Patricia Villegas

Patricia Villegas
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Presidenta de teleSUR
Nombre realPatricia Villegas Marín
NacimientoCali, Bandera de Colombia
ProgramasteleSur
MedioTV

Patricia Villegas. Colombiana de nacimiento, se graduó en la Universidad del Valle y llegó a Caracas para trabajar en el canal que hoy dirige, creado por el Comandante Hugo Chávez en 2005 con el apoyo de Argentina, Bolivia, Cuba, Ecuador, Nicaragua y Venezuela. Comenzó como presentadora de noticias; y en enero de 2011 el entonces ministro del Poder Popular para la Comunicación e Información (Minci) de Venezuela, Andrés Izarra, la designó como presidenta de La Nueva Televisión del Sur, Telesur.

Síntesis biográfica

Patricia Villegas nació en Colombia, donde vivió gran parte de su vida. Ella creció en la ciudad de Cali y continúa teniendo familia allí.

Después de la escuela secundaria se matriculó en la Universidad del Valle. Mientras estuvo allí, ella recibió su licenciatura en periodismo con la intención de convertirse en periodista.

Después de graduarse, se mudó a Caracas para formar parte de Telesur en el 2005, en el momento de su inauguración. Empezó como presentadora de noticias, y lo fue hasta que llegó a ser la directora de información del canal y quien sustituyó en el cargo a Andrés Izarra. En el 2011, la nombraron presidenta del canal y ha ocupado el cargo desde entonces.

Gran parte de su trabajo como periodista junto con sus deberes como presidenta ha sido garantizar que la cobertura de noticias de Telesur sea original y se haga de manera responsable.

Patricia se define como «una mujer latinoamericana y caribeña que, además, tomó la decisión de ser madre, de tener una pareja, de conseguir una familia», algo que, en su entender, genera «enormes desafíos». Ella se siente «una mujer de esta época, de este tiempo, en lucha, en resistencia, cansada todo el tiempo, las mujeres estamos todo el tiempo pidiéndole a la vida más horas, pero logrando hacer lo que también hicieron nuestras antepasadas, o sea, combinar nuestra razón de ser, nuestra lucha, con nuestras familias y con nosotras mismas».

Ella llama a sus congéneres a «estar en guardia, a estar en la primera fila de combate. El mundo está ante una posibilidad enorme de abismo, y tenemos que ser nosotras —con nuestro amor, con esa capacidad que tenemos de congregar y desafiar a la naturaleza—, las que podamos cambiar el ritmo y el rumbo de la historia».

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