El principe feliz
| ||||||
En El principe feliz.Lord Murchison, el protagonista, se enamora de una dama que parece ser la típica mujer fatal. La amada se envuelve a sí misma en un halo de misterio, pidiendo citas discretas y cartas subrepticias; el amante la ve introducirse en unas habitaciones alquiladas, un domicilio clandestino situado en un callejón, e interpretando todo esto como los convencionales signos de una cita secreta, exige una confesión de infidelidad. La amada protesta humildemente su inocencia; pero el amante, convencido del engaño, frenéticamente la denuncia. Sin embargo, nada es lo que parece.
Sobre el cuento
La estatua de un príncipe, la han colocado en una columna en pleno centro de la ciudad. La estatua estaba recubierta de finas láminas de oro, como ojos tenia dos zafiros y en la empuñadura de su estatua un rubí. Todo el mundo admiraba a la bella estatua.
Una golondrina enamorada de un junco se quedó cuando sus amigas se fueron en otoño, pero al ver que su amado no hacia mas que filtrear con la brisa lo dejó, y dispuesta a irse el día siguiente fue a buscar un sitio donde pasar la noche y vio la estatua del príncipe cuando se dispuso a dormir a los pies de la estatua le cayo una gota y pensó -para que sirve una estatua si no me protege de la lluvia. Pero al mirar hacia arriba vio que el príncipe estaba llorando, le preguntó como se llamaba, y el príncipe le respondió- Soy el Príncipe Feliz, acto seguido la golondrina le preguntó que si era el príncipe feliz porque lloraba y el respondió porque mientras estaba vivo, vivía en el palacio de la despreocupación pero ahora que esta muerto le han puesto ay y podía ver toda la miseria y fealdad de su pueblo. Y el príncipe le pidió un favor ala golondrina le dijo que le llevase el rubí de su empuñadura, a una pobre costurera que tiene un hijo enfermo y su hijo le pide naranjas y ella llora porque solamente le puede dar agua del rio, porque no tiene dinero, después de pedírselo y suplicárselo la golondrina accedió y le llevó el rubí a la costurera.
Al día siguiente el príncipe le pidió por favor que le llevase uno de sus ojos que eran zafiros y se lo llevase a un estudiante que tenia que hacer una obra para el director de teatro y no la podía seguir porque el hambre le había debilitado mucho, y la golondrina se lo llevó.
Al otro día le pidió que le llevase su otro ojo a una niña que vendía cerillas y se le habían caído por el desagüe y si no llevaba nada a casa su padre le pegaría y la golondrina repuso que si le llevaba su otro ojo el se quedaría ciego pero el príncipe le convenció y lo dejo caer en el cesto de la niña la cual dijo anda que cristal más bonito y se lo llevó a su padre.
Y la golondrina cuando volvió le dijo que se quedaría con el para siempre y el le dijo que diese una vuelta por todo el pueblo y le contase lo que había visto, ella le contó que había unos niños que no tenían casa y los echaban de todos los sitios, y el le dijo que le arrancase una a una las láminas de oro y se las entregase a sus pobres, y la golondrina aceptó cuando volvió le dijo que ya se podía ir a Egipto peor ella le dijo que no se iría ay si no que se iba a morir y le preguntó si le podía besar la mano y le dijo que el a ella la amaba y ella le besó después de eso murió y dentro del príncipe sonó un sonido muy extraño, su corazón se había roto en dos.
Ese mismo día por la mañana el concejal pasó por allí y lo vio y dijo que debían fundirla ya que estaba muy feo porque parecía un mendigo y dijo que la próxima estatua que hiciesen seria de su persona, para sorpresa del que estaba fundiendo la estatua el corazón de plomo no había forma de fundirlo y el concejal dijo que lo tirasen y lo tiraron junto con la golondrina, dios le dijo a uno de sus ángeles que le llevase la cosa mas valiosa de ese pueblo y le llevó el corazón de plomo y la golondrina y Dios le dijo que había hecho lo correcto.
Personajes
- El Principe Feliz.
- Golondrina.
- Consejal.
Sobre el autor
Oscar Fingal O`Flahertie Wills Wilde, novelista, poeta, crítico literario y autor teatral de origen irlandés, gran exponente del esteticismo cuya principal característica era la defensa del arte por el arte, nació en Dublín, capital de Irlanda.Hijo del cirujano William Wills-Wilde y de la escritora Joana Elgee, exitosos intelectuales de Dublín.
Oscar Wilde tuvo una infancia tranquila y sin sobresaltos. Mostró su inteligencia desde edad temprana al adquirir fluidez en el francés y el alemán. Estudió en la Portora Royal School de Euniskillen, en el Trinity College de Dublín y, posteriormente, en el Magdalen College de Oxford, centro en el que permaneció entre 1874 y 1878 y en el cual recibió el Premio Newdigate de poesía, que gozaba de gran prestigio en la época.
Wilde fue un personaje excéntrico y transgresor, en medio de una sociedad victoriana, caracterizada por su mentalidad puritana, encabezada por una burguesía fuerte en los ámbitos político y económico– incapaz de comprenderlo. Sus palabras hablaban de amor, de belleza y de muerte, elementos que están presentes en cualquier vida pero que pocos se atreven a definir.


