Esteban Cacicedo Torriente
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Esteban Cacicedo Torriente. De procedencia española vino a Cuba buscando fortuna y se radicó en Cienfuegos. Fue uno de los hombres más ricos y poderosos de la ciudad. Propietario de ingenios, fundó comercios, bancos, firmas ganaderas, empresas arroceras, etc.
Biografía
Infancia y juventud=
Nació el 26 de septiembre de 1849 en Ceceñas, provincia de Santander, España. Vino a Cienfuegos en el año 1865, siendo dependiente comercial hasta el 1867, en que se trasladó al pueblo Esperanza en donde se estableció hasta el año 1872. Regresó a Cienfuegos formando la sociedad comercial Ruesga y Cacicedo hasta el año 1874 en que pasó a formar parte de la sociedad comercial García y Compañía. Se asoció con José García para fundar un almacén de víveres que también se dedicaba a negocios bancarios y se reestructuró en 1922 como Cacicedo y compañía SA en Cienfuegos. De aquella firma fueron socios Antonio Intriago y Nicolás Castaño, quienes mas tarde se independizaron y levantaron sendas fortunas, en especial el segundo cuyo caudal se traspasaría a sus descendientes.
Contrajo matrimonio en esta ciudad con Ramona de la Torriente, su prima, hija de acaudalados hacendados y comerciantes de Cienfuegos.
Estimándose, como uno de los hombres más ricos de la ciudad. Además de su gran casa de comercio, establecida en la calle de Argüelles esquina a D’ Clouet. Levantó el gran central Santa María, desde 1909, bajo la dirección de su hijo Esteban y fomentó en el demolido central Carolina un potrero cuya administración estuvo a cargo de su hijo Isidoro, donde las grandes crías vacunas y caballares productos de sementales importados de Europa y Estados Unidos dieron auge a la ganadería nacional.
Otra etapa de su vida
Fue Concejal del Ayuntamiento, en los años de 1878 y 1880; Tesorero del Comité Directivo del Cuerpo de Bomberos del Comercio y varias veces, Presidente del Casino Español desde 1918. En 1887 era teniente del batallón de voluntarios de Cienfuegos y fue varias veces presidente del Casino Español. Al celebrarse las fiestas del Primer Centenario de la Fundación de la Colonia Fernandina de Jagua, donó dos premios para el mejor Himno y la mejor Marcha a Cienfuegos. Fue miembro de la Comisión organizadora de las referidas fiestas y en justo premio a su labor, le fue concedido gran Diploma de Honor y Medalla de Oro, con cordón azul, y el Ayuntamiento tomó el acuerdo en sesión del 25 de abril de 1919, de darle un boto de gracias por su valiosa cooperación.
Se distinguieron en actividades católicas y obras pías y benéficas, contribuyendo a la fundación del Asilo de Ancianos desamparados, a la institución de las Siervas de María, al establecimiento de los jesuitas y otras más.
Muerte
Muere el 23 de agosto de 1932. Tras su fallecimiento se constituyó en 1933 la Cacicedo y Compañía S. Ltd y se distribuyeron las acciones entre sus 6 hijos, Isidoro, Luís, Ramón, Rosalía, José María y Esteban.