Boba Fett
| ||||||||||||
Boba Fett. Es un personaje de ficción creado por George Lucas para la serie de filmes Star Wars. Es uno de los cazadores de recompensas más temidos de la galaxia. Un clon genético de su padre, el cazador de recompensas Jango Fett, Boba aprendió habilidades de combate y artes marciales desde temprana edad. Durante el curso de su carrera, que incluye contratos para el Imperio y el submundo delictivo, se convirtió en una leyenda.
Sumario
Biografía
Creación y vida temprana
Tras la Invasión de Naboo, un ejército de clones fue encargado en secreto en Kamino por el Maestro Jedi Sifo-Dyas, quien creía que sería necesario para proteger a la República Galáctica. El ejército sin embargo, formaba parte de un complot Sith para derrocar a la República y destruir a la Orden Jedi. Antes de su proceso de creación, el cazarrecompensas Jango Fett fue reclutado por el Lord Sith Darth Tyrannus. Jango debía ser el modelo genético para el ejército clon. Jango aceptó ser el modelo de los soldados clon a cambio de un pago significativo, así como de otra petición: la creación de un clon que no hubiera sido modificado genéticamente para alterar su comportamiento o su tiempo de crecimiento. Los científicos kaminoanos crearon a ese clon, a quien Jango crió como su hijo y al que llamó Boba Fett.
Cuando era niño, Boba fue criado en Kamino por su padre, quien enseñó a Boba muchas de las habilidades que había aprendido como cazarrecompensas. Boba aprendió habilidades de combate y supervivencia, y dominó el uso del bláster. También aprendió como operar los sistemas de armamento de la nave de su padre, la Esclavo I, y se familiarizó con los miembros del gobierno kaminoano.
Escape de Kamino
Poco antes del estallido de las Guerras Clon, Jango Fett recibió órdenes por parte de la Confederación de Sistemas Independientes para asesinar a la senadora Padmé Amidala, una de las principales opositoras a una posible guerra. Jango y su compañera, Zam Wesell, fracasaron en su intento de asesinato, y Jango fue seguido hasta Kamino por el Caballero Jedi Obi-Wan Kenobi, quien sabía que un cazarrecompensas relacionado con Kamino estaba implicado en el intento de asesinato. Cuando Kenobi llegó a Kamino, los kaminoanos le mostraron al ejército clon, y Kenobi solicitó reunirse con Jango. Taun We, la ayudante del Primer Ministro Lama Su, llevó al Jedi hasta los aposentos de los Fett, donde Boba los recibió. A pesar de desconfiar del Jedi, Boba le permitió entrar a sus aposentos, donde Kenobi habló con Jango acerca de los clones e insinuó que sabía que Jango estaba tras el intento de asesinato a Amidala. Sabiendo que habían sido descubiertos, Jango y Boba se prepararon para abandonar Kamino inmediatamente en cuanto Kenobi se marchó.
Mientras preparaban la Esclavo I para partir, Kenobi descubrió a los Fett tratando de escapar, y se enfrentó a Jango en un combate singular a lo largo de una plataforma de aterrizaje. Durante la lucha, Boba encendió los cañones de la nave y disparó a Kenobi repetidamente en un intento por matarlo. A medida que la lucha avanzaba, Kenobi empujó a Jango fuera de la plataforma hacia el océano del planeta, provocando que él mismo — que estaba atado al cazarrecompensas por un cable — también cayera. Jango cortó el cable y fue capaz de regresar a la plataforma, mientras que Kenobi cayó a los niveles inferiores. Eso dio a Jango el tiempo suficiente para subir a su nave y escapar mientras Boba pilotaba, aunque Obi-Wan llegó a tiempo a la plataforma para colocar un rastreador en la nave.
Jango y Boba se dirigieron a Geonosis, donde estaban reunidos los líderes separatistas. De camino a allí, Kenobi los interceptó y comenzó a dispararles en el campo de asteroides que rodeaba Geonosis. Los Fett fueron capaces de evadir al Jedi, y Jango soltó al espacio varias cargas de explosivos en un intento por destruir la nave de Kenobi. Obi-Wan fue capaz de simular su muerte soltando restos de su nave contra las cargas, que explotaron haciendo creer a los Fett que el Jedi había muerto. Luego procedieron a la superficie del planeta, mientras Kenobi permanecía escondido en el campo de asteroides preparado para volverlos a seguir.
Guerras Clon
Después de la llegada de los Fett a Geonosis, Obi-Wan Kenobi comenzó a investigar la presencia separatista en el planeta y fue capturado por geonosianos. Su captura urgió a la senadora Padmé Amidala y al Padawan de Kenobi, Anakin Skywalker, a intentar rescatar a su amigo. Jango Fett y los geonosianos también los capturaron, y los tres detenidos fueron llevados a una arena de ejecución, donde Boba observó desde las gradas junto a su padre cómo se enfrentaban a varias criaturas que intentaban matarles. Un equipo de Jedi, liderado por el Maestro Jedi Mace Windu, pronto llegó para rescatarlos. Windu puso su sable de luz cerca de la garganta de Jango mientras amenazaba al Conde Dooku, pero pronto fue obligado a saltar a la arena a medida que llegaba un ejército de droides de combate.
Los droides de combate hicieron frente a los Jedi en la arena. Mientras la batalla avanzaba, Jango se unió a la lucha, en la que su jetpack fue dañado y quedó inservible, haciéndole más vulnerable a los ataques. A pesar de eso, Jango hizo frente a Windu, quien lo decapitó matándolo instantáneamente. Boba vio horrorizado cómo su padre era asesinado. Cuando la batalla en la arena hubo acabado, Boba regresó a la arena para recuperar el casco de su padre, presionándolo contra su cabeza mientras juraba vengarse de Mace Windu.
Buscando venganza
Después de Geonosis, Boba se unió a un equipo de cazarrecompensas, entre los que se encontraban Aurra Sing y Bossk, para vengarse de Mace Windu por la muerte de Jango Fett, y tomó la posesión de la Esclavo I. Juntos, Boba y los cazarrecompensas idearon un plan para asesinar al Maestro Jedi a bordo del Destructor Estelar Resistencia. Boba se hizo pasar por un joven cadete clon, cuyo apodo era Lucky, aprovechando el factor de que era genéticamente idéntico al resto de cadetes clon: nadie de abordo del Resistencia podría saber su verdadera identidad. A bordo del Resistencia, Boba y los otros clones fueron recibidos por Windu y Anakin Skywalker, antes de ser sometidos a un entrenamiento de táctica. Luego, cada clon tuvo que disparar sobre varios objetivos, y todos fallaron en ello — salvo Boba, que fue capaz de acertar en todos sus disparos gracias a las enseñanzas de su padre.
Más tarde, mientras recibían una visita guiada por la nave, Boba se alejó de los demás clones y se dirigió a los aposentos de Windu, donde instaló una bomba que estallaría en cuanto alguien entrase a los aposentos. Sin embargo, un soldado clon entró en los aposentos de Windu antes que el Maestro Jedi, muriendo en el acto pero poniendo a la nave entera en estado de alerta. Sing ordenó a Boba mediante un comunicador que saboteara el núcleo del reactor del Resistencia, matando a todos los de a bordo, pero Boba era reticente a matar a todo el mundo. Su único objetivo era matar a Windu. No obstante, Boba hizo lo que se le pidió, alejándose de nuevo de su grupo de clones y siendo atrapado por un soldado clon en el núcleo del reactor. Los dos se enzarzaron en una breve pelea, hasta que Boba consiguió aturdir al soldado con su propio bláster. A continuación, destruyó el reactor de la Resistencia a base de disparos.
Gran parte de la cubierta del Destructor fue destruida durante la explosión subsiguiente, y Windu y Skywalker casi fueron arrastrados al espacio antes de que las brechas fueran selladas. Con el Resistencia gravemente dañado, su tripulación comenzó a abandonar la nave. Boba, cuya identidad aún no había sido descubierta, y los demás cadetes clon, fueron evacuados en cápsulas de escape. Boba saboteó su propia cápsula para separarse de las otras cápsulas, permitiendo ser interceptado por la Esclavo I. Entonces, Sing y Bossk revelaron a los cadetes que iban en la cápsula de Boba que él era el responsable del saboteo del Resistencia. Boba tuvo la elección de elegir entre quedarse con los cadetes clon o marcharse con los cazarrecompensas, y Boba decidió de mala gana irse con los cazarrecompensas.
Tras abandonar la cápsula de escape, Boba y los demás cazarrecompensas, incluyendo a Castas, se dirigieron a Vanqor, un planeta cercano donde el Resistencia había colisionado tras la explosión. Una vez allí, asesinaron a varios soldados clon y capturaron al Almirante Kilian, un oficial clon, y al Comandante clon Ponds. Esperando tender otra trampa a Windu, Boba dejó el casco de su padre lleno de explosivos en el puente del Destructor, que se detonaría si Windu llegaba en busca de supervivientes. El Maestro Jedi, junto a Skywalker, llegó poco después. El casco explotó justo después de que Windu descubriera su presencia y recordara que Jango tenía un hijo — deduciendo que Boba era quien quería matarle. Windu y Skywalker no murieron en la explosión del casco, pero quedaron atrapados entre los escombros del Resistencia.
Cuando Boba y los otros cazarrecompensas vieron la explosión, asumieron que Windu había muerto y quisieron recuperar su cadáver. Castas, sin embargo, pensó que sus tres prisioneros eran suficientes como para cobrar una gran recompensa del Conde Dooku, pero Sing apoyó a Boba y a sus intenciones de encontrar el cuerpo de Windu. A medida que avanzaban por el Destructor, R2-D2, el droide astromecánico de Skywalker, intentó impedir su avance lanzándoles escombros y cerrando puertas delante de los cazarrecompensas. Incapaces de llegar hasta el puente, Sing decidió usar la Esclavo I para destruir lo que quedaba del Resistencia, asegurando así que Windu habría muerto con total seguridad.
Antes de usar la Esclavo I, los cazarrecompensas oyeron una explosión causada por R2-D2, que había sido atacado por dos gundarks y había usado un caza estelar Jedi para repelerlos. Los cazarrecompensas pensaron que Windu había sobrevivido a la explosión y bloquearon las comunicaciones, esperando evitar que el Jedi pidiese ayuda. R2-D2 logró escapar en un caza estelar Jedi, sobreviviendo a los ataque de la Esclavo I antes de saltar al hiperespacio rumbo a Coruscant. Allí llegó al Templo Jedi y reunió a un equipo de rescate que ayudó a Windu y a Skywalker. Los cazarrecompensas, por su parte, decidieron usar a sus prisioneros para atraer a Windu.
Sing ideó una nueva trampa, y envió una transmisión al Templo Jedi revelando que mantenían prisioneros a tres miembros del Gran Ejército de la República. Sing ordenó a Boba que ejecutara personalmente al Comandante Ponds durante la transmisión, pero él fue incapaz de hacerlo, puesto que su objetivo era matar a Windu en vez de a los prisioneros. Sing ejecutó a Ponds ella misma, dejando su cuerpo en el espacio, y la relación de Boba con ella y los otros cazarrecompensas comenzó a deteriorarse. Boba repudió el trato al que eran sometidos los prisioneros, proveyéndolos de agua. Sin embargo, la transmisión al Templo Jedi hizo que los Jedi les siguieran la pista, siendo enviados tras ellos el Maestro Plo Koon y la Padawan Ahsoka Tano en lugar del Maestro Windu.
El grupo pronto se refugió en Florrum, donde Sing planeaba recibir la ayuda de Hondo Ohnaka, un pirata que había sido su antiguo amante. Ohnaka rechazó ayudar a Sing si los Jedi llegaban a Florrum, pero también prometió no interponerse en su camino. Castas, no obstante, contactó con otro cazarrecompensas de Coruscant y le ofreció proporcionarle información de Boba y los demás. Sing escuchó su conversación y le ejecutó, dejando a Boba horrorizado y empezando a darse cuenta de que había cometido un error al aliarse con los cazarrecompensas en su intento por vengarse de Windu.
A pesar de la traición de Castas, fue su transmisión a Coruscant lo que permitió a los Jedi descubrir a Boba y los demás en Florrum, puesto que Tano había escuchado discretamente la transmisión. Los dos Jedi llegaron a Florrum poco después, donde Sing intentó obtener una recompensa por los prisioneros. Ambos bandos terminaron atacándose mutuamente, con Boba apuntando a la cabeza de Koon con un bláster y Ahsoka con su sable láser cerca de la garganta de Aurra. Los cazarrecompensas provocaron una distracción e intentaron escapar, pero Boba fue capturado mientras Sing huía en un speeder. Plo Koon interrogó a Boba, quien rechazó proporcionar la ubicación de los prisioneros a pesar de su rechazo al trato al que habían sido sometidos. Ohnaka fue capaz de convencer a Boba de dar la información a los Jedi, afirmando que Jango habría querido que su hijo actuase de forma honorable. Los prisioneros fueron rescatados, y aunque Sing logró llegar a la Esclavo I y despegar, Tano cortó una de las alas de la nave haciéndola colisionar. La nave cayó y se produjo una violenta explosión, y los Jedi asumieron que Sing había muerto, aunque en realidad había sobrevivido.
Boba y Bossk, quien también fue puesto bajo custodia, fueron llevados a Coruscant, donde serían encarcelados. Windu recibió a Boba tras su llegada, y Boba se disculpó por sus acciones y la destrucción que había causado — aunque juró que nunca perdonaría a Windu por haber matado a su padre. Convirtiéndose en cazarrecompensas
Boba fue encarcelado en Coruscant por sus acciones durante su intento de asesinato. Durante su tiempo en prisión, fue puesto en marcha un plan de la República Galáctica para prevenir un complot de secuestro del Canciller Supremo Sheev Palpatine. Como parte del plan, Obi-Wan Kenobi fingió su muerte y se disfrazó de Rako Hardeen, el sospechoso de haberle matado, y entró en la misma cárcel en la que se encontraba Boba. Kenobi se alió con Moralo Eval, sospechoso de organizar el plan de secuestro, y el cazarrecompensas Cad Bane para escapar de la prisión, con la esperanza de que ambos le condujeran al núcleo de la conspiración. Como parte del intento de escape, Bane pagó y animó a Fett para que se enfrentara a "Hardeen", por lo que Boba reclamó que Hardeen le había robado una recompensa en el pasado. Boba y Kenobi pelearon entre ellos, hasta que Bossk intervino y empezó un alboroto para defender a Boba. El plan de Bane funcionó, y Kenobi acabó logrando detener el complot contra el Canciller Palpatine.
Boba abandonó la prisión poco después y formó un sindicato de cazarrecompensas, usando Tatooine como base de operaciones. Como parte del sindicato, Boba contrató a Bossk, Dengar, C-21 Highsinger y Latts Razzi. Una de las misiones que eligieron emprender tuvo lugar en Quarzite, donde debían proteger un cargamento a bordo de un tren e impedir que fuese robado. Después de que Asajj Ventress, la antigua aprendiz del Conde Dooku que fue traicionada por el Lord Sith y se había convertido en cazarrecompensas, matase a uno de sus compañeros, Oked, Ventress fue contratada en su lugar. El equipo abandonó Tatooine y llegó a una estación espacial en la órbita de Quarzite, donde conocieron a su cliente, el Mayor Rigosso, y recibieron datos específicos de su misión. El grupo debía defender el contenido de un cofre, que iba a ser entregado a Otua Blank, gobernador de Quarzite, mediante un tren, puesto que las características de la atmósfera del planeta impedían la circulación de naves.
El equipo emprendió la misión tras descender a la superficie de Quarzite en un ascensor, y una vez allí subió al tren y se organizó para defender el cofre de sus posibles atacantes. Los atacantes abordaron el tren en pleno trayecto a la fortaleza de Otua Blank, matando a todo el personal de seguridad de Quarzite. Muchos de los cazarrecompensas fueron arrojados fuera del tren. Durante el combate contra los asaltantes, Boba golpeó inadvertidamente el cofre, revelando su contenido: una joven llamada Pluma Sodi, que había sido secuestrada para casarse con Otua Blank en contra de su voluntad. El líder de los asaltantes, Krismo Sodi, era su hermano, que estaba intentando rescatar a su hermana. Ventress y Boba, los únicos que lograron permanecer en el tren, discutieron la situación después de que Pluma hablara con la dathomiriana, que sentía simpatía por la chica: Ventress también había sido expulsada de su hogar contra su voluntad. Boba, por otra parte, pretendía continuar con su misión. Ventress estranguló con la Fuerza a Boba, evitando que completase la misión.
Cuando el tren llegó a su destinación, Ventress entregó el cofre a Blank y exigió su recompensa, marchándose antes de que el gobernante pudiera descubrir el contenido del cofre: un furioso Boba Fett, a quien Ventress había atado, amordazado y metido en el cofre. Ventress liberó a Pluma y la entregó a su hermano, y se reagrupó con los otros cazarrecompensas, entregando a cada uno su parte de la recompensa antes de marcharse por su cuenta.
Creando un sindicato
A pesar de haber sido avergonzado por Asajj Ventress, Boba continuó gestionando un exitoso sindicato de cazarrecompensas establecido en Coruscant y Tatooine. Sin embargo, la historia de Ventress con el equipo siguió estando presente en su memoria. Al final de las Guerras Clon, Quinlan Vos se acercó a Boba en un bar del Nivel 1313 de Coruscant. Vos estaba interesado en encontrar a la antigua aprendiz sith para que le ayudara en un intento de asesinato contra el Conde Dooku, puesto que la Hermana de la Noche había sido la aprendiz del Conde. Boba informó a Vos de que Ventress estaba persiguiendo a un fugitivo volpai llamado Moregi en el planeta Pantora.
Usando la información de Fett, Vos viajó a Pantora, donde comenzó a trabajar con Ventress. Tras realizar diversos trabajos juntos, Vos reveló su verdadera misión a Ventress, quien accedió a entrenarle en los caminos del lado oscuro de la Fuerza. Cuando el intento de Vos fracasó, Ventress acudió a Boba en la Cantina de Chalmun en Tatooine con la esperanza de contratar a su sindicato para rescatar a su compañero convertido en amante. Aunque inicialmente reticentes, Fett y sus cazarrecompensas aceptaron el encargo de Ventress en cuanto ella les ofreció pagarles doscientos cincuenta mil créditos por adelantado. Satisfechos, Boba y sus aliados se unieron a Ventress en su misión de rescatar a Vos. No obstante, Dooku derrotó a Fett y a sus cazarrecompensas sin demasiado esfuerzo y el intento de Ventress por salvar a Vos fracasó. Derrotados pero con vida, Boba y su equipo se retiraron de Serenno.
En los años subsiguientes, Boba se ganó la reputación de ser uno de los cazarrecompensas más mortíferos de la Galaxia. Uno de sus métodos más conocidos era la desintegración de sus adversarios. A medida que su carrera evolucionaba desde los eventos de las Guerras Clon, Boba adoptó los restos de la armadura mandaloriana de su padre, y tomó la posesión de la Esclavo I de nuevo. La armadura de Boba estaba adornada con numerosas trenzas colgando de su hombro, como trofeos de sus presas caídas.
Guerra Civil Galáctica
Durante la Guerra Civil Galáctica, Fett ya se había convertido en un cazarrecompensas al servicio de Jabba el Hutt como uno de sus mercenarios habituales. Su armadura mandaloriana preservó el recuerdo de los guerreros mandalorianos vivo en la Galaxia, después de que muchos de ellos hubieran sido asesinados por el Imperio Galáctico.
Poco antes de la Batalla de Yavin, Boba estuvo presente en Mos Eisley, en Tatooine, donde Jabba confrontó a Han Solo, uno de sus contrabandistas; Solo debía dinero a Jabba tras haberse deshecho de su mercancía de contrabando en cuanto su nave, el Halcón Milenario, fue abordada por soldados del Imperio Galáctico. Solo prometió a Jabba que le pagaría, pero una recompensa había sido ofrecida por el contrabandista. Solo, quien se convirtió en un miembro de la Alianza Para Restaurar la República, acabó no pagando a Jabba, llevando a Boba a intentar capturarle y cobrar una recompensa por él.
No mucho después de la Batalla de Yavin, Boba estuvo presente en el Palacio de Jabba cuando el Señor Oscuro de los Sith Darth Vader acudió a allí bajo las órdenes del Emperador Palpatine, para negociar con el Cártel Hutt la entrega de recursos al Imperio para incrementar su producción. Sin embargo, Vader había llegado un día antes por su cuenta. Jabba ordenó a su corte que le dejara a solas con Vader, y el Lord Sith reveló que necesitaba dos de los mejores cazarrecompensas de Jabba. Jabba y Vader llegaron a un acuerdo, por lo que Jabba le envió a Boba y al wookiee Krrsantan el Negro.
Al final de ese día, Boba y Krrsantan se reunieron con Vader en el desierto tras la reunión con Jabba. Vader trató de asegurarse de si ellos eran los mejores cazarrecompensas de Jabba, y cuando Boba le aseguró que lo eran, Vader les informó de sus misiones: Boba debía capturar a un piloto de la Alianza Rebelde asociado con un hombre llamado Obi-Wan Kenobi, y una nave de contrabando conocida como el Halcón Milenario. El objetivo de Krrsantan era un agente imperial que contaba con el favor del Emperador. Vader especificó a Boba que quería al piloto rebelde vivo, y Boba aseguró a Vader que su voluntad iba a ser cumplida. El Señor Oscuro les instó a empezar a trabajar inmediatamente y se dirigió a un campamento tusken que había masacrado antes.
Siguiendo órdenes de Vader, Boba comenzó su búsqueda de inmediato. Sabía que Han Solo frecuentaba Mos Eisley, por lo que empezó a buscar allí cómplices de Solo. Boba pronto encontró a un grupo de cuatro rodianos y les informó de su búsqueda de Kenobi, a lo que el líder de los rodianos respondió que Kenobi sólo era un "viejo mago loco", que vivía en el Mar de Dunas, y preguntó por qué Boba estaba buscando al mago. Boba apuntó su arma hacia el rodiano, dijo que Kenobi estaba muerto, y que era él quien hacía las preguntas.
Entonces, Boba mató a los rodianos, puesto que eran inútiles para él, y partió en busca de otros que pudieran saber algo útil acerca del chico. Fett pasó a través de un grupo de jawas a los que también mató, e interrogó a una familia de granjeros antes de asesinarlos también. Su búsqueda no fue fructífera, y por consiguiente, Boba se dirigió a la Cantina de Chalmun, el lugar a donde la mayor parte de la chusma y villanos iban a beber.
Boba entró en la cantina, quedándose de pie para ser el centro de atención, y se dirigió a todos los criminales presentes, afirmando que no se iría hasta que alguien le proporcionara el nombre del chico al que estaba buscando. Sin embargo, mientras Boba amenazaba a un ithoriano, alguien situado detrás de él se burló diciendo que el único chico al que había visto, era Boba. El cazarrecompensas exigió saber quién le había insultado, y fue complacido cuando un alienígena con seis brazos y dos metros de altura se acercó a él. Boba rápidamente superó al alienígena, quitándole uno de sus brazos y rompiendo otros tres, con la intención de intimidar a los presentes y obtener información. Boba volvió a exigir saber el nombre del chico que buscaba, pero Wuher, el camarero de la cantina, dijo que nadie conocía al chico; sólo se sabía que Kenobi había estado recientemente en la cantina con el chico. De repente, un joven granjero se giró y corrió hacia la salida, pero Boba soltó un cable con el que atrapó al joven. El joven granjero afirmó que no sabía nada, pero Boba no le creyó, sabiendo que el chico había huido porque poseía información valiosa para él. Boba ató al joven a una mesa y procedió a interrogarle. El chico finalmente se desmoronó y explicó a Boba la historia del chico en Tatooine, y lo más importante, le proporcionó su nombre: Luke Skywalker. El cazarrecompensas supo que el joven decía la verdad y lo liberó, disparándole por la espalda a continuación.
Boba abandonó la cantina, subió a su nave, y se dirigió a la choza de Ben Kenobi en los Eriales de Jundland, donde esperó a que Skywalker apareciera. Un grupo de tuskens estaban saqueando la casa de Kenobi, pero Skywalker y su droide astromecánico pronto llegaron, y Skywalker los ahuyentó con su sable de luz. Boba se acercó a ellos sigilosamente mientras entraban en la choza. Boba lanzó una granada de luz que cegó temporalmente a Skywalker y cortocircuitó a su droide, R2-D2.
Boba avanzó y golpeó a Skywalker en la cabeza con su arma y le ordenó rendirse. Skywalker, sin embargo, golpeó a Boba en el estómago, dándole en la armadura. Como estaba cegado, Skywalker confundió a Boba con un soldado de asalto. Además, Skywalker dedujo que como Boba no le había matado, quien fuese que hubiera contratado al cazarrecompensas le quería con vida, por lo que encendió su sable de luz después de que Boba le advirtiera que no necesitaba poder caminar para ser llevado ante su cliente con vida. Skywalker respondió a Boba que el cazarrecompensas nunca debería haber venido al hogar de Kenobi, y se dispuso a luchar contra Boba a ciegas; los Jedi no necesitaban sus ojos — aunque, tal como Boba le recordó, él no era un Jedi. Skywalker atacó a Boba torpemente, dándole la oportunidad de lanzarle un cable que él esquivó. Skywalker usó el sonido que hacía la armadura de Boba para orientarse, provocando que Boba tropezase con R2-D2.
Luego, el cazarrecompensas cortó a Luke varias veces con unas vibrohojas salidas de su guantelete, haciéndole sangrar. Boba le volvió a ordenar que se rindiera. Skywalker, no obstante, afirmó que Kenobi podía ayudarle incluso tras su muerte, forzando a Boba a dispararle en el hombro. Boba se preparó para volver a disparar cuando Skywalker recitaba un dicho Jedi, y éste desvió el disparo de vuelta a su propietario, que tuvo que lanzarse a un lado. Los dos combatientes comenzaron a empujarse, y Boba empezó a acercar el sable láser de Luke a su cara. Sin embargo, una caja con la inscripción "Para Luke" salió disparada por la sala y golpeó a Boba en la cabeza, dejándolo inconsciente. Skywalker y R2-D2 se sorprendieron, pero abandonaron rápidamente la choza y Tatooine, dejando a Boba con la única opción de explicar lo ocurrido a Lord Vader.
Luego, Boba viajó a bordo de la Esclavo I para reunirse con Vader en un Destructor Estelar, e informó de que el chico había "tenido suerte" y había podido escapar. Vader quedó decepcionado y preguntó a Boba si le había traído algo valioso. Boba le explicó que, por lo menos, había descubierto el nombre del chico: Skywalker. Vader permaneció en silencio un largo tiempo, por lo que Boba se marchó con su trabajo concluido. Sin saberlo, Boba acababa de informar al Señor Oscuro de que tenía un hijo.
La caza de Han Solo
Varios años después, Boba partió en busca de Han Solo para cobrar otra recompensa por él, también ofrecida por Darth Vader. Él estuvo entre los seis cazarrecompensas reunidos a bordo del Ejecutor por Vader. Vader quería usar a Solo, así como a Leia Organa y Chewbacca, como cebo para atraer a Luke Skywalker a una trampa. Boba y los otros cazarrecompensas recibieron permiso para usar todos los métodos necesarios para capturar a los amigos de Skywalker, siempre y cuando los mantuvieran con vida. Boba localizó al Halcón Milenario escondiéndose de la flota imperial en el Sistema Anoat, y siguió a la nave de camino a Ciudad Nube, situada en Bespin. Boba y el Imperio llegaron a allí antes que el Halcón Milenario, lo que permitió a Vader manipular al amigo de Solo y líder de Ciudad Nube, Lando Calrissian, para que le ayudara a capturar a Solo y los demás.
Sin embargo, antes de reunirse con Vader, Boba Fett se enfrentó a IG-88, el cual había puesto un rastreador en todas las naves de los 5 cazarrecompensas, en este duelo, IG-88 perdió y después de desactivarlo, Boba lo envío al horno de Ciudad Nube, en donde se convirtió en chatarra. Boba se preocupó en cuanto supo que Vader quería congelar a Solo en carbonita como prueba para determinar si Skywalker podría sobrevivir a un proceso similar. Vader prometió al cazarrecompensas que sería compensado por la pérdida de una potencial recompensa si Solo moría. Sin embargo, Solo sobrevivió al proceso, y Vader entregó al contrabandista congelado en carbonita a Boba, quien llevó a Solo a la Esclavo I. Fue perseguido por Organa, Calrissian y Chewbacca, quienes querían salvar a Solo de ser llevado ante Jabba el Hutt. Su intento de rescate fracasó, y Boba abandonó Bespin, llevando a Solo al Palacio de Jabba en Tatooine. Sin embargo, mientras llegaba a Tatooine fue emboscado por IG-88B y IG-88D, los cuales no fueron competencia con sus IG-2000 para Boba el cual destruyó a IG-88B y dejo varado durante un tiempo a IG-88D.
Boba permaneció en el Palacio de Jabba el Hut después de haber entregado a Han Solo al Hutt. Mientras tanto, Luke Skywalker, Leia Organa, Chewbacca y Lando Calrissian, habían ideado un plan para rescatar a Solo. Boba estuvo presente mientras el plan era puesto en marcha, y fue testigo de cómo Skywalker y Chewbacca eran capturados por el Hutt, mientras Organa era tomada como esclava y Calrissian se hacía pasar por un guardia. Organa fue, sin embargo, capaz de liberar a Solo de su congelación en carbonita y el contrabandista quedó ciego temporalmente como consecuencia del proceso de congelación. Por orden de Jabba, Skywalker, Solo y Chewbacca fueron llevados al Gran Pozo de Carkoon, donde iban a servir de alimento para el sarlacc — una criatura que vivía en el pozo. Boba acompañó al séquito de Jabba hasta el sarlacc.
Una vez en el Gran Pozo de Carkoon, Skywalker y los demás pusieron su plan en marcha, atacando a los guardias de Jabba — e incluso matando al propio Jabba, que fue estrangulado por Leia Organa. Durante la lucha, Boba se enfrentó a Skywalker, que usó su sable de luz para destruir el bláster de Boba. En el caos subsiguiente, Solo — todavía ciego — golpeó inadvertidamente a Boba, provocando que el cazarrecompensas cayera al pozo del sarlacc.
Apariciones
- Star Wars: Galactic Defense
- Star Wars: Episode II Attack of the Clones
- Star Wars: Episode IV A New Hope (Lanzamiento post-1997)
- The Adventures of Luke Skywalker, Jedi Knight
- Star Wars: Darth Vader 1: Vader
- Star Wars 4: Skywalker Strikes, Part IV
- Star Wars 5: Skywalker Strikes, Part V
- Star Wars: Darth Vader 2: Vader, Part II (Sólo mencionado (a))
- Star Wars: Darth Vader 4: Vader, Part IV (Sólo mencionado (a))
- Star Wars 6: Skywalker Strikes, Part VI
- Star Wars: Darth Vader 6: Vader, Part VI
- Star Wars: Darth Vader 7: Shadows and Secrets, Part I (Aparece en una visión de la Fuerza de Darth Vader)
- Star Wars: Darth Vader 13: Vader Down, Part II (Sólo mencionado (a))
- Star Wars Battlefront
- Star Wars: Episode V The Empire Strikes Back (Primera aparición)
- Use the Force! (Aparece en visión de la Fuerza)
- Moving Target: A Princess Leia Adventure (Sólo mencionado (a))
- Star Wars: Episode VI Return of the Jedi
