Kallistoskypha incarnata
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Kallistoskypha incarnata. Especie de hongo no comestible, se considera muy rara. Nace semienterrada, generalmente en grupo. Tiene preferencia por los suelos áridos y pedregosos, pero que conservan bien la humedad de la lluvia gracias a la abundante capa de hojarasca que los protege.
Nombres populares
Caloscifa encarnada y Taza hermosa encarnada.
Caracteristicas
Presenta un carpóforo muy pequeño, de 0,5-1,5, de joven con forma de copa o taza y de adulta más abierta, con forma de plato. Margen incurvado, a menudo ondulado. Cutícula frágil, algo tomentosa. Cara interna (himenio) lisa o algo furfurácea (casposa), de llamativo rojo carmesí que con la edad va palideciendo a rosa pálido y blanco-marfil, dejando el tono carmesí en el margen.
Cara externa ligeramente más clara, algo pubescente. Sésil (sin pie), adhiriéndose al sustrato mediante finos filamentos miceliales blancos. Carne insignificante, delgada, quebradiza, blanquecina. Inodora e insabora.
No tiene pie ya que el carpóforo está pegado al sustrato, formado por los restos de las hojas de eucaliptos y está fijamente anclado a este por infinidad de filamentos miceliales muy finos de color blanco.
Hábitat
Se les puede encontrar en suelos que son ricos en humus de eucalipto. Crece en invierno, en lugares con suelos pedregosos bien soleados pero húmedos, muy tapados por la abundante hojarasca de eucalipto, a veces incluso protegidos por las piedras.
Cocina
No se ha demostrado su comestibilidad, presenta una carne insuficiente para el consumo.