Lot

Lot
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NacimientoUr de los caldeos
NacionalidadBandera del Estado de Israel Israel
Conocido porSobrino de Abraham (Abrán), hijo de su hermano Harán y nieto de Taré.
CónyugeEsposa de Lot
HijosDos hijas, Moab, y Ben-Ammi
PadresHarán
FamiliaresMilcah (hermana) Iscah (hermana) Nacor (tío) Abraham (tío) Sarah (tía) Terah (abuelo)

Lot Origen hebreo, 'escondido' fue un personaje bíblico del libro Génesis del Antiguo Testamento.

Lot y su padre Harán nacieron y se criaron en Ur de los caldeos, en la región de Sumeria, en el río Éufrates, en la baja Mesopotamia. Harán murió en esa tierra antes que su padre Taré.

Taré, el abuelo de Lot, hizo arreglos para que su gran familia estableciera un rumbo hacia Canaán, donde podrían restablecer un nuevo hogar. Entre los miembros de la familia con los que Lot viajó estaba su tío Abram (más tarde llamado Abraham ), uno de los tres patriarcas de Israel.

De camino a Canaán, la familia se detuvo en la región de Paddan Aram, aproximadamente a la mitad del Creciente Fértil entre Mesopotamia y el Mediterráneo. Se establecieron en el lugar llamado Harán donde vivió Taré el resto de sus días. Tenía 205 años cuando murió.

Historia de Lot

La historia de Lot fue una de las más tristes de la Biblia. Cuando Abram y Sarai salieron de Harán, tomaron también a Lot, sobrino de Abram. Allá llegó a tener un rebaño y se convirtió en un ganadero independiente, aunque siguió viviendo cerca de Abram. Cuando hubo contienda entre los pastores de Abram y los de Lot, Abram sugirió que se separaran. Lot no dejó que su tío escogiera, como habría sido lo conveniente que hiciera, sino que él mismo escogió la fértil llanura del Jordán. Salió hacia el oriente y «fue poniendo sus tiendas hasta Sodoma», aunque sabía que «los hombres de Sodoma eran malos y pecadores contra Jehová en gran manera» (Gén. 13:11-13). Con el tiempo se estableció en la ciudad.

Compartió la suerte de los habitantes y fue hecho prisionero por el rey Quedorlaomer. Por la intervención de Abram, fue liberado. A pesar de esta lección tan seria, Lot volvió a vivir en Sodoma y obtuvo un puesto entre los ancianos y jueces de la ciudad. «Estaba sentado a la puerta de Sodoma» (19:1), el lugar de la autoridad ( Prov. 31:23).

Dios «condenó a la destrucción y redujo a cenizas las ciudades de Sodoma y Gomorra, poniéndolas como ejemplo a los que vivirían impíamente; y si libró al justo Lot, afligido por la perversa conducta de aquellos libertinos (porque este justo, que habitaba entre ellos, afligía cada día su alma justa viendo y oyendo sus obras inicuas)» (2 Pe. 2:6-8)

Cuando Lot no quiso cooperar con estas conductas, e intentó proteger a sus huéspedes, dijeron: «Vino este extraño para habitar entre nosotros, ¿y habrá de erigirse en juez?» (Gén. 19:9). Le hicieron gran violencia y quisieron matarlo. Por la intercesión de Abram, el Señor quiso salvar a Lot. Pero, para esto, Lot tenía que apartarse de los habitantes de Sodoma y salir de la ciudad. La salvación era también ofrecida a su familia. La casa de Lot incluía a su esposa, a sus dos hijas y a sus dos yernos.

A Lot mismo le costó salir de Sodoma. Se demoraba, y los ángeles tuvieron que asir su mano y la de los suyos, y sacarlos.

Fue peor aún para su esposa. Fuera de Sodoma, no pudo separarse de la ciudad. Dejó que su esposo se adelantara, miró atrás y se volvió estatua de sal. Al mirar atrás desobedeció al mandato de Dios (19:17, 26)

Cuando Lot entró en Zoar, no se atrevió a quedarse allí, sino que se refugió en el monte y habitó en una cueva con sus dos hijas. Luego ocurrió algo muy triste. Ellas embriagaron a su padre y cometieron incesto. Este abominable pecado es condenado por la ley.

De este acto inmoral nacieron Moab y Ben-ammi, padres de los moabitas y amonitas, pueblos que más tarde causaron muchos problemas a los israelitas.

Gran parte de la vida de Lot fue un retrato de las consecuencias de la codicia y la influencia negativa de un entorno pecaminoso. Lot conoció a Dios, pero eligió vivir entre gente que llevaría a su familia al pecado y a la complacencia. Pero la historia de Lot es también una ilustración de la gran misericordia de Dios: a pesar de las malas decisiones de Lot, Dios lo salvó a él y a sus hijas de un final violento en Sodoma y preservó su linaje a lo largo de los siglos.

Fuentes