Panteón de la Familia Falla y Bonet

Panteón de la Familia Falla y Bonet
Información sobre la plantilla
Obra Arquitectónica  |  (Monumento funerario)
Panteonfallabonet.jpg
Exterior del Panteón
Descripción
Tipo:Monumento funerario
Localización:Cementerio de Colón, La Habana, Bandera de Cuba Cuba
Uso inicial:Enterramiento de la familia Falla-Bonet
Uso actual:Patrimonio Funerario
Término:1935
Otros datos
Arquitecto(s):Mariano Benlliure

El Panteón de la Familia Falla y Bonet está ubicado en el Cementerio de Colón. Es el sepulcro que guarda los restos de la acaudalada familia Falla-Bonet, el cual se encuentra ubicado dentro del campo santo de la capital cubana. Es una de las mayores obras artísticas dentro del campo funerario.


Ubicación

En la Avenida Cristóbal Colón, justo al final de la amplia avenida entre E y G, en una zona de monumentos excelsos, se encuentra un sepulcro considerado entre los de mayor excelencia artística. El famoso escultor español Mariano Benlliure, complació a la acaudalada familia con una pirámide trunca de granito gris pulido, sobre la cual descuella una realista escultura de bronce representando la ascensión de Cristo; además de otros elementos en derredor que magnifican el conjunto. El sepulcro que guarda los restos de la encumbrada familia Falla-Bonet, se encuentra ubicado en privilegiada locación dentro del campo santo, en sus predios quedó construido el año de 1935 y se considera uno de los de mayor excelencia artística dentro del Cementerio de Colón. Se reconoce a la familia Falla-Bonet, una de las más acaudaladas de Cuba en las primeras décadas del pasado Siglo XX; sus componentes eligieron la forma piramidal para el reposo eterno, siendo este el segundo exponente de su tipo en la necrópolis. En este caso debió su autoría al famoso escultor español Mariano Benlliure. El monumento se trabajó en granito gris pulido, en su parte superior, que se muestra trunca, se colocó una magistral escultura de bronce representando a Cristo en ascensión, impresión que se acentúa al tener los pies separados de la base de la escultura. Se ha destacado por diferentes autores el realismo de la pieza al reseñar el tratamiento del rostro, la ropa y las heridas provocadas por el martirio. En la puerta de bronce del monumento, se talló a relieve la figura de cuatro hombres que cargan un pesado ataúd; dos esculturas femeninas que flanquean el acceso, se presentan contemplando la escena funeraria. Culmina el conjunto con una gran cruz latina que decora la parte trasera del sepulcro. En el centro de la cruz, también de granito, se situó una pequeña claraboya, para dotar de luz al interior.


Fuente