Bares y cantinas en el San Germán republicano
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Bares y cantinas en el San Germán republicano.
Introducción
El primer bar registrado en el territorio data del año 1917, propiedad del señor Paulino Cariacedo, venido de España y establecido primeramente en Estrada. Más adelante y específicamente en la localidad se registra un bar que se remonta a 1918, propiedad de Emilio Conde y el último al que se tiene referencia se registra en 1959 a nombre de Rafael Anzardo.
Origen de los propietarios
Resulta muy curioso un bar registrado en Estrada en el año 1923, propiedad de una guantanamera nombrada Candita Planché y denominado “El Infierno”. Entre 1920 y 1930 aparecen registrados 50 bares, en la década de 1940 dieciocho y en la de 1950 trece. Los propietarios de estos establecimientos, según su origen, 24 eran españoles, 32 cubanos, 14 jamaicanos, 3 haitianos, 2 chinos, un francés y un portorriqueño. En las antiguas colonias aparecen bares registrados en Estrada, Rey, San Francisco, Van Horne, La Cuba, La Canoa, La Cuchilla y El Zorral. es notable un bar denominado “La Cucaracha” en la colonia de San Francisco en el año 1925, propiedad del jamaicano Samuel Bidgen.
Descripción
Todos estos establecimientos tenían su propia infraestructura: empleados, la cantina, el reservado y la música para ambientar y agradar el cliente.
Estos establecimientos eran lugares de gran afluencia de público. La presencia de los traganíquel le daban un sentido pintoresco, donde por unas monedas se podía disfrutar de la música de su preferencia. También el Hotel Europa, La Barra, el Union Club y el Club Fidelidad contaban con cantinas.
La cerveza embotellada costaba 20 centavos, si se consumían dos, 35. Se compartía con amigos y amigas según el caso. No era usual tomar en la calle. También se consumían alimentos ligeros y algún trovador se hacía presente. Las mujeres que trabajaban en los bares eran explotadas y discriminadas por la sociedad, y en ocasiones eran utilizadas como objeto de placer sexual.
Bares más famosos
Bar de Cabilla, nombrado primeramente “El platanal de Bartolo”, situado en la calle 23 al lado de la farmacia, ocupaba un espacio de la tienda que allí se situaban. A él asistían personas de buena posición: comerciantes, colonos. En este bar trabajaba una hermosa doncella a la que denominaban El Látigo Negro. Era muy popular el bar de Dominga Cariacedo, el bar de Jaramillo, el de Dosú, el de Durán, y el de María Mulatón. Más allá del servicentro se sumaba el bar azul. Otros bares conocidos como el de Cabello, el de Toraño y el de Pepito Gómez en plena avenida Kerr quedan en la memoria histórica.
Fuentes
- Calzadilla Expósito, Pedro Jorge. La actividad comercial en el San Germán republicano. Holguín: Municipio Urbano Noris.Consultado en marzo de 2014.
