Domingo Labrada Rìos
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Domingo Labrada Ríos. Trabajador Azucarero cubano, merecedor de la Orden Cincuenta años de Trabajo, en la Industria del Azúcar otorgada por el Consejo de Estado de la República de Cuba, dedicó medio siglo de su vida a ésta industria, en el "Central Ceiba Hueca", hoy Central Azucarero Enidio Díaz Machado, de la Provincia Granma, donde se destacó por sus valiosos valores y cualidades humanas con sus compañeros de trabajo.
Síntesis biográfica
Domingo Labrada desde muy joven, a la edad de 11 años, comenzó a prestar sus servicios dentro de la Industria Azucarera.Su primera labor en la Industria Azucarera fue la de Trapichero, en el central "San Ramón" pasando más tarde al "Media Luna" hoy Central Azucarero Juan Manuel Márquez, como Maquinista de Centrífuga, luego en el central "Estrada Palma", hoy Central Azucarero Bartolomé Masó, en la Batería de Hornos.
Posteriormente, en "Ceiba Hueca" hoy Central Azucarero Enidio Díaz, montando una caldera y luego vuelve al Central San Ramón, como jefe de Pailería y Maquinador en la Zafra azucarera, pasando más tarde al taller Wilfredo Pagés como Pailero y finaliza como pailero y mantenimiento, en los Talleres Comandante Fajardo.
Este obrero opinaba que antes del triunfo de la Revolución, la Industria Azucarera se desenvolvía en un sistema bochornoso, donde los trabajadores eran explotados y no se les facilitaban las oportunidades de estudio ni superación.
Y con el triunfo de la Revolución, se ha tecnificado la Industria así como el derecho a la superación cultural, técnica y política de la clase obrera, hoy dueña de los medios de producción.
Antes no existía la oportunidad que hoy tienen los trabajadores para el desarrollo de innovaciones.
Vida ejemplar
El ejemplo de este trabajador inspira confianza y reafirma en los revolucionarios el convencimiento de que el trabajo constituye una necesidad vital para el hombre. Para el hombre nuevo que ya surge y se vislumbra y que es al mismo tiempo factor y producto de la nueva sociedad que se construye.
Es por tanto merecedor del mayor estímulo y este artículo que recoge su nombre, sus rostro y una breve semblanza de su vida.
Para este hombre cuyo tesón y constancia se exalta, el reconocimiento del pueblo cubano trabajador y heroico.
Fuentes
- Libro: “Años de trabajo en la industria azucarera” Memorias 1968
