Nilutamida

Nilutamida
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Nilutamida. Se usa después de la cirugía para tratar el cáncer de próstata. Pertenece a una clase de medicamentos llamados antiandrógenos. Actúa al bloquear el efecto del andrógeno (una hormona masculina) para detener el crecimiento y la diseminación de las células cancerosas.

Uso del medicamento

Se presenta en forma de tabletas para administrarse por vía oral. Por lo general se toma una vez al día, con o sin alimentos. Tomar la nilutamida más o menos a la misma hora todos los días. Siga cuidadosamente las instrucciones de la receta y pídale a su médico o a su farmacéutico que le explique cualquier cosa que no entienda. Tome la nilutamida según lo indicado. No aumente ni disminuya la dosis, ni la tome con más frecuencia que la indicada por su médico.

Debe empezar a tomar la nilutamida el mismo día o un día después de la cirugía. Después de aproximadamente 30 días de tratamiento, la duración del tratamiento dependerá de qué tan bien responda su organismo a la nilutamida. Siga tomando la nilutamida aunque se sienta bien. No deje de tomar la nilutamida sin consultar a su médico.

Cómo actúa este fármaco

Las hormonas masculinas (andrógenos, principalmente la testosterona) que circulan en el cuerpo pueden estimular el crecimiento del cáncer de próstata. En un hombre con cáncer de próstata, reducir la cantidad de estas hormonas puede ayudar a combatir la enfermedad. Esto es lo que con frecuencia se denomina "terapia hormonal".

Las hormonas son sustancias químicas producidas por las glándulas del cuerpo, que ingresan al torrente sanguíneo y provocan efectos en otros tejidos. Por ejemplo, la hormona testosterona se fabrica en los testículos y es responsable de las características masculinas como la voz grave y la mayor cantidad de vello corporal. El uso de la terapia hormonal para tratar el cáncer se basa en la observación de que en la superficie de algunas células tumorales se encuentran receptores de hormonas específicas necesarias para el crecimiento celular. La terapia hormonal puede funcionar haciendo que se detenga la producción de una determinada hormona, bloqueando los receptores de la hormona o sustituyendo a la hormona activa con agentes químicamente similares que no pueden ser utilizados por la célula tumoral. Los diferentes tipos de terapia hormonal se clasifican de acuerdo con su función o el tipo de hormona sobre la que actúan.

La nilutamida se encuentra clasificada como un antiandrógeno. Los antiandrógenos son substancias que contrarrestan los efectos de la testosterona. El cáncer de próstata depende de la hormona masculina testosterona para su crecimiento. Si se reduce la cantidad de testosterona, es posible reducir la actividad o el tamaño del cáncer. Por lo general, la nilutamida se administra inmediatamente después de una orquiectomía (extirpación quirúrgica de los testículos).

Los antiandrógenos normalmente se administran junto con agonistas de la LHRH (hormona liberadora de hormona luteinizante). Los agonistas de la LHRH ordenan a la glándula pituitaria ubicada en el cerebro que deje de producir la hormona luteinizante, que (en los hombres) estimula a los testículos a liberar testosterona y (en las mujeres) estimula a los ovarios a liberar estrógeno. El fármaco no tiene un efecto directo sobre el cáncer, sólo en los testículos y ovarios. La falta de testosterona (en los hombres) y de estrógeno (en las mujeres) interfiere en la estimulación del crecimiento celular en las células cancerosas que dependen de la testosterona o del estrógeno.

Efectos secundarios

  • Sofocos
  • Aumento del tamaño de las mamas (ginecomastia)
  • Dolor de las mamas
  • Pérdida del apetito sexual (disminución de la libido)
  • Secreción de los pezones (galactorrea)
  • Incapacidad para lograr o mantener una erección (impotencia)
  • Este medicamento puede hacer que sus ojos tengan dificultades para adaptarse a la oscuridad. Esto por lo general ocurre cuando se pasa de un área iluminada a una que está en penumbras.

Efectos secundarios que no requieren atención médica

  • Cefaleas, mareos, dolor, debilidad e hinchazón son síntomas poco frecuentes.
  • Náuseas
  • Poco apetito
  • Estreñimiento
  • Diarrea
  • Incremento de los valores en los análisis de sangre que miden la función hepática. Estos valores vuelven a ser normales cuando se interrumpe el tratamiento.
  • Dificultad para conciliar el sueño (insomnio)
  • Dolor de cabeza (cefalea)

Fuentes