Jesús Sabourín Fornaris
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Jesús Sabourín Fornaris: Poeta y crítico, artista y maestro, nacido en la ciudad del Guacanayabo el 17 de diciembre de 1928
Sumario
Síntesis Biográfica
Concluyó el bachillerato en 1946, desde muy joven mostró su inclinación por las letras, vinculándose a lo más granado de nuestra intelectualidad todavía reunida alrededor de Orto y el Grupo Literario Manzanillo. Su talento fue prontamente reconocido, de lo que buena fe dio esa magnífica empresa cultural, esa, ya para entonces, añeja e invaluable institución que fue Orto.
Para entonces hacía Jesús la tesis de doctorado en Filosofía y Letras en la Universidad de La Habana y, según el testimonio de su hermana Ana María Sabourín, estudió también en la Academia de San Alejandro, siendo el retrato quizá su faceta más destacada como dibujante. Las páginas de la mencionada revista acogieron más de una veintena de artículos suyos dedicados a la crítica y la literatura, la gaceta bibliográfica, las figuras de José Martí y Juan Gualberto Gómez, un cuento, dos traducciones del inglés y hasta una crónica teatral. Entre ellos sobresalieron los que dedicó al cine -en los que recogió sus impresiones sobre las cintas Mañana es demasiado tarde, La Rosa Blanca, dos versiones de Romeo y Julieta, Carmen Jones, Juegos prohibidos-, pues se trató del único momento en que puede hablarse de una crítica cinematográfica en la revista, cuyo ejercicio efectuó con regularidad si se compara con la indiferencia que hasta su llegada había sufrido el séptimo arte, aunque Orto había publicado en el número de julio de 1929 la Carta a Jorge Mañach, de Raúl Roa García, en la que éste se adhería a la condena del cine hablado -hecha por Mañach- atacando al Vitaphone y al Movietone e, incluso, asociando dicho adelanto tecnológico con el “imperialismo fotogénico” de Hollywood que por transitividad comparaba con Wall Street.
Vida laboral
Radicado en Santiago de Cuba, desplegó en la vecina urbe una intensa labor docente, crítica y promocional, amén de romper lanzas contra la dictadura batistiana.
Su ensayo "Juan Gualberto Gómez: símbolo del deber" resultó galardonado en 1954 en un concurso celebrado bajo los auspicios de la Universidad de Oriente, centro docente en el que trabajó como bibliotecario de su histórica Biblioteca General y desde 1961 hasta 1970 como profesor de Literatura Hispanoamericana y cubana.
Fundador de la Galería de Artes Plásticas de Santiago y de su revista, la que, con el mismo nombre, dirigió asistido por personalidades como Daniel Serra Badué, Cary Bonet Rosell, Olga Maidique Patricio, Antonio Ferrer Cabello, René Valdés Cedeño, Nora Riquenes Vives, Miguel A. Botalín Pampín, Zenén Vidaud Candebat, Nieves Garrote Rams y donde colaboraban asiduamente Mirta Aguirre, Nicolás Guillén, José Soler Puig, Electo Silva, Graciela Pogolotti, Raúl Pomares, por sólo citar algunos. En Galería, Sabourín continuó su intensa labor con numerosos ensayos particularmente sobre el séptimo arte -Muerte de un ciclista, Calle mayor, El tren de las tres y diez a Yuma, Siete Samurais, El globo rojo, Esclavo de la avaricia, o El que debe morir-, destinados a los cinéfilos a los que reunió en los cine clubes Galería y Panorama, fundados en compañía de Ariel Griñán Núñez y, al triunfo de la Revolución, en el Cine Club Obrero José Tey. Dicha labor estuvo sustentada por sus conocimientos y sensibilidad, basas indiscutibles de su puesto de consejero de la Cinematografía Experimental de Oriente.
Fungió también como director de las revistas Antígona y la editada por el Departamento de Extensión Universitaria de la Universidad de Oriente -igualmente bajo su tutela-, esta última entre 1961 y 1962.
Colaboró además en Archivo José Martí y Orientación Social. Tales méritos propiciaron su elección como miembro del primer Comité Nacional de la UNEAC en el año 61 y su participación en varios de los congresos celebrados por la organización. Esto no constituyó óbice para su activa colaboración en publicaciones como Sierra Maestra, Del Caribe, El Caserón, Santiago, así como en Revista de la Biblioteca Nacional José Martí, Hoy, Casa de las Américas, La Gaceta de Cuba, Anuario Martiano, La Nueva Gaceta, Revista de Literatura Cubana y África (Portugal).
En la década de los 80, su producción literaria se acrecentó dando a conocer poemarios (Hallazgo del hombre o Elegías combatientes y otros poemas) y ensayos dedicados a temas hispanoamericanos, desde figuras como Lorca hasta Sor Juana Inés de la Cruz y asistió en 1987 al Coloquio Internacional sobre la obra de Nicolás Guillén, celebrado en Burdeos.
Premios
Como ensayista, recibió mención en el concurso Casa de las Américas en 1972, y al año siguiente corrió igual suerte con su producción poética.
Misiones
Convenios de colaboración le hicieron partir a Bulgaria, no sin antes regresar a su Manzanillo, al que dedicó aquella "Elegía manzanillera" en la que cantó así a la patria chica:
"Eres tú y sin embargo estás distinta,/ reconozco y confundo tus lugares, /y siento que se borran como tinta/ extrañamente, las cosas familiares".
Así pudo asistir al centenario Teatro, ya erosionado por el tiempo, cuyos palcos y lunetas habrían de enmudecer pesadamente por tres décadas.
En la capital búlgara, Jesús impartió clases de Literatura Hispanoamericana en la Universidad Kliment Ohridski. Mas no fue un mero profesor, una figurilla de esas que sólo permanecen en el recuerdo de sus alumnos por alguna que otra anécdota.
En aquella tierra lejana fundó su propia familia, al unirse en matrimonio con Margarita Drenska, la que, amén de esposa, colaboró literariamente con él en la traducción del búlgaro de "Epopeya de los olvidados" (1976) de Ivan Vazov y "A los pies del Vitocha" (1979) de P. K. Yavorov.
Muerte
A su deceso, en el 2003, Jesús Eduardo Sabourín Fornaris había dejado una obra mayormente literaria que permite encontrar en él ese carácter inquisidor, febril y apasionado del artista que todo lo escruta, del periodista infatigable, del bardo, del maestro, del cubano amante de su cultura.
Jesús Eduardo Sabourín Fornaris fue uno de esos personajes singulares que dejan la marca imperecedera de su vastísimo acervo desde el universo mítico de la poesía hasta el riguroso trabajo científico que implica el ejercicio de la crítica, o el del análisis de la historia patria.
Bibliografía
- "Juan Gualberto Gómez: símbolo del deber", Ensayo, 1954.
- Amor y combate (Algunas antinomias en José Martí), Ensayo, 1974.
- "Blancos, negros y mulatos" en El siglo de las luces, Ensayo, 1983.
- Hallazgo del hombre, Poesía, 1982.
- Mito y realidad en Federico García Lorca, Crítica y Ensayo, 1984 .
- "Temas y figuras fundacionales de la literatura hispanoamericana", Crítica y Ensayo, Bulgaria, 1985.
- Literatura hispanoamericana, Bulgaria, 1985.
- Introducción a la literatura cubana, Crítica y Ensayo, Bulgaria, 1987.
- Elegías combatientes y otros poemas, 1988.
- Desde lejos y aquí, Crítica y Ensayo, 1991.
- Sor Juana Inés de la Cruz entre el soñar y el callar, Crítica y Ensayo, 1991.
