Melchor Robledo

Melchor Robledo
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Nacimiento1510
Segovia, España
Fallecimiento22 de noviembre de 1586
Zaragoza, España
NacionalidadEspañola
OcupaciónMúsico y compositor


Melchor Robledofue un músico y compositor español. Considerado el iniciador de la escuela aragonesa de música polifónica del siglo XVI.

Enciclopédico

(?, h. 1510 - Zaragoza, 1586). Famoso maestro de capilla, considerado cabeza de la escuela aragonesa de polifonía en el siglo XVI. En 1531 es nombrado maestro de capilla de la iglesia de el Pilar de Zaragoza; sabemos, con tal motivo, su origen, al ser denominado «cantor castellano». Por la normal deficiencia documental de aquel tiempo, ignoramos hasta cuándo permaneció en dicho cargo. En 1549 lo hallamos en el magisterio de la catedral de Tarragona, a la que volverá a incorporarse de nuevo en 1566.

La devastación sufrida en la guerra de la Independencia por los archivos catedralicios tarraconenses impide seguir el desarrollo de la vida y de la actividad de Melchor Robledo en aquella catedral. Posiblemente fue entre las dos fechas citadas cuando Robledo estuvo en Roma; hecho que debió de tener alguna resonancia, ya que ha sido recogido por cronistas e historiadores de la música. Pascual de Mandura dice que Robledo era «famoso y conocido en toda España e Italia»; Fétis, Lavignac y posteriores historiadores dan por segura su estancia en Roma y hasta lo hacen miembro de la Capilla Sixtina. Una intensa búsqueda documental no ha confirmado dichas afirmaciones, si bien su presencia en Roma y su contacto con los ambientes musicales de la misma parecen innegables a partir de dos hechos de singular importancia: una carta del maestro de la Capilla Sixtina dirigida en 1574 probablemente al cardenal secretario de Estado para que el nuncio en España se ponga en contacto con «Robledo, Maestro de Capella in Seragozza», y con Juan Navarro, maestro de Ávila, puesto que ambos son «pratichi» de dicha Capilla Sixtina, con el fin de que procuren tres o cuatro cantores de inmejorable voz para la misma; y el segundo, la inclusión en los códices manuscritos polifónicos del Vaticano de su Misa a 5 (súper voces musicales do la sol do re mi), que lleva la fecha de su copia, el año 1586, así como del motete, también a 5 voces, Simile est regnum. Un himno polifónico dedicado a Santiago Apóstol se conserva en el Liceo Musical de Bolonia (Italia).

Fue en 1569 cuando Melchor Robledo vuelve a Zaragoza por segunda vez, pero en esta ocasión al magisterio de la capilla de música de La Seo, en el que permanecerá hasta su muerte en 1586. Clérigo de la diócesis de Segovia, recibió en este tiempo en Zaragoza órdenes sagrados, sin llegar al presbiterado. Por razón de unos enojosos pleitos sobre capellanías, Robledo mantuvo de nuevo contactos con cantores de la Capilla Papal nombrados procuradores suyos ante los tribunales romanos. Por dos veces fue solicitado para el magisterio de otras catedrales: en 1572 el cabildo de la catedral de Tarragona intentará tenerlo de nuevo como maestro de su capilla, si bien infructuosamente; y en 1580 es el cabildo de Palencia quien lo solicita, teniéndose a tal fin una entrevista en la ciudad de Calahorra, en la que Robledo «se excusó en causas bastantes» para no aceptar.

De suma importancia es su constante labor musical, de la que, con apasionada admiración, va dando cuenta su amigo el cronista Mandura: respecto de la lección pública y diaria de canto de órgano y de contrapunto, dice que fue costumbre de todos los maestros, «y en particular de Melchor Robledo: siendo tan famoso maestro dijo que la haría y así la comenzó a hacer»; de la que saldrían tantos y tan buenos maestros por él formados, entre los que destacaríamos, con toda probabilidad, Sebastián Aguilera de Heredia y Pedro Ruimonte. Otras veces elogia sus obras, que se ejecutaban en tantas solemnidades religiosas y cívico-religiosas cuantas se dieron en aquel siglo en Zaragoza: en las famosas exequias públicas a la muerte de Felipe II, «la música era la famosa de Melchor Robledo, y pareció admirablemente dichas las Vísperas». También reseña cómo en 1598, diez años después de la muerte de Robledo, «se trató que se cantase la Pasión con los dichos que hizo Robledo y las siete palabras, que es cosa admirable, y se consultó con el arzobispo y dijo que le parecía bien; y entendiendo que se había de decir así, vino mucha gente».

Con motivo de su fallecimiento, el 23-XI-1586 se dio un singular reconocimiento de Robledo por parte del cabildo de La Seo, puesto que salió en corporación «a enterrar a Melchor Robledo, que aquello fue cosa particular por ser el personaje tan preeminente, representando la calidad de su persona y los muchos años que había servido a la iglesia»; así como por el hecho de perpetuar el nombre de su maestro al ponerlo a la cabeza de una lista de famosos compositores en sus Constituciones Capitulares, cuando ordena al maestro de su capilla de música «que procure que la música sea de los mejores autores y más graves, como Robledo, Morales, Guerrero, Roxier, Victoria y otros».

Pero tal vez el mejor reconocimiento que se ha hecho de Robledo sean las numerosas copias manuscritas de sus obras esparcidas por numerosos archivos españoles: Zaragoza, Tarazona, Huesca, Alquézar, Calatayud, Daroca, Pamplona, Tudela, Calahorra, Ávila, Toledo, Valladolid, Segovia, Valencia, Barcelona, Montserrat, y posiblemente en algunos otros más; también de Italia, en archivos, como dijimos, de Roma y Bolonia; y en Sudamérica, en el de Puebla de Méjico. Robledo no imprimió obra suya alguna, por eso las hallamos todas manuscritas, con numerosas variantes entre sus diferentes copias, y en muy diversos códices, algunos de épocas algo posteriores ya a su muerte, copias de otros que se fueron deteriorando y estropeando de tanto usarlos: variantes y copias que constituyen el mejor homenaje que Robledo haya podido recibir. Si bien, por el relativo escaso número de obras conocidas del mismo, suponemos que muchas se han perdido, de lo que se tiene comprobación documental.

Obras

Misas: destacamos su Misa a 5, Ávila, Roma, Tarazona, Toledo y Valencia. Motetes: destacan Hoc Corpus, Barcelona, Tarazona y Valladolid. Pasiones: 2, Alquézar. Salves: 2, destacamos la de 6 voces: Alquézar, Puebla de Méjico y Tarazona. Cuatro colecciones de Magnificats: destaca la de Pamplona. 5 himnos: el más conocido, Ave Maris Stella. Quince salmos: tal vez la obra más conocida y divulgada por toda España. Más cánticos, invitatorios, versículos y, por último, dos composiciones en castellano: Rosales, mirtos, plátanos y flores y Recuerde el alma dormida, de las que sólo se conserva la parte del tenor en Valladolid.

Bibliografía

Calahorra Martínez, P.: El polifonista Melchor Robledo y su obra (+ 1586); vol. XXXI-XXXII del Anuario Musical. Id.: La Música en Zaragoza en los siglos XVI y XVII. II. Polifonistas y Ministriles; Institución «Fernando el Católico», Zaragoza, 1978. Casimiri, Raffaele: «Melchior Robledo, maestro a Saragozza. Juan Navarro, maestro ad Ávila nel 1574»; Note d’Archivio per la Storia Musicale, Roma, 1934. Stevenson, Robert: Spanish Cathedral Music in the Golden Age; University of California Press, Berkeley and Los Angeles, 1961.

Ediciones

Motete Hoc Corpus: Elustiza, J. B.-Castrillo, G.: Antología Musical. Siglo XV y XVI; Barcelona, 1933. Motete Hoc Corpus y Magnificat de 3.er tono: Rubio, Samuel: Antología Polifónica Sacra; vol. II, Madrid, 1954. Motete Domine Iesu Christe, Invitatorium Defunctorum, himno Ave Maris Stella y salmo Confitebor: Eslava, Hilarión: Lira-Sacra-Hispana; tomo I, serie 1.ª, siglo XVI, Madrid, 1852. Por la Sección de Música Antigua de la Institución «Fernando el Católico» se tiene adelantada la preparación de la Opera Omnia de Melchor Robledo.

Grabaciones

Motete Hoc Corpus: Coral Sant Jordi (CID 263.617 30, año 1957). Magnificat de sexto tono: Coros de Radio Nacional de España, Polifonía Mariana del Siglo del Oro Español (DPC, IDLC-353). Magnificat de tercer tono: Quartet Polifònic de Barcelona, Hispaniae Musica, Archiv Produktion (n.º 3, 198, 454).

Fuentes