitado por los jefes provinciales, dada la perfección y eficiencia con que esas acciones se llevaban a cabo. El día 22 de mayo de 1953, Arcay lo tenia todo preparado para tomar la base Naval de Mariel, en combinación con varios marinos miembros del movimiento, este hecho tenía el propósito de apoderarse de las armas de la base llevarlas a la cordillera de los Órganos, donde ya se encontraba peleando un grupo de compañeros de la provincia.

En espera de nuevas oportunidades les sorprendió el llamado de la huelga del 9 de Abril, obedeciendo las órdenes recibidas. René preparo el día 8 a los comandos para la huelga del día siguiente y esa noche, en su casa, preparó una potente bomba con la cual pretendía paralizar la Fábrica de cemento "El Morro", la bomba debía explotar a las 11 de la mañana del día 9.

Muerte

A las 6 de la mañana de ese día 9; cuando revisaba el funcionamiento de dicha bomba, hubo de hacerlo explotar, causándole la muerte instantáneamente. La perdida de este valiente no amilanó a sus compañeros, que se lanzaron a las calles a las 11 de la mañana y desarmaron a los soldados que cuidaban la portada de la fabrica, le quitaron una pieza a la turbina, rompieron la bomba de petróleo, quedando paralizada no solo la fábrica sino también la Terminal Marítima, ya que fueron desmantelados todo los aparatos que allí funcionaban, Mariel quedó paralizado, la huelga era completa, a las 2 de la tarde pelotones de marinos y soldados hicieron su entrada en el pueblo y los revolucionarios se dieron cuenta que había fracasado la huelga unos fueron detenidos, otros se internaron en el monte, siendo acorralados por los esbirros, así una veintena de ellos fueron a parar a la Isla de Pinos y Mariel Cumplió con René Arcay, que había muerto a los 26 años, aunque su preciosa sangre no se derramó en vano, ya que abonó los surcos de la revolución.

Fuente

• Artículos recopilados del Sitio Web “Mariel en su Historia” elaborado en el Joven Club de Computación y Eléctrónica Mariel 1. Realizado con la colaboración de nuestro querido Historiador del municipio: Juan Antonio Pérez Rivero.