Candelaria Piñeiro Viera
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Candelaria Piñeiro Viera. Nació el 17 de octubre de 1946 y falleció el 9 de noviembre de 1997, en el municipio de Bejucal, provincia Mayabeque. Es considerada una personalidad de la educación en el territorio.
Sumario
Síntesis biográfica
Candelaria Piñeiro Viera, nace el 17 de octubre de 1946 en Bejucal – La Habana, actual provincia Mayabeque. Sus padres: Juana de Mata Viera Ramos –obrera- e Higinio Piñeiro Alonso -hombre de “posición”- Sus hermanos:
- Angelina Caridad Fleitas Viera.
- Armando Fleitas Viera.
Creció en un ambiente tranquilo, sus padres mantenían muy buenas relaciones, en su hogar siempre reinó la felicidad y el respeto. En el año 1978 contrae matrimonio con Alberto Lázaro Domínguez Díaz, esposo que la acompaña hasta sus últimos días. La pareja no tuvo hijos, pero asumen a sus sobrinos como hijos propios brindándoles su amor más puro. Aunque en varias ocasiones sale de la provincia para estudiar o trabajar, nunca dejó de convivir en el pueblo que la vio crecer.
Trayectoria estudiantil
En edades tempranas, cursó sus estudios en la escuela primaria parroquial de Bejucal. El 7mo grado lo cursa en la antigua Escuela Primaria Superior “Narciso López” Ya el 8vo y 9no los cursó en la Escuela Secundaria Básica becada “José Manuel Lazo de la Vega” antiguas “Ursulinas” en Miramar. Esta beca fue un estímulo del Comandante en Jefe por haber sido alumna alfabetizadota. Los años del bachillerato los cursa en el preuniversitario de la Habana. En sus primeros años de estudio fue gravemente afectada por una parálisis y fue ingresada en el Hospital Infantil varios meses, este hospital se hallaba situado donde actualmente radica Coppelia
Al comenzar la Secundaria, fue seleccionada para dirigir la UES (Unión de Estudiantes Secundarios), Organización Estudiantil que existía en aquellos momentos en el frente de Cultura; los años posteriores también se mantuvo con cargos importantes en la organización.
Campaña de Alfabetización
En 1961, comienza la Campaña de Alfabetización y la UES se da a la tarea de captar jóvenes para las Brigadas “Conrado Benítez”. Al ser Candelaria dirigente activa de la organización debía dar el ejemplo dando el paso al frente, al cual se enfrenta de inmediato plasmado su compromiso para su incorporación sin pensar que sus padres pudieran oponerse a la actividad producto de la enfermedad tan delicada que había afrontado y que aún el médico no le habían dedo de alta. Como ella era menor de edad, debían ser los padres quienes dieran el autorizo para que la niña participara en la tarea.
Los padres, al saber lo complicado que podía ser la tarea para una niña tan pequeña y enferma, se negaban a su participación, cosa que deprimió mucho a Candelaria la cual pasó varios días muy triste. Su padre al ver tal depresión, acude a hablar con el médico a escondidas de todos en la casa, el cual le dijo que una de las cosas que más me podían afectar era el disgusto.
Luego de reiteradas ocasiones en solicitarle la planilla, Candelaria se la entrega a su padre, pidiéndole que le firme aún con lágrimas en los ojos. Cual fue su sorpresa cuando sin decir nada su papá tomó un bolígrafo de su bolsillo y firmó el tan preciado documento.
El 17 de Abril de 1961, teniendo en cuenta la situación que tenía el país, se realizó un llamado del Organismo estudiantil por la UES, pidiéndole la defensa de la escuela a toda costa.
En horas de la tarde de ese mismo día la escuela estaba llena de trincheras, y se contaba con algunos fusiles para defenderla. Tras dos días de vigilia, el 19 de abril el imperialismo fue vencido en Playa Girón.
En apenas 8 días de aquel suceso, todos los inscritos en la campaña de alfabetización fueron citados para orientar el trabajo en los campos de Cuba. Situados en un lugar llamado Dupont en Varadero. Al tercer día de estar allí, se produjo un desagradable tiroteo, Candelaria se cae causándose una considerable herida, calificada de operación. En ese momento es asistida por varias personas, dentro de ella Alina Sánchez, una famosa soprano cubana, que en ese momento estaba participando por Bejucal ya que su abuela era inspectora de educación en el municipio
En esas condiciones no podía ir para Oriente a alfabetizar, se angustió mucho y al regresar al albergue le cuenta el problema a sus compañeras quienes pidieron ir con ella para donde fuera ubicada, ya que no solo en Oriente hacía falta realizar la actividad de alfabetización, fue entonces que se le fue asignado el municipio de San José de las Lajas y comenzó allí su labor en una casa con tres compañeros, la señora de la casa que se llamaba Manuela, el señor José y su hijo también llamado José.
Transcurrió el tiempo y la emoción más grande de la brigada fue cuando los alumnos de Candelaria le escribieron una Carta a Fidel, y más tarde el señor de la casa le escribió una décima a la adorable maestra.
Cuando regresa de la alfabetización reanuda sus estudios becada; este premio de la continuidad de estudios becados fue un otorgamiento de estímulo que hace el Comandante en Jefe Fidel a los alfabetizadotes.
Recogida de café en zona oriental
En el año 1963, estando en 8vo grado, se hizo el 1er llamado para ir a recoger café a Oriente, al cual se incorporó sin vacilaciones cumpliendo con el llamado de la Revolución; la tarea era por 45 días pero se prolongó la estancia por tres meses pues al encontrarse en plena crisis de Octubre, fueron prohibidos los viajes por temor a un atentado. Fueron momentos muy difíciles, no recibía noticia de sus familiares ni los familiares de ella.
En 9no grado (1964) se incorpora nuevamente a recoger café en Oriente y coincide con el período en el cual ciclón Flora azota a esa provincia, lejos de pasar mucho trabajo, tuvo la posibilidad de ayudar a personas necesitadas que se vieron afectadas gravemente por el ciclón.
Trayectoria laboral
Sus inicios en la esfera educacional fueron como maestra de Educación Física; posteriormente asume un grupo de nivel primario dando clases a niños de primero y segundo grados. Su esfuerzo, entrega en el trabajo, capacitación y autopreparación le permite dar un salto en la educación y es entonces cuando comienza a trabajar en el nivel medio impartiendo la asignatura de Matemática en la secundaria básica de su pueblo natal, Bejucal.
Al iniciarse el movimiento de la escuela secundaria básica en el campo ESBEC, Candelaria brinda 10 años de su vida al trabajo en estas escuelas: “XX Aniversario” y “República Popular de Polonia” ubicadas en el municipio de Quivicán donde realiza la función de secretaria docente y aún con mucha carga de trabajo nunca deja de dar clases pues su objetivo era ayudar y educar a las nuevas generaciones con convicciones sólidas y revolucionarias.
El trabajo en las becas era realmente difícil y como ya no era tan joven, decide regresar a trabajar nuevamente a su pueblo.
En el año 1987 se gradúa como Licenciada en Educación en la especialidad de Matemáticas en el curso para trabajadores, CPT. Esta meta alcanzada fue de gran satisfacción tanto para ella como para la familia que admiraba su entrega por su profesión.
Al volver a trabajar a su pueblo, lo hace como cuadro del municipio de educación, como metodóloga de la asignatura de Matemáticas y posteriormente pasa a ser subdirectora municipal de la enseñanza media, técnica e incluyendo la facultad.
Condecoraciones alcanzadas
- Sello “Educador ejemplar”
- Distintivo por trabajador vanguardia Municipal
- Distintivo por trabajador Vanguardia Provincial
- Distintivo por trabajador Vanguardia Nacional
- Medalla de la Alfabetización.
- Medalla Rafael María de Mendive.
- Medalla por la Educación Cubana.
- Medalla por los 40 años de victoria (FAR)
Muerte
Candelaria Piñeiro Viera muere a causa de una enfermedad pulmonar el 9 de noviembre de 1997. Su cuerpo descansa en el cementerio de Bejucal en la bóveda de la familia Pellón.
Legado
Así surgió para la prosperidad una maestra insigne del pueblo de Bejucal. Desde su magisterio se nos hizo eterna, imprescindible, y si la muerte la hubiera respetado hasta las últimas consecuencias, ahora estaría asesorando a los profesores generales integrales, o impartiendo clases en el Preuniversitario Urbano o haciéndose Máster en Educación. Candelaria Piñeiro no es solamente un nombre de mujer, es sencilla y llanamente una personalidad de la educación bejucaleña. Ella va con nosotros, enseñando, educando con o sin palabras, hasta el mismísimo final.
Fuentes
- Minerva Sewer Menzies y Roberto Chaviano Cabrera. Historiadores del museo municipal de Bejucal
- Expediente laboral de Candelaria Piñeiro Viera. Dirección Municipal de Educación de Bejucal
- Expediente de cuadro de Candelaria Piñeiro Viera. Dirección Municipal de Educación de Bejucal
