Hotel Plaza de Yaguajay
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Hotel Plaza. Su construcción está enmarcada entre los años 1921 y 1930. Este edificio desde el punto de vista arquitectónico forma parte del patrimonio cultural de Yaguajay porque es uno de los exponentes más significativos dentro del núcleo urbano de la arquitectura ecléctica.
Un poco de historia
Su formación en esta etapa contempló originalmente la construcción de unas doscientas casas en la casa real hoy Panchito Gómez Toro, siendo precisamente en esa vía donde se edifica el 30 de octubre de 1927 el Hotel Plaza, el cual fue financiado por el hacendado Ramón Oraza quien era propietario de varias fincas y viviendas, además del centro comercial de Vitoria.
En su construcción intervinieron un grupo de obreros de la localidad guiados por su ejecutante principal José Medinas Ríos y destacándose los albañiles Pascual Betancourt ( padre e hijo), Emiliano Méndez, Carmelo Jacomino y Pablo Valdivia.
Esta obra ha jugado a través de los años un importante papel político, histórico, cultural y social en la localidad, al servir de hospedaje a una serie de personalidades que llegaban al pueblo ya fuera en campañas electorales, en funciones artísticas, de carácter periodístico o simplemente descanso.
Huésped ilustre de esta institución lo constituyó el genial comediante y humorista Enrique Arredondo, también recibió alojamiento García Montes un importante ingeniero, Gabino Delgado un cronista deportivo de la época y un poco más tarde un grupo de fotógrafos revolucionarios que radicaron allí durante la lucha clandestina.
Durante la Batalla de Yaguajay, el jefe de las tropas batistianas Alfredo Abon Lee situó personal de su guarnición en el Hotel Plaza.
Desde lo alto del mismo se dominaban las principales entradas del pueblo. Por su posición geográfica el hotel significaba un fuerte difícil de cercar ya que desde el se dominaba todos los accesos al pueblo.
Durante la madrugada del 24 de diciembre arreció el fuego rebelde y fueron cayendo los distintos enclaves del enemigo, los soldados ubicados dentro del hotel no pudieron mantener dicha posición debido al intenso fuego.
Esta edificación de tipo dos con paredes de mampostería y techo de tejas presenta dos niveles, en el primero se observan columnas de orden dórico y en el segundo columnas jónicas con base definidas en ambas plantas, presenta en ambos niveles cornisa, friso y en la azotea pretil de la época lo que impide la visualización de una parte del techo de tejas.
La planta y los espacios son desarrollados en forma de U lo cual marca también un período de la arquitectura de nuestro país, anterior a la época de este edificio, desarrollando por consiguiente en su centro el tradicional patio colonial característico de siglos pasados.
