Mi tío el empleado (novela de 1887)
|
Mi tío el empleado. Novela de indagación sobre la condición humana, una advertencia para quienes se someten a las recurrentes diásporas.
Sinopsis
Aparecida originalmente en dos volúmenes, en 1887, en Barcelona, por la Imprenta de Luis Tasso, esta narración ha contado, en Cuba, desde 1960, con varias entregas a cargo de diversos sellos editoriales. Ahora, Mi tío el empleado (Editorial Letras Cubanas, 424 pp) ha vuelto a ser publicada, acompañada del prólogo y las notas de la investigadora y ensayista Cira Romero.
La historia contada es, en apariencia, sencilla. Un pobre inmigrante español, Vicente Cuevas, acompañado de su sobrino Manuel, llega a La Habana, en el bergantín Tolosa, en los primeros años de la década del setenta del siglo XIX, con el propósito de iniciar en Cuba una nueva vida. Del día a la noche, en meteórica carrera, este hombre se convierte en el acaudalado conde Coveo.
Auténtico fresco del enriquecimiento ilícito, el coecho, el robo y los negocios turbios, que son un vívido y nítido reflejo de los males que aquejaban la vida colonial cubana en el siglo XIX. Más, también, un interesante acercamiento al interior del hombre, a sus reflexiones y pensamientos, a los complejos y contradictorios entramados de la propia existencia humana.
Nueva edición
Esta nueva edición de Mi tío el empleado se complementa y enriquece con una selección de textos que, en el transcurso del tiempo, han valorado el real alcance y dimensión de esta novela. Son ensayos, artículos, comentarios, que firman, entre otros, José Martí, Manuel de la Cruz, José Lezama Lima, Cintio Vitier, Reynaldo González, Lisandro Otero, Rogelio Rodríguez Coronel y Adis Barrio Tosar, Ernesto Aguero (Nuevos críticos cubanos)
Datos del autor
Ramón Meza Suárez Inclán (1861 – 1911). Nació en La Habana en el seno de una familia burguesa. Muy joven alcanzó el título de Licenciado en Derecho Civil y Canónico y Doctor en Filosofía y Letras, títulos ambos alcanzados en la Universidad de la Habana, pero su verdadera vocación fue cultivar las letras y el magisterio.
Colaboró con las más prestigiosas publicaciones periódicas de su tiempo, y entre otras responsabilidades, fue secretario de la Sociedad Económica de Amigos del País de La Habana.
Publicó entre otras obras:
- El duelo de mi vecino (1884)
- Flores y calabazas (1886)
- Carmela (1887)
- Don Aniceto el tendero (1889)
- Últimas páginas (1891)
- Una sesión de hipnotismo, comedia (1891)
- Julián del Casal, estudio biográfico (1910)
Además de artículos periodísticos históricos y crónicas de viajes.
Fuentes
- Portal de Literatura Cubana
- Mi tío el empleado (2011/03/30)
- http://www.saber.ula.ve/bitstream/123456789/18985/2/dossier8.pdf
- Aguero, Ernesto. Nuevos críticos cubanos. Editorial Letras Cubanas, 1991.