El Eco de Villaclara
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El Eco de Villa Clara fue el primer periódico realizado en Santa Clara (ciudad de Cuba). Se emitió por 25 años. En sus páginas publicaron grandes figuras de la intelectualidad local y nacional. En este último caso, se encuentran, por ejemplo: Juan Cristóbal Nápoles Fajardo (El Cucalambé), Rafael María de Mendive y Gabriel de la Concepción Valdés (Plácido).
Surgimiento
Cuba contaba con imprenta desde 1720 y desde entonces se hicieron varios intentos para traer a Santa Clara el invento de Johannes Gutenberg, entre los que se destacan la gestión realizada por Pedro Nolasco Bolaño en 1819. Estos esfuerzos nunca se materializaron al no lograr la concesión de los permisos requeridos para ellos por parte del gobierno español[1]. Una Real Cédula del 20 de noviembre de 1777, disponía que en Cuba no existiera imprenta fuera de la Capitanía General en La Habana[2].
La primera imprenta que tuvo Santa Clara fue traída en 1831 por el camagüeyano Manuel de Sed y Colón, a lomo de mulos y en un agobiante viaje que duró cuarenta días. Teniendo como residencia la casa ubicada en la calle San Cristóbal No, 28 (actual Eduardo Machado)[3]. De esta imprenta nace la primera publicación seriada que tuvo la villa, el periódico “El Eco de Villaclara”, cuyo primer ejemplar sale a la luz el 3 de diciembre de 1831[4].
Frecuencia y contenidos
Este periódico en sus inicios se publicaba dos veces a la semana, los miércoles y sábados, con cuatro planas; pero a partir del 1ro de febrero de 1834 empezó a tener tres tiradas semanales, los martes, jueves y sábados[5]. Su suscripción costaba un peso mensual[6]. En sus páginas predominaron noticias oficiales, copia de artículos de periódicos de La Habana y Madrid, avisos, partes oficiales, carteleras, clasificados y anuncios de lotería. Este tipo de contenidos alternaba también con producción literaria y ensayos de una naciente intelectualidad cubana de la primera mitad del siglo XIX[7].
Colaboradores
En el Eco se destacaron colaboradores de la localidad como el historiador Manuel Dionisio González, el poeta Eligio Capiró, el presbítero José Dionisio Veitía, el improvisador Francisco Poveda y Armenteros. Además de estos nombres, resaltan grandes figuras de la literatura y la intelectualidad nacional como Juan Cristóbal Nápoles Fajardo (El Cucalambé), Rafael María de Mendive y Gabriel de la Concepción Valdés (Plácido).
Cierre
La existencia del Eco duro por veinticinco años, dejando de publicarse el 1ro de agosto de 1856.
Referencias
- ↑ Dionisio González, Manuel (1858): Memoria Histórica de la Villa de Santa Clara y su Jurisdicción. Imprenta del Siglo, Santa Clara, pp 258-259.
- ↑ Aguilera Rivas, Mailén (2008): Prensa en Santa Clara (1831-1898). Una historia de rebeldía infinita. Revista Islas, 50(156), UCLV, Santa Clara, pp. 149-156.
- ↑ Berenguer y Sed, Antonio (1933): Tradiciones Villaclareñas. Segundo Tomo. Imprenta y papelería de Rambla, Bouza y Ca., La Habana, p.123.
- ↑ Dionisio González, Manuel (1858): Memoria Histórica de la Villa de Santa Clara y su Jurisdicción. Imprenta del Siglo, Santa Clara, pp 258-259.
- ↑ García Garófalo Mesa, M (1938): Plácido, poeta y mártir. Ediciones Botas, México, pp .21-23.
- ↑ E. Valdés, Juan (1918): El 15 de Julio. Santa Clara, p.36.
- ↑ Reyes Aguilar, Judiel (2024): El nacimiento de las publicaciones en Santa Clara. Inédito
Fuentes
- Aguilera Rivas, Mailén (2008): Prensa en Santa Clara (1831-1898). Una historia de rebeldía infinita. Revista Islas, 50(156), UCLV, Santa Clara, pp. 149-156.
- Berenguer y Sed, Antonio (1933): Tradiciones Villaclareñas. Segundo Tomo. Imprenta y papelería de Rambla, Bouza y Ca., La Habana, p.123.
- Dionisio González, Manuel (1858): Memoria Histórica de la Villa de Santa Clara y su Jurisdicción. Imprenta del Siglo, Santa Clara, pp. 258-259.
- García Garófalo Mesa, M (1938): Plácido, poeta y mártir. Ediciones Botas, México, pp. 21-23.
- E. Valdés, Juan (1918): El 15 de Julio. Santa Clara, p.36.
- Reyes Aguilar, Judiel (2024): El nacimiento de las publicaciones en Santa Clara. Inédito.
