Cavidades anexas de las fosas nasales
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Sumario
Introducción
Llamadas también senos perinasales, son cavidades neumáticas excavadas en las estructuras óseas que conforman el piso medio facial, en el hueso frontal y en el cuerpo del esfenoides. Situadas en dos planos, uno anterior y otro posterior, se reúnen en dos grupos de senos: el sinusal anterior, constituido por los senos maxilares, las celdas etmoidales anteriores y los senos frontales, que drenan su contenido al nivel del meato medio; y el otro grupo, complejo sinusal posterior, que agrupa a las celdas etmoidales posteriores y el seno esfenoidal, y vuelca su contenido en el meato superior.
Seno maxilar o antro de Highmoro
Está excavado en ambos huesos maxilares; al nacimiento están ocupados por los gérmenes dentarios y presentan una capacidad de 2-3 cmᶟ entre los 5 a 7 años. Su máximo desarrollo lo alcanzan entre los 12 15 años, con una capacidad de 10-12 cmᶟ. Presentan una base común con la fosa nasal homolateral; una pared anterior o anteroexterna, accesible a la mano del examinador y del cirujano; y una pared superior que forma parte del suelo de la órbita, donde se labra un conducto el nervio infraorbitario y una pared posterior o posteroexterna, que se relaciona con la fosa cigomática. La unión de las paredes del seno maxilar conforman los bordes del seno, de los cuales el borde alveolar o inferior presentan la mayor importancia, por alojar los elementos dentarios superiores y presentarse como un verdadero suelo del seno en cuestión.
Seno etmoidal o laberinto etmoidal
Se encuentra labrado en las masas laterales del etmoides, y forma parte de la pared interna de la órbita y de la pared externa de la fosa nasal. Este seno adquiere características de interés clínico en la primera infancia, por ser el más neumatizado en esta etapa de la vida y asiento de inflamaciones agudas llamadas etmoiditis fluxionarias.
Senos frontales
Se presentan excavados en el espesor del hueso frontal, poseen una pared anterior accesible a la exploración llamada pared quirúrgica y una pared posterior que los separa de la fosa cerebral anterior. También presentan una pared inferior orbital y otra interna común a ambos senos. Los senos frontales pueden aparecer poco neumatizados o no neumatizados en el 4-8 % de los seres humanos, detalle anatómico de importancia radiológica y quirúrgica.
Seno esfenoidal
Es la más profunda de las cavidades anexas y está excavada en el cuerpo del esfenoides; posee íntima relación con los elementos nobles del endocráneo. Todas las cavidades anexas se encuentran tapizadas por una mucosa de tipo respiratorio, procedente de la evaginación de la mucosa nasal o pituitaria. Las funciones de las cavidades anexas son semejantes a las de las fosas nasales, con excepción de la olfatoria; según algunos autores, debido a su neumatización, intervienen en la disminución del peso craneofacial.
Fuente
- Dr. Villar Suárez, Manuel S, y coautores principales. Otorrinolaringología. Editorial Pueblo y Educación 1984.