Miguel Marcelino Boix y Moliner
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Datos biográficos
Nació en Cuevas de Vinromá (Castellón) en 1636. Estudió medicina en la Universidad de Alcalá y, tras obtener el grado de licenciado, se trasladó a Madrid con la finalidad de completar su formación junto a los cirujanos mayores del Hospital General. Recibió muchas críticas en los ambientes profesionales por ejercer tanto la medicina como la cirugía, cuya cátedra de Alcalá obtuvo tras varias oposiciones y recursos legales. El galenismo intransigente que imperaba entonces en dicha Universidad resultó incompatible con sus ideas renovadoras, por lo que en 1693 se trasladó a Vallecas y tres años más tarde a Madrid. Se integró plenamente en los círculos de novatores de la Corte y, a través de éstos, con los de Sevilla, lo que explica que fuera uno de los tres "socios fundadores" no sevillanos de la Regia Sociedad de Medicina, junto a dos figuras de significación tan inequívoca como Juan de Cabriada y Diego Mateo Zapata.
El primer libro de Boix, Hippocrates defendido (1711), es una dura crítica del galenismo desde un hipocratismo renovado. Boix consideraba que la interpretación tradicional de los textos hipocráticos estaba equivocada a causa de la "mala fe" de Galeno, quien en sus comentarios "toma al pobre viejo (Hipócrates) y le arrastra de narices para que diga lo que él quisiere". La postura del médico valenciano consistía básicamente en un empirismo que destacaba la importancia de las observaciones clínicas como fundamento de toda elaboración teórica, con total oposición a cualquier sistema cerrado. Muy revelador de las fuentes en las que apoyaba este planteamiento es que encabezara su libro con citas hipocráticas, de Bacon y de Sydenham. Por otra parte, Boix propugnaba en la práctica el abstencionismo terapéutico, criticando con especial dureza los tratamientos que, en su opinión, suponían "desarmar a la Naturaleza". Dirigió preferentemente sus ataques al abuso de las sangrías y las purgas por parte de los galenistas, pero los extendió también a los remedios medicamentosos, lo que hizo que entre sus numerosos contradictores no solamente figurasen seguidores de la medicina tradicional, sino un novator como Félix Palacios, principal iatroquímico español en el área de la farmacia.
En 1716, Boix reiteró sus ideas en un nuevo libro que tituló Hipocrates aclarado y sistema de Galeno impugnado. Al final del mismo incluyó seis cartas con opiniones favorables acerca de su obra anterior redactadas por científicos franceses, uno de los cuales era Fontenelle, el célebre secretario perpetuo de la Academia de Ciencias, de París. Dos de las "censuras" o prólogos fueron también de personalidades muy significativas: Salvador Leonardo de Flores, el más importante de los novatores sevillanos fundadores de la Regia Sociedad, y Martín Martínez. Este último afirmó que:Muerte
Murió en el año 1722, a los 86 años de edad.