Joaquín Nicolás Aramburu

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Joaquín Nicolás Aramburu Torres
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Escritor y periodista
NombreJosé Joaquín Nicolas Aramburu y Torres
Nacimiento10 de septiembre de 1855
Guanajay, Pinar del Río, Bandera de Cuba Cuba
Fallecimiento14 de septiembre de 1923
Guanajay, Pinar del Río, Bandera de Cuba Cuba
Causa de la muerteBronconeumonía
ResidenciaCalle Aramburu Nº 10, Guanajay.
Nacionalidadcubana
Ciudadaníacubana
OcupaciónEscritor, periodista.
CónyugeSimona Cecilia América Díaz
HijosRogelia, Ángela María Piedad, María Amparo, Joaquín María, María de la Concepción, María Guillermina Oronsia, Rosa María, América Ana, Consuelo.
PadresMartín Aramburu Ortega, María Regla Nazaria Torres Bitón.
FamiliaresÚrsula Hilariona, hermana.
Joaquín Nicolés Aramburu y Torres. Ilustre patriota. Periodista y escritor prolífico, colaboró en mútiples publicaciones de su época y fundó varios periódicos.

Síntesis biográfica

Nacimiento

Nació en la calle San José Nº 61 (actual avenida 65) del término municipal de Guanajay, entonces perteneciente a la provincia de Pinar del Río. El 3 de octubre del propio año fue bautizado en la iglesia parroquial San Hilarión Abad con el nombre de José Joaquín Nicolás Aramburu y Torres.
Casa natal.

Niñez y juventud

Cursó la primera enseñanza en la escuela municipal. A los nueve años comienza a publicar a través de trabajos anónimos que envía a los periódicos locales. Se hizo maestro de azúcar. Trabajó como mayordomo, enfermero, empleado de comercio, panadero y lector de las escogidas de tabaco. Llegó a ocupar el cargo de escribiente y delegado del Banco Español de Guanajay.

Vida familiar

Hasta nuestros días, continúa siendo el Estudio crítico - biográfico del pedagogo e historiador Enrique Díaz Ortega el referente más aceptado sobre la vida y obra de Joaquín Nicolás Aramburu. Sin embargo, la obra de referencia aborda importantes matices sobre el más fecundo de los intelectuales guanajayenses, apreciándose pocos elementos que permitan conocer a fondo su vida personal y familiar.
Archivo:Joaquin Nicolas Aramburu. 1893.JPG
Joaquín Nicolás Aramburu. 1893

El 1 de marzo de 1880 contrajo matrimonio con Simona Cecilia América Díaz, unión de la que resultaron diez hijos, de los cuales siete le sobrevivieron, y 22 nietos. Tras acontecer el fallecimiento de su esposa, el 2 de mayo de 1916, contrae nuevas nupcias, con la Sra. Ángela Valdés, el 19 de septiembre del propio año, unión de la que no se obtuvo descendencia.

Padres y hermana

Poco se conoce sobre los padres de Aramburu. Su madre, María Regla Nazaria Torres Bitón falleció el 21 de octubre de 1912, a la edad de 76 años, mientras que su padre, Martín Aramburu Ortega, culminó sus días a las cinco de la tarde del 24 de enero de 1916 a la edad de 85 años. Su hermana Úrsula Hilariona nació el 21 de octubre de 1860 y falleció a las seis de la tarde del 29 de mayo de 1891 como resultado de cirrosis hepática hipertrófica

Hijos

  • Rogelia. Primera de las hijas de Aramburu. Aunque no ha sido localizada su partida bautismal, se conoce que nació en 1882. Falleció el 21 de abril de 1894, a los doce años de edad, como resultado de disentería gangrenosa aguda.
  • Joaquín María. Nació en Guanajay el 22 de noviembre de 1888. Entre sus obras más destacadas se encuentra el poeta homenaje Eidelon, dedicado a la memoria de su padre.
  • María de la Concepción. El 12 de junio de 1916 contrajo matrimonio con Ernesto Álvaro Miguel Rodríguez.
  • María Guillermina Oronsia. Nació en Guanajay el 25 de junio de 1894. Fue bautizada el 17 de diciembre del propio año, obrando como padrino Vicente Santo Tomás y Vicioso; amigo personal de Aramburu y miembro de la logia Luz de Occidente, desempeñando igual rol el 10 de julio de 1914 cuando Guillermina contrajo matrimonio con Armando Valdés, natural de Los Palacios y de 30 años de edad. Fue creadora numerosos textos de las piezas interpretadas por María Teresa Vera, iniciadora de la trova femenina en Cuba, encontrándose entre sus obras los boleros – sones Dime que me amas (1937) y Solo pienso en ti (1942), los boleros No me sabes querer (1935), Porque me siento triste (1935), Yo quiero que me quieras (1935), No puedo amarte ya (1934) y No puedes comprender (1930). La habanera Veinte años, escrita en 1935, resultó la más hermosa de sus creaciones, abrazada a una sensible historia de amor y desilusión. No fue hasta muchos años después de la muerte de Guillermina en Nueva York, que la entrañable amiga de la infancia reveló las circunstancias que dieron origen a la habanera que hasta nuestros días se considera joya de la trova cubana, interpretada en reconocidos escenarios nacionales y foráneos en la voz de reconocidas figuras de la música como Omara Portuondo, Compay Segundo y Barbarito Diez.
  • Rosa María. Nació el 15 de octubre de 1895. Contrajo matrimonio el [[15 de septiembre de 1915 con el Sr. Alfredo Bartolomé Presas y García.
  • América Ana. Su partida bautismal tampoco ha sido localizada en los archivos de la iglesia San Hilarión Abad de Guanajay. Se desempeñó como Maestra pública a comienzos del período republicano.
  • Consuelo. Laboró como enumeradora del Barrio Sur de Guanajay durante el Censo de 1919. Su Hija, Consuelito Miranda Aramburu, desde temprana edad mostró dones en el piano e instrumentos de cuerda.

Trayectoria literaria

Comenzó a trabajar en La Crónica y El Entusiasta. Más tarde aparecieron trabajos suyos en La Lealtad, El Criollo y La Luz. A fines de septiembre de 1887 asume la dirección del periódico la Luz, primer periódico redactado casi en su totalidad por él y en 1890 publica su primer libro.

Fundó El Occidente y colaboró en El Eco, La Alborada, El Heraldo, La Novela Cubana (La Habana, 1913-1916), Primavera. Revista decenal científica literaria ilustrada, El Vigilante, Revista Occidente Pedagógico, Revista Los Trece, Revista Osiris, La Fraternidad, La Escoba, Revista Occidente, etc. Aparece como colaborador en La Opinión Ilustrada, Revista Mensual de Arte y Literatura. (La Habana, 1912)

Fotografía tomada en 1921.
Portada de la revista Los Trece, en la que se publicaron numerosos artículos de Aramburu

Durante los primeros años de la República dio conferencias en las escuelas de verano para maestros. En el Diario de la Marina tuvo a su cargo durante casi veinte años, hasta 1923, la sección Baturrillosa muy renombrada, además de sus artículos, por la unidad cubano-española y en defensa de la niñez. En La Habana colaboró también en El Triunfo y El Comercio. Fue miembro de honor de numerosas instituciones, entre ellas la Real Academia de Galicia. Algunas de sus obras sobre la masonería vieron varias ediciones.

Fue autonomista primero y luego separatista, se vio procesado por sus ideas políticas y aunque no sufrió prisión fue obligado a trasladarse a La Habana. Al producirse la intervención norteamericana ocupó el cargo de Secretario de la Junta de Educación de Guanajay.

Bisemanario El Occidente

Vida masónica

El 3 de febrero de 1886 Pedro Néstor Pequeño y Rubio constituye en Guanajay la logia masónica Hijos de Minerva bajo la supervisión del Serenísimo Gran Oriente de España y su Gran Logia Departamental para Cuba y Puerto Rico, encontrándose además entre los fundadores el destacado escritor guanajayense [[Vicente Silveira Arjona.

A mediados de ese año, a pesar del crecimiento que mostraba la logia, se gestó en su seno todo un panorama de contradicciones con origen en las labores en favor de España llevadas a cabo por Pedro Néstor Pequeño, así como por sus acciones en contra de la propia masonería cubana; allanándose el camino para que el 13 de enero de 1887 los miembros acordaran solicitar a la Gran Logia de Colón é Isla de Cuba se les admitiera entre las logias constituyentes con el nombre de Luz de Occidente, quedando “… formalmente consagrada, constituida é instalada (…) como logia regular de Libres y aceptados Masones” a las siete de la noche del día 29.

Fue en Luz de Occidente, entonces única logia masónica existente en Pinar del Río, donde se inició Aramburu el 9 de febrero de 1888. El 8 de marzo del propio año alcanza el grado de Compañero y el 22 de marzo es exaltado a Maestro Masón.

Acto por el centenario del natalicio de Aramburu. Logia Luz de Occidente. 1955

Una de sus primeras acciones como miembros de la Institución masónica fue promover desde la prensa la inscripción de la logia guanajayense en el Registro de Asociaciones de la antigua provincia pinareña, lo cual se materializó el 8 de noviembre de 1888, resultando en el reconocimiento de la logia como institución civil por las autoridades españolas, otorgándole además personalidad jurídica.

En 1889 se desempeña como corresponsal del periódico Paz y Concordia, órgano oficial de una logia de igual nombre que se estableció en la capital pinareña bajo la dirección del galeno y patriota José Francisco Solano Ramo y Delgado; el mismo que junto a Fermín Valdés Domínguez guiara a José Martí para su ingreso en la masonería durante sus años de exilio en España.

En marzo de 1894, a propuesta de José Fernández Pellón, entonces Gran Secretario, Luz de Occidente acuerdan ceder los derechos de edición que guardaba sobre las Liturgias de Aramburu, los cuales hanservido a la actual Gran Logia de Cuba de A. L. y A. M. para publicar cientos de miles de ejemplares de las mismas durante sus más de cien años de labor ininterrumpida.

Muerte

Cuenta René Valdés Acosta en su artículo El Aramburu que yo conocí, que al Hijo de Guanajay “Le sorprendió la muerte redactando uno de sus inimitables Baturrillos”.

Esta referencia da la impresión de haber fallecido el periodista de forma instantánea, mas ello se aleja profundamente de la realidad. Cierto es que mientras escribía en su despacho el [[8 de septiembre para el Diario de la Marina sufrió un ataque cerebral, sobreviviendo a tan fatídico acontecimiento para iniciar penosa agonía que se extendió por casi una semana.

Panteón de la familia Aramburu.

Desde hacía años su salud había comenzado a resentirse. Las secuelas de una vida física y emocionalmente agitada ya se mostraban para 1921, lo que confirma mientras era entrevistado por el periodista Antonio García Saavedra, al declarar: no haber “…probado un bocado en todo el día por sentirse, lo que nunca, mal del estómago”. Sin dudas lo avanzado de su edad, la muerte de los padres por causas similares y el gusto por el tabaco; fueron factores definidos que bien pudieron propiciar la aparición de la enfermedad cerebro vascular.

Entre el 9 y 12 de septiembre, su estado médico se fue agravando dramáticamente hasta que en la mañana del 13 inició un período de veinte horas de completa inconsciencia, apagándosele la vida en la madrugada del día 14, como consecuencia de una Bronconeumonía. Este cuadro respiratorio hasta nuestros días es frecuente en personas de la tercera edad que por situaciones diversas de salud se ven obligados a la postración. Respecto a la hora del fallecimiento existen ciertas polémicas: Aurelio Miranda cita las cinco menos cuarto de la mañana como la hora final, mientras, el Acta Nº 845 de enterramiento, plasmada en el Libro Nº 21 de la iglesia parroquial, marca las seis, según certificación oficial expedida al Párroco local. El Diario de la Marina también señala las cuatro y cuarenta y cinco como la hora de deceso.

En su edición de la tarde del propio día 14, el Diario de la Marina publicó lo que quizás sea una de las descripciones más completas del ambiente reinante en la Villa: “Guanajay se ha conmovido ante la pérdida de su ilustre hijo y en todos los rostros se refleja la pena inmensa que a todos causa la muerte de Aramburu”.

Se levantó una capilla ardiente en la sala de la que hasta entonces fuera su residencia, situándose el féretro hacia la pared este, colocándose alrededor seis cirios y encima flores del jardín ubicado en el patio y que fueron cultivadas por las manos del propio Aramburu. Entre la sala y el despacho se distribuyeron los arreglos florales en nombre de numerosas Instituciones civiles, gubernamentales y pueblo en general.

Las expresiones de duelo no se hicieron esperar, declarándose luto local por disposición del alcalde municipal, Sr. Martín Mora Díaz. Mientras, la Colonia Española y el Centro Progresista de Guanajay, izaron las Banderas a media asta y por su parte la Cámara de Comercio municipal acordó en sesión extraordinaria abril el día 14 una sola puerta de los establecimientos comerciales y permanecer cerrados al siguiente día hasta después del sepelio.

Al amanecer del 15 comenzaron a llegar a la ciudad desde la Capital y poblaciones vecinas, representantes de numerosas Instituciones, personalidades de la época y pueblo en general; congregándose frente a la casa. Cerca de las 10 de la mañana se organizó la comitiva funeraria, siendo montada la última guardia de honor por los representantes del Centro Gallego y la Academia Gallega de La Habana.

Ruta del sepelio

Adoptado entre los presentes el acuerdo de no emplear la carrosa fúnebre para el traslado y llevar en hombros el sarcófago como último tributo, fue elevado el ataúd por nueve amigos personales, entre los que se encontraba el destacado abogado y masón local Dr. Luis Manuel Núñez Álvarez. Estando presidido el cortejo por la policía, seguido por la banda de música del Reformatorio, alumnos del Colegio Luz Caballero, el clero, féretro, coronas, familiares, autoridades locales, sociedades y el pueblo; tomó la calle Aramburu (hoy avenida 63) hasta el Parque Valdés Cinta y luego a la logia Luz de Occidente donde una comisión compuesta por los Sres. Eladio Marrero Arocha, Estanislao de Armas Borges, Juan Alonso Fernández y José Traviesas Calvo esperaba para depositar sobre el ataúd una rama de acacia, símbolo entre los masones de la inmortalidad del alma, y el mandil masónico que usara el finado. Continuó el cortejo hasta el Cementerio por la calle Maceo (hoy calle 80).

Ya en el campo santo, el féretro fue colocado a los pies del panteón, se dedicaron oraciones y le fue dada sepultura mientras he hacía sonar la campanita de la capilla. Junto con los restos mortales de Aramburu fueron colocadas urnas cinerarias de sus padres y de la primera esposa. El Dr. Rafael María Angulo, hizo en nombre del Diario de la Marina un magnífico elogio, no usando nadie la palabra después de su elocuente mensaje.

Honras fúnebres masónicas

El domingo 28 de octubre de 1923, a las tres de la tarde, fue celebrada en el templo de la logia Luz de Occidente una sesión fúnebre en honor a Joaquín Nicolás Aramburu, donde se reunieron renombradas personalidades de la época: Aurelio Miranda y Erasmo Regüeiferos, altos funcionarios de la Gran Logia de la Isla de Cuba, el historiador Emeterio Santovenia, entre otros que en esencia colmaron el local. También se encontraban presentes algunos familiares.

En dicha ocasión el destacado paisajista y retratista Matancero Esteban Valderrama obsequió a la Logia un retrato al óleo del homenajeado, siendo colocado en la antesala del templo, lugar este donde funcionaba una escuela pública y gratuita. En el mismo año se colocó a la derecha de la pintura otro óleo en homenaje al Apóstol de nuestra Independencia.

La bóveda

En la actualidad se puede apreciar en la calle central del Cementerio municipal de Guanajay, bajo deplorable estado de abandono, una bóveda de mármol blanco e incrustaciones en bronce, cuyo frente dice: Joaquín N. Aramburu (18551923). Se podría concluir que allí reposan los restos del más Ilustre Hijo de la Atenas de Occidente, sin embargo, según expediente de solicitud de propiedad tramitada en favor de Guillermina Aramburu]], y que obra en los archivos del Obispado de Pinar del Río, la citada bóveda fue construida a partir de marzo de 1928.

Podrá apreciarse que entre el fallecimiento en 1923 y la construcción de la bóveda transcurrieron cerca de cuatro años, período en el cual no se tienen noticias de la ubicación exacta del primer panteón de la familia Aramburu, así como si este fue sustituido por el actual sepulcro. También se desconoce quién es portador actualmente del mencionado título de propiedad, en caso de que aún exista.

Referencias

Fuentes

  • Iglesia Parroquial San Hilarion Abad de Guanajay. Diócesis de Pinar del Río. Libros de bautismos y enterramientos.
  • Logia Luz de Occidente. Guanajay, Gran Logia de Cuba de Antiguos Libres y Aceptados Masones. Libros de Actas de las Sesiones. 1887 - 1987.
  • Logia Luz de Occidente. Guanajay, Gran Logia de Cuba de Antiguos Libres y Aceptados Masones. Expedientes de miembros.
  • Logia Luz de Occidente. Guanajay, Gran Logia de Cuba de Antiguos Libres y Aceptados Masones.Papelería suelta.
  • Obispado de Pinar del Río. Expediente de título de propiedad de bóveda a favor de Guillermina Aramburu. 1928.
  • Joaquín Nicolás Aramburu Torres
  • Aramburu, Joaquín Nicolás