Artillería estriada de avancarga
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Artillería estriada de avancarga. A partir de la segunda mitad del siglo XIX, la introducción del estriado del ánima y las mejoras tecnológicas, trajeron consigo numerosas innovaciones que provocarían una auténtica revolución, no solo en la estructura de las armas de fuego, afustes y proyectiles, sino en su empleo táctico en el combate.
Historia
Desde el siglo XVII se habían hecho algunas tentativas para sustituir los proyectiles esféricos por los cilidrocónicos, pero su aceptación definitiva fue simultánea con el estriado del ánima capaz de estabilizar su vuelo.
En 1845 el oficial de artillería del ejército piamontés Giovanni Cavalli propuso el empleo de proyectiles cilindrocónicos capaces de tomar un movimiento de rotación alrededor de su eje por medio de dos salientes o tetones, que entraban en otras tantas estrías helicoidales en el ánima de la pieza, idea que aplicó a un cañón de hierro de grueso calibre, al que se rayó inicialmente con dos estrías.
Estriado
La forma del estriado depende del sistema que tenga el proyectil para ser conducido por las rayas. Primero fue el proyectil de tetones, luego de "envoltura de plomo", después los de aros de cobre y bandas. El número y forma de las estrías del ánima sufrieron diversas modificaciones, a medida que se hacían nuevos estudios y experiencias. Para campaña se adoptaron en principio seis estrías trapezoidales. Un sistema ciertamente curioso, fue el inglés Withworth, que dio a sus proyectiles una forma cuya sección transversal era un hexágono regular
Primeros usos
Hacia 1858, el cañón rayado de avancarga había sido introducido en Italia y Bélgica, mientras que en Francia se trabajaba de modo activo y en Inglaterra, en el cañón rayado de Armstrong. Para esta fecha, en España comenzaba sus ensayos de estriado, tanto en piezas de hierro como de bronce. En Estados Unidos, la artillería rayada de avancarga, cañones del sistema Parrot fueron ampliamente empleados durante la Guerra de Secesión, en diversos calibres y tanto terrestres como navales, por ambas partes.
Desventaja
Sin embargo, las desventajas de cargar las piezas por la boca, que exponía a la dotación al fuego del enemigo u obligaba a retirar la pieza a cubierto para cargarla, hizo que hacia 1867 se impusieran los cañones de retrocarga.
Véase también
- Cañón (arma)
- Cañón Parrot
- Cañón Krupp
- Cañón de Cuero
- Culebrina (arma)
- Retrocarga (arma)
- Arma automática
- Artillería Napoleónica
Fuente
- Colectivo de autores. Historia Militar de Cuba (1510-1868). Centro de Información para la Defensa. MINFAR.
