Luis Augusto Méndez
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Luis Augusto Méndez, destacado maestro, escritor, poeta. Nace en Santiago de Cuba en el año 1888, desde muy pequeño se traslada a vivir para Banes, lugar donde realizo su carrera artística, y se caracterizo por sur un ferviente defensor la identidad local. Muere en Banes en el año 1970
Síntesis Biográfica
Al concluir la guerra hispano- cubano norteamericana, su tía paterna lo trae para Banes. Huérfano de madre y padre se instala en la ciudad donde vence sus estudios como maestro y se dedica posteriormente a la labor educativa
En su labor como escritor tuvo intercambio de correspondencia con intelectuales como Navarro Luna y Nicolás Guillén, fue profesor de Gastón Baquero . Trabajó como colaborador en el Periódico El Pueblo 1915-1958. Trabajó como periodista cultural en la revista Portada 1953-1956 de Banes. En 1958 establece una confrontación jurídica, pues las autoridades locales de acuerdo con los intereses de los americanos, querían cambiarle el nombre a la playa de Guardalavaca por otro Guarda La Barca y gracias al sentido de pertenencia de este escritor y educador, la polémica se resolvió después del triunfo revolucionario, al publicar su libro de poesía Guardalavaca Playa incomparable 1960, incluye los pormenores de este evento. En esta etapa participó en la campaña de Alfabetización.
Libros Publicados
- Guardalavaca Playa incomparable 1960,
- Trémulos Pétalos, editorial Hermes, Compostela 78, La Habana 1926.
- Textos suyos aparecen en la Antología Poética La Ensenada 2000: Ediciones Holguín y el Anuario de escritores santiagueros 2009. Entre sus textos inéditos aparecen obras para el teatro y su epistolario con grandes poetas y personalidades de Hispanoamérica
Distinciones
- Condecorado en 1950 como poeta de la Ciudad, su obra está en estudios actualmente, trabajos inéditos están en la Biblioteca Municipal.´ Carlos Fernández ´.
Obra
En Guardalavaca
A Otilia
Tendidos sobre la arena
bajo la brisa salobre,
aguardamos el arribo
de la reina de la noche
Nerviosamente a su lado
Contemplaba el horizonte
por donde flotan las brumas
en su clámide de cobre.
Dijo un chiste el buen anciano
que era muy feliz entonces….
Rieron todos, rieron
yo temblé como el azogue.
¿Por qué era un chista alusivo
a un amor que ama que se esconde?
Temblé porque en ese instante
sentí de su mano el roce,
y en mi pecho se infiltraron
del mar las emanaciones…
II
Disipando al fin las brumas,
la amiga d e los poetas,
se alzó en su lecho de nardos
delirios y de azucenas.
Se llenó de un azul suave
el cielo, el mar y la tierra,
y al susurro de las olas,
se unieron voces diversas.
Cantó mi amada, cantaron
hasta las voces más viejas;
hubo un delirio de voces,
y un beso fugado de ellas….
En tanto Guardalavaca,
bajo un madrigal de estrellas
suavemente sonrela
sobre las blancas arenas…
Fuente
- Investigación realizada en conjunto Maritza Galano Santisteban, técnico de biblioteca y Lic. Ana Gloria González Ochoa Directora Biblioteca Banes.
