Batalla de Shiroyama

Batalla de Shiroyama
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Parte de Rebelión Satsuma
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Fecha 24 de septiembre de 1877
Lugar Kagoshima, Japón
Resumen Choque entre la tradición guerrera japonesa (Samuráis y la élite guerrera y el ejército moderno del emperador), nacido de la Restauración Meiji.
Resultado Victoria definitiva de la Armada Imperial, terminando con la Rebelión Satsuma. Muere el último samurái.
Beligerantes
Armada Imperial Japonesa Samurái de Satsuma
Comandantes
Yamagata Aritomo Saigō Takamori

La Batalla de Shiroyama (Shiroyama no tatakai) ocurrió el 24 de septiembre de 1877, Kagoshima, Japón, entre los samuráis y el ejército imperial, producto del conflicto ocasionado por la Rebelión Satsuma.

Origen

Saigo último samurái
Saigo Takamori

Los samuráis eran una élite militar que combatieron bajo el mando de diferentes caudillos llamados Shōgun. A partir del siglo XVIII se había convenido reducir los privilegios de esta casta guerrera, lo cual culmina con la restauración de los Meiji en el siglo XIX.

Las reformas hechas por el emperador Meiji afectaron a los señores feudales (daimiyûs) y a los samuráis.

Medidas tomadas

  • Sustitución de los feudos por las prefecturas, controladas y a cargo del poder central.
  • Abolición de los privilegios de los samuráis.
  • La prohibición del uso del sable japonés (katanas) en público, cambio de vestimenta.

El shōgun Saigō Takamori, uno de los líderes más longevo del gobierno Meiji, renunció a su puesto, turbado por la corrupción política que especulaba fuera resultado de la apertura a Occidente e instituyó academias en las que los jóvenes adquirían clases de táctica militar siguiendo las viejas tradiciones.

En el viejo feudo de Satsuma, en la isla de Kyūshū, al suroeste de Japón creó una academia militar, en la que preparó al ejército de samuráis que se le unió. Debido al gran arsenal militar que constaba la región de Satsuma.

Takamori informó su propósito de marchar a Tokio a entrevistarse con el gobierno central, al mismo lo definía como corrupto y de una influencia negativa en el emperador, del cual se declara leal. En el camino sitió al Castillo de Kumamoto defendido por las fuerzas del emperador, mientras se hostigaba la fortaleza, algunos soldados imperiales se sumaron a las fuerzas de los samuráis.

Batalla

El ejército superaba a los samuráis en una proporción de 60 a 1. Con 30.000 soldados a su disposición, dotados de artillería y ametralladoras, el general Yamagata Aritomo comenzó el asedio de los 500 samuráis, las tropas imperiales elaboraron un sistema de diques, paredes y obstáculos para impedir la fuga. Los cinco buques de guerra gubernamentales fondeados en la bahía de Kagoshima se agregaron a la fuerza de artillería de Yamagata.

Saigō protegió su posición con un apoyo restringido de mosquetes y sin cañones. Fundió algunas estatuas budistas de los templos, usando el bronce obtenido para la confección de balas.

Entonces Yamagata le propuso en una nota cordial poner fin a la masacre y rendirse, propuesta que Saigō rechazó, por ir contra el código Bushido que alentaba a los nobles guerreros.

En la noche del 24 de septiembre las fuerzas imperiales realizaron un bombardeo potente de la artillería, invadiendo en las primeras horas de la mañana, la montaña. Los samurái, ante el gran armamento enemigo, en línea frente a la armada, combatieron cuerpo a cuerpo con espadas, para lo que no estaba entrenado el ejército imperial. Los samurái, diestros en el uso de la espada, lograron frenar a la armada con movimientos básicos de entrenamiento.

Por algunos minutos, las filas de Saigō se mantuvieron en sus puestos, pero luego debieron retroceder debido a la diferencia de número. El ejército imperial embistió desde todos los frentes y a las 6 de la mañana 40 samuráis permanecían con vida y Saigō yacía herido de muerte, circunstancia que no fue obstáculo para que su seguidor más leal, Beppu Shinsuke lo cargara hasta la base de la colina en sus hombros, actuando como kaishakunin y le auxilió durante el seppuku antes de que pudiese ser capturado, según cuenta la leyenda.

Posteriormente de la muerte de Saigō, Beppu y los últimos samurái empuñaron sus espadas y marcharon cuesta abajo enfrentándose a las fuerzas imperiales, que terminaron con sus vidas, este último asalto liderado por Beppu Shinsuke, mano derecha del ya muerto Saigō. Con estas muertes, la Rebelión de Satsuma llegó a su fin y caía el último samurái.

El 22 de febrero de 1889, de manera póstuma el Emperador Meiji indultó a Saigō. En el Parque Central de Kagoshima se encuentra una estatua erigida en su memoria.

Consecuencias

Luego de terminar la batalla y finalizar la rebelión, concluiría la clase samurái, originándose un ejército japonés occidentalizado y modernizado, las armas de Occidente creaban una nueva perspectiva para el desarrollo de las guerras, quedando obsoletas las armas tradicionales.

Fuentes