Ibieca

Ibiecas
Información sobre la plantilla
Villa de España
EntidadVilla
 • PaísBandera de España España
 • ProvinciaHuesca
Población (1998) 
 • Total105 hab.
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IBIECA (Huesca)

Ibiecas Lugar de la provincia de Huesca. Situado al sur de las sierras exteriores pirenaicas (Guara), en el interfluvio Guatizalema-Alcanadre, a 640 m. de altura.

El centro del pueblo viene marcado por una gran plaza rectangular, que según la tradición fue patio de armas del palacio, hoy desaparecido, del duque de Solferino. En el subsuelo se encuentran, al decir de los vecinos, los subterráneos del castillo-residencia. Abundan los edificios de puertas doveladas, con piedras armeras sobre sus fachadas, que denotan la antigua propiedad de los inmuebles, en manos de infanzones.

La Iglesia parroquial de Ibieca tiene aspecto de fortaleza, especialmente por su torre-campanario, de piedra de sillería. El resto del edificio es bastante posterior, de los siglos XVII y XVIII. La portada, aunque de escaso interés, se corresponde con el estilo renacentista. Como fecha de la última restauración importante cabe citar la del año 1605, y hay que anotar el nombre de Domingo Isola como arquitecto restaurador.

El lugar fue conquistado por Sancho Ramírez. Después, Ibieca dependió del señorío de Foces, al que le sucedió la Orden Hospitalaria de San Juan de Jerusalén, por designio expreso de don Ximeno de Foces, el cual mandó construir a sus expensas la ermita de San Miguel, levantada en sus posesiones, a unos cinco kilómetros del casco urbano. Esta ermita conocida actualmente por el nombre de San Miguel de Foces, fue declarada monumento nacional; su portada recuerda a la catedralicia de Valencia: al parecer, don Ximeno de Foces quiso que fuese copia de la misma, ya que por aquel entonces él desempeñaba el cargo de procurador del reino en la capital levantina.

En relación con los hospitalarios se cuenta una leyenda sobre un fraile alquimista, al que un noble judío pidió que curara a su hija de mal de amores. Como quiera que el fraile se negó, el judío tomó venganza pasando a cuchillo a todos los frailes del monasterio, en la noche de San Juan Bautista, durante el rezo de maitines, cuando se disponían a celebrar la fiesta. La mancha de sangre producto de aquella gran matanza impregnó el muro interior, y aún sigue allí en recuerdo del trágico suceso.

Existe una profunda devoción entre los ibiecanos por la Virgen de Foces, cuya imagen trasladan de la ermita al pueblo el 15 de mayo; el regreso tiene lugar el primer domingo de septiembre. Es tradición que la presencia de la imagen cuida las cosechas.

El 8 de mayo de cada año se celebra la fiesta pequeña, prólogo de la mayor, que llegará el 23 de noviembre. Objeto especial de veneración es también una reliquia de Santa Orosia, que llegó a Ibieca procedente de Jaca, por medio de don Antonio Lacadena, que fue arcipreste de la catedral jacetana. De Ibieca partió también un día Doña Godina, hija de Atho de Foces, para hacerse cargo del señorío de La Almunia, en la provincia de Zaragoza. Ibieca queda ligada en su historia a la casa de Foces, que le dio su máximo esplendor.

Fuentes