Persa chinchilla
|
Persa chinchilla. Son distintos de los gatos persas comunes, hay que acostumbrarlos desde chicos a tenerlos en los brazos, de lo contrario cuando son grandes no se dejan acariciar, aunque son afectivos.
Origen
Originario de Irán, la antigua Persia, los chinchillas son producto de una mezcla entre gato persa y un gato de pelo largo de Turquía en el siglo XVII, extendiéndose poco a poco por Europa hasta popularizarse a finales del siglo XIX. A día de hoy es una raza difícil de conseguir, muy apreciada por su belleza.
Rasgos
El Chinchilla posee una estructura ósea muy fuerte, patas gruesas y pequeñas y cuerpo musculoso. De cabeza grande y redondeada, orejas pequeñas y puntiagudas y ojos muy abiertos y redondos, azules o marrones, que le dan a su cara un aspecto infantil. Pero sin lugar a dudas lo que más destaca en el Chinchilla es su pelaje, espeso, largo y fino que puede adquirir una gama muy amplia de colores, hay chinchillas blancos, negros, grises, bicolores, color crema, dorado, chocolate. Su cola, corta, pero con muchísimo pelo y en forma de abanico.
Carácter
De carácter tranquilo, casero y cariñoso, es un gato perfecto para una casa o para gente mayor. En general no es muy juguetón, sino pasivo. Por su tranquilidad y su cuerpo fuerte se suele llamar a los chinchillas los “tigres del sofá“, que es donde pasan casi todo el día.
Cuidados
A los dos meses ya se les puede comenzar a bañar, pero antes hay que peinarlo con algún producto desenredante, para cuidarles el pelo, también conviene taparles las orejas. Se deben secar con una toalla y luego con un secador Hay que cuidar diariamente su pelaje, peinarlo y retirar el pelo suelto para mantener la vistosidad de la raza.
Salud
El chinchilla tiene una salud algo más delicada que otros persas. Tienden a enfermar en el estómago y los huesos. A veces también sufren de alopecia en algunas partes concretas de su pelaje. Esto suele deberse a una dieta poco equilibrada y se suele solucionar con un aporte extra de vitaminas.
¿Cuanto suele vivir?
Vive de doce o trece años, pero algunos ejemplares alcanzan y superan los quince o dieciséis años.