La Campaña de Alfabetización en el municipio Colombia

Transformaciones de la Educación y la Campaña de Alfabetización en el Municipio Colombia.
Localidad de Cuba
Entidad	Localidad
• País	Cuba
•	Provincia Las Tunas
•	Municipio Colombia
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Transformaciones de la Educación y Campaña de Alfabetización

Transformaciones de la Educación

El desolador panorama que en materia educacional mostraba Cuba hasta enero de 1959 hizo que esta esfera fuera objeto de las primeras medidas adoptadas por la Revolución para dar cumplimiento al Proceso del Moncada. A penas, a 80 millones de pesos ascendió el presupuesto del Estado para el Ministerio de la Educación en 1958, mientras existía un millón de analfabetos y una cifra superior de semianalfabetos, 600 000 niños no tenía escuelas, y alrededor de 10 000 maestros estaban pre - empleados. En el primer año de la Revolución fueron convertidos en escuelas 69 instalaciones militares, al tiempo que se declaró el carácter gratuito y democrático de la enseñanza y esta llegó a los más apartados rincones. El 6 de junio de 1961, con la ley de Nacionalización de la enseñanza privada y religiosa, escuelas como la Academia Regil pasan a manos del pueblo, eliminándose la inseguridad de obtener una plaza y los bajos salarios de los maestros populares que ascendieron a $ 65.00, pues antes de aplicada esta medida, maestras como Gladis Roja, solo ganaban $15.00 mensualmente. La enseñanza se convierte en derecho del pueblo al comenzar a ser obligatoria y gratuita para todos los niños cubanos. El sistema de becas que hasta entonces había sido un beneficio de las clases adineradas pasa al servicio de las masas populares. La Academia Regil al ser nacionalizada adoptó el nombre de Centro escolar Camilo Cienfuegos, más tarde la escuela René Lavalette, se denominó Luis de la Puente Uceda y la Miguel J. Amézaga comenzó a llamarse Luis Augusto Turcios Lima. Fueron construidas otras escuelas como el actual centro escolar José Martí, al cual se le anexaron las aulas ubicadas al frente del parque del reparto santa Lucía (antigua escuela que llevaba el mismo nombre), la escuela Cándido González y la Lorenzo Bermúdez, la escuela Marcelo Salado surge en locales improvisados hasta contar con instalaciones modernas en la actualidad. Se creó la escuela Granma con edificio de mampostería, la vivienda del administrador del central (antes del triunfo revolucionario) se convirtió en PRE EIDE, contribuyendo a la formación de futuros deportistas de la localidad. En el primer lustro de la década del 60 se estableció una escuela secundaria básica en la tienda “El Cañón Alemán”, estuvo funcionando dos años aproximadamente. Se construyeron escuelas en áreas rurales incluyendo los lugares más apartados como santa Rosalía, Monte de La Federal entre otros de tal manera que el 100% de los niños con edad escolar reciben la luz de la enseñanza. A raíz de la nacionalización de la enseñanza se iniciaron los cursos de superación para maestros populares, en Camaguey, produciéndose la primera graduación en 1966, en la que estuvieron presentes siete maestro de la localidad, entre los cuales estaban Miriam Colino, Gladis Rojo, Ofelia Zequeira e Idel Castañeda. Al culminar la Campaña de Alfabetización continuó desarrollándose la superación para adultos, en 1962 se constituyó un aula de seguimiento con 18 alumnos como matrícula, atendidos por la maestra Gladis Rojo. Luego se crea la Educación Obrera Campesina (EOC), abriéndose numerosas escuelas en la zona urbana y rural. El asesoramiento de los maestros era encabezado por Dora Sánchez y Gladis Rojo, quienes en horas nocturnas visitaban a los mismos y los sábados en la escuela Granma, donde se daban los seminarios brindaban las orientaciones a los educadores. En 1962 en el local que ocupaba la escuela Luis Augusto Turcios Lima funcionaba la escuela Mariana Grajales donde se llevaba el curso nocturno obrero para alumnos con nivel de Secundaria Básica. Magali Marín, Ana Sancho, Daisy Álvarez y Lidia Balmaceda, eran algunas de las maestras de la misma. En la etapa de 1961-1966 se le brindó un gran impulso a la educación en la localidad, elevándose progresivamente el nivel de escolaridad, elevándose progresivamente el nivel de escolaridad de la población.

La Campaña de alfabetización. Significado Socio – Cultural.

Con el advenimiento del Año de la Educación, el 1ro de enero del Departamento Municipal de educación de Guáimaro funcionaba la oficina principal de alfabetización dirigida por Manolo Porto y Virginia Varona, allí se recibían los alfabetizadotes que llegaban a La Habana y eran ubicados para las escuelas rurales. En el barrio Elia, en el local que hoy ocupa la subdirección de administración de Educación funcionaba la oficina de alfabetización, actividad por Lidia Balmaceda quien contó con la colaboración de Dolores Montero. Los primeros alfabetizadotes que llegaron a la localidad fueron las brigadas Conrado Benítez compuesta por estudiantes y los Patria o Muerte que eran trabajadores. Los maestros los recibían en las escuelas y tenían que asesorar su trabajo, velar por su disciplina y hacerle llegar los pocos materiales que contaban, lápices y libretas. Mientras que Lidia Balmaceda y Dolores Montero (Lolita) supervisaban el trabajo y decepcionaban, computaban y enviaban las informaciones a Guáimaro. Cira de la Cruz , Gladis Rojo, Manuela y Ángel José Lana son algunos maestros que participaron en la campaña de alfabetización mientras que a la brigada Conrado Benítez compuesta por estudiantes (niños y adolescentes) pertenecían Alfredo García Mata, Elena Garcés, Isbelo Aldano Ruiz (fallecido), Josefina Varela Suárez y Patricia Jiménez Conesa entre otros. Las ORI cooperaron grandemente en el desarrollo de la campaña, en la distribución y alojamiento de los alfabetizadores, destacándose el viejo militante comunista Carlos Aldana Espinosa. Éstos eran ubicados en las casas de los campesinos que se brindan a darle albergue y alimentos, de lo poco que ellos tenían se lo con alegría porque sabían que iban a lograr algo deseado, aprender a leer y a escribir. Hubo algunos que se alojaron en casa de los maestros porque tenían problemas de salud. Los muebles de las escuelas eran en muchos casos tablas apoyadas en piedras y en estaquitas, formando la mesa de escribir. Los maestros al igual que los jóvenes educadores no contaban con pizarras sino las que llevaban y tenían a su cargo adultos a los cuales alfabetizaban. Una vez a la semana los técnicos municipales y los maestros visitaban a los alfabetizadores en las casas de los campesinos.

Maestros y alfabetizadores eran amenazados por la contrarrevolución.

El objetivo de que desistieran de la actividad y hacer fracasar la campaña de alfabetización, sin embargo ellos continuaron la obra y el 7 de diciembre de 1961, el barrio de Elia era declarado libre de analfabetos. El 22 de diciembre en acto celebrado en la Plaza de la revolución, donde participaban dirigentes, alfabetizadores y maestros entre los cuales estaba Lidia Balmaceda como representante de Elia, Fidel Castro hizo uso de la palabra proclamando a Cuba, libre de analfabetismo. Al pedirle la opinión a Lidia sobre la campaña de alfabetización nos expresó: “Fue una de la tareas más lindas de la Revolución ya que con gran amor se llevó a la luz de la enseñanza a todo el país, lográndose en breve tiempo sacar del analfabetismo a muchos ciudadanos, que también acogieron la tarea con mucho entusiasmo hasta poder hacerles las cartas a Fidel, la campaña demostró la fuerza de la Revolución, a pesar de que empezaba y la misma fue la base del gran desarrollo alcanzado en la formación de científicos para el bien de la humanidad”.

Fuentes

• Historiadores del municipio Colombia. Investigación de la historia del municipio.
• Organizaciones políticas y de masas de municipio.
• Museo Municipal.
• Poder Popular del Municipio.
• Alfabetizadores.
• Educación Municipal.