Pirola rotundifolia

Pirola
Información sobre la plantilla
Pirolarotundifolia.jpg
Nombre Científico:Pyrola rotundifolia L
Reino:Plantae
División:Magnoliophyta
Clase:Magnoliopsida
Orden:Brassicales
Familia:Ericaceae
Subfamilia:Monotropoideae
Tribu:Pyroleae
Género:Pyrola
Especie:Pyrola rotundifolia
Hábitat:Europa, Mediterráneo y Asia

Pyrola rotundifolia, Hierba de la familia de las piroláceas. Es muy pequeña, solo alcanza a medir 20 cm de altura. Las hojas nacen cerca de la base, 6 o 12 por rama, y tienen forma oval redondeada. Produce flores blancas de agradable aroma. Con fines medicinales se utilizan las hojas. Su nombre binomial es Pyrola rotundifolia.

Taxonomía

Nombre científico

  • Pyrola rotundifolia L.[1]

Autores

Combinaciones del basónimo

  • Thelaia rotundifolia (L.) Alef.[3]

Sinonimia

  • Thelaia rotundifolia (L.) Alef.[4][5]

Variedades

Descripción

Esta planta presenta cinco o seis hojas casi redondas y semejantes a las del peral, a lo que debe su nombre. Entre estas hojas salen unos tallos largos, poblados de algunas pequeñas hojas puntiagudas y adornadas en el extremo superior por unas flores en forma de espiga. Toda la planta es de sabor amargo. Existen muchas variedades de pí­rolas, con propiedades muy parecidas y fácilmente confundibles.

La podemos encontrar en los bosques de montañas, por todo el Pirineo y la Cordillera Central.

Propiedades

Tiene propiedades astringentes y diuréticas.

Cultivo

La pirola es una hierba silvestre, propia de clima templado

Floración

La época de floración de la pirola varí­a enormemente dependiendo de la variedad de que se trate. Si nos referimos a la especie española, florece entre junio y julio, en función de la altitud donde se encuentre. De la recolección, con fines terapéuticos, interesan tan solo las hojas, que se deben arrancar con cuidado y ponerlas a secar rápidamente al sol o en secadero, a temperaturas no muy altas.

Aplicación

En todas las variedades de pí­rola encontramos el glucósido arbutina formando parte de la composición de las hojas. A este compuesto le acompañan otros de menor interés, como la metilarbutina, la ericolina y el ácido gálico. Además, también aparece una sustancia amarga llamada ursona.

Es una planta diurética y astringente que se utiliza normalmente en caso de diarrea. Empleada exteriormente parece que tiene propiedades vulnerarias, siendo ampliamente utilizada en algunos paí­ses europeos. En España no es una hierba que goce de mucha popularidad. De hecho, los antiguos botánicos no incluyeron esta especie en sus tratados. Realmente se comenzó a usar como antidiarreico en el siglo XVI, pero ya por aquel entonces existí­an otros remedios más populares y mejor conocidos. Además, la pí­rola es una planta de difí­cil cultivo en jardines y campos. Parece ser que para su desarrollo necesita de la presencia de cierto hongo en sus raí­ces, que proporcionarí­a a la planta determinados nutrientes sin los cuales no podrí­a sobrevivir.

Al tratarse de una hierba de difí­cil cultivo, su empleo decayó mucho, quedando relegado al lavado de heridas, llagas y poco más.

Forma de uso

Infusión. Se prepara con 5 g de hojas por cada 100 g de agua hirviendo. De esta infusión se pueden tomar hasta cinco tazas al dí­a, repartiéndolas después de las comidas. En algunos paí­ses del centro de Europa se preparan diversas infusiones hechas a base de muchas hierbas, una de las cuales es ésta.

Referencias

Fuentes