Mór Jókai
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Síntesis biográfica
Nace en Komárom, Hungría en el año 1825. Pertenecía a una familia noble calvinista, hijo de József Jókay y Mária Pulay. De temperamento suave y agradable, fue un estudiante ejemplar, y reveló muy pronto destacadas facultades literarias. A los nueve años vio impresa ya su primera poesía; a los diecisiete escribió una tragedia y a los veintiuno publicó su primera novela, Días laborables. Se diploma en derecho en Kecskemét y más tarde practica la abogacía en Pest, en 1844, tras el éxito de su primera novela , vuelve la espalda a su carrera como abogado y consagra su vida a la escritura.
Terminados los estudios en Pápa y Kecskemét, se dirigió a Pest, donde se encargó de la redacción de la revista Életképek, contrajo matrimonio con la famosa actriz Róza Laborfalvi, y, junto con Petöfi, de quien fue el amigo más íntimo, participó activamente en la agitación revolucionaria de 1848-1849. Luego del trágico final de la guerra de la independencia, reanudó antes que ningún otro escritor húngaro la actividad literaria.
Su literatura está basada en los acontecimientos que afectaron a Hungría, como los sangrientos siglos de dominio turco, de donde parte para elevar, en ocasiones, el nacionalismo de su patria y en otros momentos exaltar a los patriotas en un canto de admiración y reconocimiento por la valentía que mostraron en la Revolución o contra la opresión austriaca.
Escribe muchas novelas y ya en los años 1850 es inmensamente popular. Éste es su periodo más productivo; por ello él es el primer escritor húngaro, que puede llevar un tren de vida de gran burgés con sus ingresos. Desde 1861 fue diputado al Parlamento, y se distinguió también como político por su desinteresada entrega a la causa.
En 1894 con ocasión sus bodas de oro como escritor, en compañía de una enorme exaltación, aparece la edición de lujo en 100 volúmenes de su obra y la Real Universidad Húngara de Ciencias lo nombra doctor honoris causa.
Fallece a los 79 años de pulmonía en Budapest.
Obras
Trabajos tempranos tales como Hétköznapok (1846; Días de la semana) muestra la influencia del romanticismo francés, pero sus novelas maduras están más relacionadas con la realidad y la experiencia personal. Egy magyar nábob (1853; Un húngaro Nabob ) y Az arany ember (1873; El hombre del toque dorado , o Timar's Two Worlds ) se encuentran entre sus novelas más importantes relacionadas con la Hungría del siglo XIX.
(La edad de oro de Transilvania, Los turcos en Hungría, Los últimos días de los jenízaros), elevó un monumento ideal a los patriotas del resurgimiento (Un nabab húngaro, Zoltán Kárpáthy, Sin embargo se mueve) y tejió una corona de admiración y gratitud en memoria de las víctimas de la revolución y del despotismo austríaco (Los hijos del hombre de corazón de piedra, El nuevo propietario).
Ningún otro escritor romántico recorrió con mayor complacencia y firmeza no sólo los cinco continentes y los milenios pretéritos, sino también el mundo "todavía inexistente" del porvenir (Diamantes negros; El hombre de oro; La novela del siglo venidero; Mío, tuyo, suyo; Dios es uno y solo; Libertad bajo la nieve).
En la mayoría de sus obras aparecen confundidos los límites entre lo real y lo irreal, sin que, no obstante, el lector perciba el tránsito de una a otra zonas. Su optimismo de eterno muchacho y el fantástico brillo de su imaginación hacen en particular, el escritor de la juventud; pero, ni aun el lector más maduro y experimentado suele resistir su atracción, aumentada por el esplendor del estilo. Aun cuando la crítica no le ahorrara las censuras, siguió, imperturbable, su carrera, y llegó a ser el narrador húngaro más popular en su patria y el único conocido en el extranjero.