Matanzas (equipo de béisbol)
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Equipo de B�isbol de Matanzas, conocido por Yumurino o como popularmente se le nombra en los medios de difusión “los cocodrilos de Matanzas” ha participado en series nacionales con diferentes equipos desde el año 1962 hasta el 1969 como: Occidentales, Matanzas, Henequeneros, Citricultores y en una ocasión que participó con Centrales; y de ahí en lo adelante se le dio el nombre de la selección actual.
Historia
Los resultados del equipo representativo de la provincia distan mucho de la rica historia legada por varias generaciones de peloteros Matanceros, a partir de Martín Dihígo LLano, El Inmortal, sin discusión el mejor jugador cubano de cualquier época. La de Matanzas es considerada una de las cunas del máximo pasa tiempo en el país, contada desde el 27 de diciembre de 1874 fecha exacta del primer enfrentamiento, celebrado en el terreno del Palmar de Junco.
Bajo las denominaciones de Henequeneros, Citricultores y Matanzas, las diversas selecciones durante largos años siempre recibiendo el reconocimiento unánime de los parciales en casa y fuera de ella, por la calidad de sus jugadores y la absoluta entrega en busca de la victoria.
Infinidad de nombres completarían páginas gloriosas en la historia de los torneos nacionales, luego del debut de Henequeneros (tercer lugar 1965-1966). Fueron conocidos los nombres de Lino Betancourt, líder de los jonrones (9) e impulsadas (45),Félix Isasi en anotadas (44) y bases robadas (24) y Ángel Gaspar Pérez, conocido como el Curro, máximo ganador en juegos lanzado (11), tal vez los mejores momentos surgieron para los matanceros en 1968, cuando tres hombres, Wilfredo Sánchez, Rigoberto Rosique y Félix Isasi acapararon titulares en las páginas deportivas de los diarios, hasta el punto de recibir el calificativo de los tres mosqueteros, por parte del colega Bobby Salamanca. Wilfredo, también bautizado como el hombre hit, acumuló un total de 6 campeonatos de bateo, Rosique e Isasi no eran segundo de nadie con el madero en las manos.
La afición matancera aplaudió hasta el delirio el aporte de esos tres hijos y el tirador Gaspar Pérez en la XVII Serie Mundial, cuyo escenario fuera el Parque de Quisqueya en Santo Domingo, República Dominicana, donde Cuba finalizo invicta (10-0), tras imponerse (2x1) en histórico desafío a Estados Unidos en la fecha del cierre. Como si la gloria internacional no bastara, en el certamen de casa (1969-1970), Henequeneros salió triunfante (50-16) y Wilfredo Sánchez hizo cuanto quiso en el capitulo ofensivo al acumular 4 lideratos: bateo (351-98-279), hit (98), anotadas (46) y bases robadas (34).Al contrario de la buena cosecha de Henequeneros, el conjunto de Matanzas ha mantenido un rol secundario, siempre a la zaga de los coterráneos, hasta llegar a ocupar la ultima posición de la tabla, Matanzas como tal volvió al ruedo en la contienda 1992-1993, pero nunca ha podido mejorar la quinta plaza alcanzada en la ediciones 35 y 36.
Uniforme
Fuentes
- Con las bases llenas, Ealo de la Herrán Juan.
- Beisbol historia y revolución López Félix Julio.
