Juan Ignacio Ramón
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Juan Ignacio Ramón. Vino al mundo en la Villa de la Punta de Lampazos (hoy Lampazos de Naranjo), en el Nuevo Reino de León, aunque la fecha de su nacimiento es incierta, ya que algunas fuentes lo ubican en el año de 1746 y otras en 1753. Descendiente de españoles, inició su carrera militar en la Compañía Presidial de la Bavia, siendo ascendido a sargento en 1779, y cuatro años después se le confirió el grado de alférez de la Compañía de Saltillo en 1783.
Biografía
El 2 de junio del año siguiente fue ascendido a teniente de la Compañía Volante de Caballería de Lampazos, participando en seis campañas generales contra los indios bárbaros, siendo herido en tres ocasiones. Su hoja de servicios señala en 1792 sus principales atributos: “Valor: acreditado; aplicación: conocida; capacidad: regular; conducta: buena; y desempeña con esmero los asuntos que se ponen a su cuidado”. Fue en este año que le fue encomendado al teniente Ramón la comandancia de la Compañía de Lampazos, y en las postrimerías del siglo XVIII (1797) figuró como comandante y teniente de gobernador subdelegado de la Punta de Lampazos, real de la Iguana y su jurisdicción, nombrado por el gobernador del Nuevo Reino de León Simón de Herrera y Leyva. En los albores del siglo XIX Ramón era capitán graduado de la Segunda Compañía Veterana y teniente de gobernador subdelegado de Lampazos. Al sobrevenir el movimiento de Independencia en 1810, el capitán Juan Ignacio Ramón fue llamado por el gobernador Manuel de Santa María, y alistó una parte de la Compañía Veterana para salir a incorporarse a las tropas del general Félix María Calleja en San Luis Potosí, pero habiéndose anticipado en la salida las fuerzas de Pedro de Herrera y Leyva, Juan Ignacio Ramón permaneció en Monterrey como segundo comandante de éste. Llegó a sustituir en algunas ausencias al gobernador Manuel de Santa María. Cuando recibió la noticia, el 15 de noviembre de 1810, de que los insurgentes se habían apoderado de San Luis Potosí, Juan Ignacio Ramón convocó al ayuntamiento, acordándose llamar al gobernador Santa María, al igual que se acordó pedir ayuda económica al cabildo eclesiástico y defender las bocas del Pilón y de Santa Rosa. Para esta tarea se nombró a Domingo Narciso de Allende, pero al llegar el gobernador Santa María éste revocó el nombramiento y se lo dio a Juan Ignacio Ramón, quien marchó al sur del Nuevo Reino de León, donde mantuvo contacto con el jefe insurgente José Mariano Jiménez, quien logró convencer tanto a Ramón como al gobernador Santa María para que se incorporaran al movimiento de independencia. Es posible que Ramón haya participado en la Batalla de Aguanueva, en Coahuila, el 7 de enero de 1811, a las órdenes de Mariano Jiménez, logrando una victoria para los insurgentes; al entrar Jiménez a Monterrey el 26 de enero, autorizó a Ramón para continuar como segundo en jefe, siéndole otorgado el grado de brigadier.
Muerte
Cuando las tropas de Hidalgo, Allende y Aldama se dirigían hacia el norte para reabastecerse, Jiménez, Ramón y Santa María se les unieron, y en el camino hacia Monclova todos fueron aprehendidos, enviados a Monclova y de ahí a Chihuahua, siendo todos sentenciados a muerte. Juan Ignacio Ramón fue fusilado el 26 de junio de 1811, el mismo día que Allende, Aldama, Jiménez y Santa María. Ese mismo año la Junta Gobernadora del Nuevo Reino de León confiscó y remató sus bienes. En su honor, el 5 de septiembre de 1915 se erigió la villa (hoy municipio) de Los Ramones, en su honor y el de su hermano el sacerdote Buenaventura Ramón.
